Prólogo

Hoy le daré una gran sorpresa a mi novio, es nuestro primer aniversario, estoy muy contenta, le dije que hoy no tendría tiempo para estar con él, no se imagina la sorpresa que le haré.
Ya entré a su apartamento, felizmente tengo las llaves, oigo unas voces en su habitación debe estar ahí, comienzo a acercarme hasta que escucho una voz femenina. 
--¿Crees que nos descubra?
--Claro que no mi amor, es muy inocente e ingenua, según me dijo ahora debe estar con sus amigas.
--Tienes razón, la pobre ni siquiera sospecha que tú eres mi novio y estás con ella por una simple apuesta. 
--Ella jamás estaría a tu altura ni podría llegar a llamar la atención de un chico tan popular como yo.
No es cierto, debe ser una broma, entro para ver que sucede. Me quedo  congelada al ver como están. 
--David...--Ambos miran hacia mi y puedo ver de quién es la voz femenina--Lourdes...--Lourdes sale del regazo de David--¿Por qué? ¡¿Por qué me hicieron esto?! ¡¿Por qué jugaron con mis sentimientos?!
--Pobre, ingenua niña; mirate nadie se fijaría en ti, no tienes ni físico y eres demasiado tonta; jamás lograrías tener un novio como él
--Pero tú eras mi mejor amiga y yo te amé
--Ni siquiera  eres linda, que me haría quererte jamás estarias a mi altura, ¿Creiste que yo te amaba? Todo esto fue parte de una apuesta con mi hermosa novia. 
--Lo van a lamentar, es cierto que soy un poco gordita y no soy tan linda, pero yo sí sé amar, algún día pagarás lo que hiciste, no seré yo quien lo haga pero el mundo da vueltas y algún día lamentaran lo que hacen
--Sí, sí, lo lamentaremos; ahora ¿Te puedes ir?, estábamos en algo importante 
--Hasta la próxima--Salgo corriendo y dejo caer el regalo que traje, contengo las lagrimas, no lloraré nunca más. 
Mejoraré y comenzaré a buscar a esa persona especial que me ame de verdad y nunca más volveré a llorar.