Mientras él me sujetaba fuertemente con sus brazos, su respiración transmitía una corriente que invadía todo mi cuerpo. Cada segundo se apoderaba de mí y desbloqueaba sensaciones que jamás había sentido. Lo irónico era que estaba sucediendo con él, una persona que creí que jamás volvería a ver.
Saco un brazo, yo creía que iba a parar, pero al mismo tiempo sentía miedo. Sin embargo, más fuerte era el sentimiento de las vibras que así, en mí... Pero lo que hizo me llevó a un viaje astral. Era mi primer beso, tanto en el presente como en mi pasado.
Sus besos sabían a caramelo; creo que jamás olvidaré ese momento. Él me miró y yo lo miré; las ganas de que sucediera eran más evidentes.
Mientras su alma y la mía seguían en su viaje astral, me pregunto.
si estaba segura.
Pero, ¿qué podía decir Si no era capaz de tener el control de mí misma? Su celular comenzó a sonar insistentemente.
"¿Por qué no contestas? Parece que es una emergencia", dije.
"No es importante", respondió.
Me siguió besando, pero el sonido de su celular no me dejaba concentrar.
Vino, lo mandó a buzón y era ella, alguien que ni me imaginaba que existía. "Hola, mi amor. Esta semana iré a visitarte, ya te extraño. Te amo". Me quedé paralizada, mi cerebro estaba procesando en ese momento. Solo lo empujé, sus brazos, y me levanté para acomodar mi vestido.
"No es lo que tú crees, déjame explicártelo". Mientras bajaba las escaleras, lo ignoraba completamente, pensando si era el niño del que un dia conoci. "
No creo que haya jugado así conmigo". Era increíble. El primer hombre que me hizo sentir en el cielo sería el mismo que me iba a bajar de él. El mismo que me hizo sentir esas clases de sensaciones, sería él quien me haría llorar.