Sinopsis

En Guadalajara, el Padre Martín es un joven sacerdote recién asignado a una parroquia en un barrio popular. Aunque su vocación es firme, la vida en la comunidad lo pone a prueba cuando conoce a Laura, una joven de la localidad que siempre ha sido parte de la iglesia. Laura, con su personalidad fuerte y decidida, se involucra activamente en las actividades parroquiales, lo que la lleva a acercarse al Padre Martín.

A medida que trabajan juntos, la atracción entre ellos se vuelve inevitable. Martín, quien siempre ha mantenido su vida bajo control, comienza a sentirse cautivado por la joven, pero sabe que ceder a esos sentimientos sería un pecado. Laura, por su parte, lucha contra su propio deseo, consciente de que una relación con un sacerdote está prohibida. Sin embargo, la conexión entre ambos crece cada día más, y la tensión entre lo que dictan sus creencias y lo que sienten se vuelve incontrolable.

Lo que comienza como una amistad de trabajo en la parroquia se convierte en una relación peligrosa y pecaminosa, que desafía no solo las reglas de la iglesia, sino también la moral de la comunidad. Mientras los rumores empiezan a circular, Martín se enfrenta a su propia crisis espiritual, cuestionando su fe y su vocación. La relación entre ellos se convierte en un juego de mentiras, secretos y pasión prohibida, mientras la presión externa aumenta.

En medio de un escándalo el padre Martín y Laura deben decidir si seguir su amor, aunque destruya todo a su paso, o sacrificar su felicidad para mantener las apariencias y salvar sus almas.

ACLARACIÓN

Lo siguiente narrado es ficción, lo que yo planteo son a base de los conocimientos adquiridos dentro de la Iglesia católica y no se pretende ofender a nadie, y tampoco que ustedes lectores malinterpreten lo aquí escrito.

Recuerden que un sacerdote es humano y se pueden enamorar y eso no es pecado, pecado es cuando él decide vivir una doble vida. Así que, antes de empezar les dejo unos pequeños datos que les servirá antes de juzgar mi novela.

1. Un sacerdote se puede enamorar y se puede casar con la mujer de la que se enamoró, lo único que hace cuando pide la dispensa papal (un documento en el que pide su renuncia eclesiástica al papa) es dejar de ofrecer sacramentos, más su sacerdocio es eterno.
2. Hay iglesias católicas en los que los sacerdotes se pueden casar (esas iglesias son las de rito oriental)
3. Esto es importante que lo sepan, el papa no prohíbe no se casen (punto uno), hay sacerdotes que antes de serlos estuvieron casados, sin embargo, cuando murieron su esposa pudieron ordenarse, ya que es una regla el celibato.
4. Sí conocemos un sacerdote católico de rito latino (los que no se pueden casar dentro del sacerdocio) y por amor a una mujer renuncia a su celibato, no los juzguemos, ellos antes de pedir la dispensa papal entraron en una crisis que nosotros no nos podemos imaginar.

Aclarando estos puntos que se tocaran en mi novela, deseo de todo corazón que le des ese apoyo y que cada página sea una aventura inolvidable.