En manos de la bestia

Sangre codiciada 3

 

¿No Estaba confundida? ¿entonces es verdad que aquel vampiro murió después de haberse alimentado de mí? Daven tiene razón, no hay ninguna marca, no soy solo yo, Irina y Stephan también notaron la herida de la mordida ¿Qué es lo que esta pasando? No hay manera de que un vampiro muera, así como así solo por morder a un humano, eso solo ocurriría con…el heredero de la flor de aconito, pero es imposible, yo soy una mujer, además no hay más evidencia de que yo sea la heredera de ese poder…

Daven y Stephan estaban por ir a sus entrenamientos, pero no podían pasar por alto ese tema.

—Deja de darle vueltas al asunto, probablemente en el ajetreo se llevaron una bomba de luz artificial y no lo recuerdan. —manifestó Stefan con seriedad.

—¿Y cómo explicas entonces que no haya marcas en su cuello? Si hubiese sido una bomba de luz, el cuerpo quedaría petrificado, no convertido en un montón de cenizas. —dijo Daven mirándolo fijamente.

—¿Qué estas insinuando?

—¿Y si ella es el heredero de la flor de aconito?

—¿Qué? Eso es imposible, es una mujer, no tiene sentido. —manifestó Stephan con negación.

—¡Ese es el problema! Hemos esperado el nacimiento de un varón, pero puede que hayamos estado sumergidos en la ignorancia ¿y si sí nacio el salvador, pero es una mujer? Linéa es la hija mayor del jefe. —externó Daven agarrando a Stephan de la ropa Y añadió. — tu mismo viste que las marcas desaparecieron, encuéntrale una explicación a eso.

—Si tanto te carcome la duda, hazle una herida tu mismo, ábrele la carne y ve con tus propios ojos si es o no la heredera de la flor de acónito, úsala en el campo de batalla y hazla nuestra carnada, solo así dejaras de parecer un lunático. —exclamó Stephan ya cansado de su actitud.

—Tienes razón. —murmuró Daven dejando a Stephan absorto y añadió. —lo haré.

—¿Qué? ¿No sabes distinguir el sarcasmo? —le preguntó Stephan preocupado.

—Tenemos que ponerla aprueba, llevémosla con nosotros a una de las cacerías.

—Estás loco.

Karsen Herleif y Bladimir también habían notado lo ocurrido, estaban al tanto del plan de Daven para revelar de una vez por todas si Linéa era la futura líder del clan.

—No podemos exponerla de esa forma. —manifestó Herleif oponiéndose rotundamente.

—Vaya prometidos les tocó a las señoritas ¿piensan arriesgar a la mujer que tiene más probabilidades de engendrar al heredero? Creí que eran más inteligentes. —expuso Bladimir agarrándose la cien.

—Esta noche nos toca ir de caza, yo también digo que nos quitemos esta maldita duda de una buena vez, obviamente no dejaremos que la maten, queremos ver hasta que punto nuestras sospechas son ciertas. —exclamó Karsen cruzándose de brazos.

—Ya esta decidido entonces, somos la mayoría quienes estamos de acuerdo en esto, esta noche sabremos si Linéa es la asesina de lobos. —manifestó Daven con una mirada decidida.

Por otro lado, Linéa he Irina se estaban preparando para su primera noche de casería, el día había transcurrido con rapidez y su padre les había dado un amuleto bendito con las oraciones de los sacerdotes para que regresaran sanas y salvas, les puso una cruz en la frente con agua bendita y después les otorgó sus armas especiales, a Irina le dio un arco y unas flechas con la punta de plata que había hecho el mismo, a Linéa le entregó dos armas de fuego que él había utilizado en sus años de casería.

—¿Estas seguro que quieres darme esto? —le preguntó Linéa extrañada.

—Por supuesto, eres mi hija mayor, quiero que las uses y asesines a todos los seres de las sombras que puedas. —le dijo Noren con seriedad.

—No voy a decepcionarte, haré que te sientas orgullosos de mí, no te arrepentirás por la decisión que tomaste.

—Yo nunca me he sentido decepcionado de ninguna de las dos, dejen de pensar así, si no quería hacerlas parte de las valquirias era por temor a que algo malo les sucediera, pero no puedo cuidarlas si eso las hará sentirse como aves enjauladas, debo encontrar otra manera de protegerlas.

—¿Podrías reconsiderar lo del matrimonio? Se que ya hiciste mucho por nosotras al no convertirnos en esposas Suguru, pero…necesito tiempo para asimilar lo de mi compromiso con Stephan y se que Linéa igual, no estoy diciendo que se cancele, se que es por un bien mayor, pero, quizá no debamos tener hijos tan pronto. —propuso Irina cabizbaja.

—No tocaremos más ese tema Irina, escogí a hombres buenos y capaces de protegerlas, ya me he retractado lo suficiente, piensa que el respeto a mi palabra esta en juego, no puedo cambiar de parecer, así como así, esta es una noche muy especial para ustedes, salgan y demuéstrenos a todos de que están hechas, piensen en dar lo mejor y que las estaré esperando aquí.

—Si papá… —Noren las abrazó con fuerza y las acompañó a la puerta principal donde los estaban esperando los cinco lideres.

—Cuento con ustedes. —les dijo Noren mirándolos con gran seriedad.

—Si señor.

Irina y Linéa miraron a su padre por ultima vez y se fueron acompañadas de los cinco guerreros, estaban a prueba y esa noche terminaría marcando sus destinos para siempre, la cacería se llevaría acabo en el bosque de “Oulander” uno de los lugares predilectos para las riñas entre lobos y vampiros, era la línea divisora entre sus territorios y habían pasado noches donde los enfrentamientos entre estas razas causaba demasiado alboroto, era el lugar perfecto para que Linéa mostrara el verdadero poder de su sangre.

No solo el príncipe Odegar la tenía en la mira, los rumores de su peculiar sangre también habían llegado a oídos del rey de las bestias “Arnes”

—Tenemos que actuar primero, movámonos antes de que esos vampiros la tomen, arranquémosela de las garras. —propuso Vigo un lobo beta dirigiéndose a su alfa, quien estaba sentado en su silla.

—Puede que sea solo un rumor jefe, no se fie de este vampiro, puede que se trate de una trampa, no sabemos cuál de las dos es la que posee la sangre sagrada. —manifestó Logi con voz calmada, El alfa estaba torturando a un vampiro que habían capturado para sacarle información sobre la heredera de la flor purpura y no dejaba de gritar por el dolor.




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