El nuevo lobo de la manada.

Linéa y Daven se habían abrazado con tanta nostalgia y desesperanza que no midieron el tiempo que permanecieron juntos, trataban de consolarse de alguna manera, era una realidad que en el pasado se habían sentido atraídos el uno por el otro, aunque Daven era un hombre reservado, se guardaba muy bien sus sentimientos, Linéa le parecía una mujer bonita, pero no era su aspecto físico lo que le causaba admiración, si no su carácter tenaz he inquebrantable, la forma en la que se aferraba a convertirse en  una ayuda para su clan y su familia, la manera ferviente en la que cuidaba a su hermana y se esforzaba por destacar aun a pesar de sus deficiencias.

Eso era lo que a Daven le parecía hermoso de Linéa, su valentía y su carácter que, a su parecer, eran mejor que cualquier apariencia.

 —¿Cómo está mi padre? Se sincero conmigo por favor.

—La condición de su corazón ha empeorado, ya no puede hacer el mismo esfuerzo de siempre, se fatiga mucho. —externó Daven con pesar.

—Debí curarlo cuando pude…ojalá le hubiera insistido más, pobre de mi papá, debe dolerle mucho su brazo. —manifestó Linéa llena de culpa.

—Irina quería venir a buscarte, estaba dispuesta a convertirse en loba con tal de salvarte, pero no era buena idea, es igual que tú, jaja, muy emocional. —le dijo Daven tratando de hacerla reír.

—Deja eso… —Linéa le dio un golpecito en el pecho y desvió su mirada hacia su rostro para grabárselo en la memoria por si no volvía a verlo.

Que hermoso es…nunca se lo dije, lo mucho que había oído hablar de él, el interés que despertaba en mi conocer al increíble líder de la casa de Oberlan, el chico de los cabellos de plata, diestro con las espadas, veloz como un rayo, misteriosos como ningún otro, el único que vino a salvarme, el hombre que sacrificó su humanidad para que yo tuviera una esperanza, el chico que pudo haber sido mi esposo, mi héroe…

 Linéa Miró fijamente a Daven y ambos se acercaron lo suficiente como para poder darse un beso, pero antes de que eso pasara, Rengo y Murlad los interrumpieron.

—¿Mi lady?

—¡Rengo! ¡Murlad! ¿Qué hacen aquí?  —les preguntó Linéa con nerviosismo y se alejó de Daven con gran rapidez.

—La estábamos buscando ¿Cuántas veces tenemos que decirle que no salga sin avisarnos? ¿Si se encuentra en peligro como podremos protegerla?

Rengo y Murlad miraron a Daven y lo reconocieron por los rumores de que él era el nuevo lobo de la manada y no sabían cómo saludarlo, así que hubo un gran silencio incomodo.

—Chicos, él es Daven, el alfa lo convirtió recientemente, es un gran amigo mío, era parte de mi clan, pero decidió ser parte de la manada, es como mi familia, por favor sean amables con él, Daven ellos son Rengo y Murlad, mis guardaespaldas, son muy buenos conmigo, puedes confiar en ellos.

Linéa realmente estaba muy nerviosa, Daven no decía ni una palabra y parecía que los estaba examinando de pies a cabeza para saber si eran dignos de cuidar a Linéa y cuando la tensión estaba apunto de ser insoportable, él extendió su mano para saludarlos de manera formal.

—Gracias por cuidar de Linéa. —expresó Daven con seriedad.

—Ah, no es nada, es algo escurridiza pero no es una molestia cuidarla.

Rengo y Murlad no mal interpretaron la cercanía de Daven y Linéa por que entendían que ella era como una princesa para él y el resto del clan de la flor púrpura, pues ella era la heredera de la sangre sagrada.

De pronto, Adbin se reunió con ellos y los miró detenidamente.

—¡Sobrevivió! Es un alivio ver que ya puede mantenerse en pie, caballero Daven, eso habla muy bien de usted, quiere decir que es un hombre fuerte y que su cuerpo fue digno para recibir el poder del licántropo que mi amo le ofreció ¿Cómo se siente? ¿Qué tal su olfato? —le preguntó Adbin con una sonrisa.

—Cualquier aroma me parece profundo, aun no me acostumbro. —le respondió él con tranquilidad.

—No se preocupe, el tiempo le dará la oportunidad de acostumbrarse a vivir como un lobo, mañana se llevará acabo una asamblea donde el alfa anunciara buenas noticias, habrá luna llena, será una excelente oportunidad para que lleve a cabo su primera transformación, espero no este muy nervioso, es doloroso al principio, pero después el cuerpo se acostumbra, debo confesarle que es una verdadera rareza tener lobos blancos en las manadas, en la antigüedad se les consideraba mágicos y hasta divinos, por culpa de la leyenda de los hijos que tubo la luna, sus descendientes nacían con el cabello blanco y poseían una belleza extraordinaria como la suya, seguramente nuestras hembras se le irán encima y lady Artemis ya no se sentirá tan sola, recuérdeme presentársela en algún momento.

—Se refiere a la favorita del alfa…la mujer peli blanca que vi esta mañana, no me gustaría que Daven conociera a una mujer con ese temperamento tan horrible… —se dijo Linéa así misma mientras escuchaba todo.

—Me parece bien, yo tampoco he conocido a ninguna otra persona que tenga el cabello blanco, sería interesante. —manifestó Daven mirándolo a los ojos.

—Si, lo haré lo antes posible, si no le parece inconveniente le pediré que me acompañe, le mostrare el castillo y le explicare lo que el alfa espera de usted y su desempeño como uno de los guerreros de la manada, se unirá al ejercito personal del alfa, es un honor para usted, la mayoría sube de rango para pertenecer a un grupo tan selecto, pero dada su fama, es el candidato perfecto para este papel.

—Daré lo mejor de mí para dar la talla.

—Eso espero. —le dijo Adbin con una sonrisa brillante.

—Daven…

—Con su permiso mi lady, hoy le esperan muchas actividades de belleza para prepararla para la presentación de mañana, las modistas están en la habitación, no las haga esperar, están ansiosas por trabajar con usted.

—Eh, si…

Linéa y Daven se miraron por ultima vez y ella sintió que su corazón se llenaba de angustia cada vez que lo veía alejarse, pues, aunque Daven era un guerrero y ya estaba acostumbrado a la batalla, tenía miedo de la manera en la que los lobos lo fueran a tratar, al haber dejado su clan original para unirse a ellos, no quería que lo llamaran traidor y rogaba por su bienestar de día y de noche.