En Un Cuento No Tan De Hadas

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Llegue a cruz y azul y solo los abrace buscando consuelo y no llore solo miraba la sala de emergencias donde había entrado Lu, lo que necesitaba era relajarme odiaba la idea de estar en un maldito hospital, pero no me quedaba otra que estar como buena madre por Lunna, - necesito un trago- me digo a mí misma y me voy al comedor, y me vuelvo al escuchar a una enfermera respondiéndome que esto es un hospital no un bar… me hizo enojar tanto que me senté sola, ignorando las palabras de John y mis hijos, mientras me hacían preguntas.

Pasaron veinte minutos y vino el medico comentándonos que tenía que quedarse hoy hasta darle el alta a la tarde, asentí y abrí la boca para preguntar.

  • ¿Qué le sucedió? Que necesita - al escuchar a John preguntar primero me molesto, pero lo ignore solo quería saber para irme a casa a tomar un trago ya que no podíamos quedarnos todos, ni llevarnos a Lu solo quería saber que seguía. Mis hijos seguían sentados en la sala.

 

  • Al parecer necesita otro medicamento señor Rivarola, lo lamento, pero…- al detenerse nos percatamos de nuestros hijos atrás nuestro, y continúo cambiando de tema. -  enfermera quiere llevar a los hermanos de la señorita Lunna a su habitación? Chicos su hermana duerme, pero despertará pronto, ¿quién se quedará con ella? - a continuación, levanta una mano Cruz y sigue a la enfermera en cuanto a Azul seguía alado nuestro, lo cual tuve que hablar.
  • O te vas con tu hermano a verla hasta que te llame la enfermera o te quedas sentada en la sala de espera. - al ver que le hable mal y enojada se fue a la sala de espera, John me miro mal cuando le hable así y solo dije. - continué.

 

  • Necesita otro medicamento ya no le está haciendo efecto la pastilla que le estamos dando, hoy mismo antes de que se valla Lu le daré el medicamento a ella y le daré las indicaciones, las tiene que tomar antes del desayuno, tiene que quedarse en observación hoy hasta la tarde, pueden venir a buscarlos tipo siete, no se preocupen aquí la cuidaremos bien como todas las veces que la traes Miriam. - al escuchar eso me recordé que no le había contado nada a John sobre los días de enero que no estuvo…

 

  • ¿¿¿¿Como que vino antes???? ¡Miriam! -(grita) al ver que le oculte algo importante estaba por matarme ahí mismo pero continuo...- ¡Mi Hija! doctor Núñez de ahora en adelante quiero que me cuente todo a mí…-
  • Pero…-digo

 

  • Pero nada, mi hermano paga este hospital y la obra social de mis hijos, lo cual me are cargo de mis hijos yo desde ahora, asique me llama a mí, no a ella, y más por Lunna por favor.

 

  • Por aquí señor Rivarola, vamos a hacer los papeles…- el doctor Núñez me mira decepcionado y se dirige con John a la oficina. Creo que va a empeorar todo desde ahora.
  • ¿Cristian que sucede? - veo a mi hijo correr hasta aquí que me asusta, lo cual justo viene John y nos mira, y Cruz dice.
  • Vallan a casa a planear la salida familiar que tanto quieren y cuando se haga la hora vengan a buscarnos, no quiero verlos pelear en público por favor y menos aquí, ya hicieron bastante en casa. Nos escuchó, me quedo fría, sin saber que hacer nos mira, abraza a su padre y se va, lo cual miro a John y me quita la chaqueta de mi mano y vuelve a la oficina del médico, me doy cuenta de que solo volvió por su billetera.



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En el texto hay: salud, violencia, juventud y amor

Editado: 29.12.2022

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