Entramos y vemos a la otra familia sentada en la sala con sus maletas a un costado parece que nos estaban esperando para repartir las habitaciones.
-Buenas tardes –dice mi madre y saluda a todos.
-Buenas tardes –habla la madre de Dylan.
Mi padre solo saluda a la madre de Dylan y le da la mano a Erik y a Dylan.
-Lydia no piensas saludar –me dice mi madre.
-Buenas tardes –digo y le doy un beso en la cara a cada uno de los padres de mi novio falso y cuando lo voy a saludar a él mi dice mi madre:
-No tienes que tener pena en saludar como se debe a tu novio ya todos los aquí presentes sabemos que están saliendo –juro por dios que, si no fuera mi madre la mato por la mena que me iso pasar diciendo eso, miro a Dylan y lo veo sonreír.
-Es que vamos lento después de todo tenemos dos meses para conocernos –le respondo a mi madre, no se me olvida el reto no voy a ser la primera en dar el primer paso.
-Buenos ya que estamos todos aquí vamos a repartir las habitaciones –dice Erik –Vamos a estar en pareja yo y mi mujer en la de aquí en el primer piso, Víctor y su mujer en la primera el segundo piso y Dylan y Lydia en la segunda del segundo piso ya que solo tenemos tres habitaciones en la casa.
-Y porque tenemos que ir yo y Dylan juntos –digo algo molesta porque no quiero compartir cuarto con Dylan.
-Tranquila cariño solo van a compartir cuarto porque en esa habitación hay dos camas me dice la madre de él.
-Bueno que más das ya está decidido como todo cierto –digo molesta y el padre de Dylan asiente –si me permiten me voy para la habitación a desempacar.
Subo las escaleras y veo que hay tres puertas las voy abriendo para ver ya que dijeron que solo había tres habitaciones, la primera puerta es una habitación, la segunda es un baño y la tercera es nuestra habitación entro y veo que efectivamente hay dos camas me decido por una que está pegada a la pared. Veo que hay dos puertas abro una y es un baño y la otra es un armario así que tenemos que compartir el armario igual, me pongo a desempacar y a acomodar mi ropa en el armario no pienso salir hoy de aquí pero mañana si voy a caminar un poco para conocer los alrededores.
Siento que la puerta se abre y se quién es así que sigo en lo mío y lo oigo sentarse en la cama que yo elegí.
-Espero que no te moleste compartir cuarto conmigo –me dice.
-Para nada tú vas a estar en tu lado del cuarto y yo en el mío –le respondo –tu no me molestas y yo no te mato –añado y oigo como se río.
-Si me matas a besos me dejo sin ningún problema –me dice y ahora soy yo la que se ríe.
-En tus mejores sueños –le digo y siento como se agacha detrás de mí y me susurra al oído.
-No quieras saber todo lo que te hago en mis sueños princesita –dios se me erizo hasta los pelos, este reto va a estar difícil.
-Pervertido es lo que eres –le digo me giro y quedo a centímetros de su cara de inmediato me arrepiento de lo que hice, pero no me puedo apartar porque se va a dar cuenta que me pongo nerviosa –Que lastima que en eso se van a quedar en tus sueños –le digo y lo veo tensarse, pero con lo mismo me abraza por la cintura y me pega a su cuerpo.
-Eso ya lo veremos princesita este reto lo gano yo –me dice ahora a centímetros de mis labios podía hasta sentir su respiración agitada al igual que la mía y allí arrodillados frente al almario sentí la tentación de besarlo, pero me contuve porque no puedo perder, me da un beso en la cara y se levanta y camina hacia la puerta del baño –Por cierto, te queda bien ese short, pero te verías mejor sin el –me guiña un ojo y se tranca en el baño.
-Por dios me muero que acaba de pasar –Que intenso todo –Y tú siempre apareces en el momento más inoportuno –Yo amo a este tipo deberías aceptar lo que sientes y aprovechar que van a compartir cuarto –Ni muerta
Salgo un rato del cuarto porque necesito coger aire y veo a mis padres en la sala.
-Hija que bueno que bajas queremos informarte que mañana empiezan los entrenamientos –me comunica mi padre –les enseñaremos algunas técnicas y después las van a poner en practica entre ustedes.
-Está bien padre –le digo.
-A y ve a cambiarte q en media hora vamos a comer –me dice mi madre.
Regreso a mi habitación y veo que Dylan esta acostado en mi cama con su teléfono en la mano, no le digo nada cojo una muda de ropa y me meto al baño. Salgo ya vestida con un vestido algo corto con estampado de flores, un abriguito porque está haciendo algo de frio y un par de tenis algo casual ya que pienso cenar y volver para acá. Veo que Dylan aún está en mi cama.
-Hey idiota estas en mi cama –le hago saber.
-Uno te trata con cariño y tú me dices idiota –se hace el ofendido.
-Es de cariño –le digo en tono de burla.
-Ya es algo por lo menos me tienes cariño –me dice y me arrepiento de haberle dicho eso –Y en cuanto a lo de la cama, esta va a ser mi cama.
-Ni lo sueñes yo elegí primero que tu –le digo.
-Si quieres dormimos juntos –me dice y mira fijamente.
-Ni loca que yo estuviera –le digo –Ya es ahora de la cena –le digo y me encamino hacia la puerta.
-Espérame para que piensen que bajamos juntos –me dice él y se levanta salimos y serramos la puerta, cuando vamos bajando las escaleras Dylan entrelaza nuestras manos y a mí me sube una corriente eléctrica por todo el cuerpo.
- ¿Qué haces? –le pregunto.
-Fingir te acuerdas –me responde como si fuera obvio y seguimos bajando cuando llegamos al comedor todos nos miran y después a nuestras manos juntas y como si estuviera ensayado todos esbozan una sonrisa. Nos sentamos en la mesa uno al lado el otro.