Encuéntrame

Capitulo 2

                                      *presente/futuro*

                                               la fiesta.

Estoy saliendo del aeropuerto, después de 8 horas de atraso, si dirán que no puede pasar pero si, si paso. me quedo parada afuera buscando a mi amiga Kendra para que me lleve a casa ya que me dijo que vendría por mi, veo por todos lados hasta que finalmente la veo saliendo de su auto, Kendra va vestida con un lindo vestido floreado y yo, pues voy con unos pantalones cortos y una camisa negra.

-¡laila!-me grita corriendo hacia mí.

-¡Kendra!-grito yo también y dándole un gran abrazo cuando llega hasta a mí.

-¿cómo has estado? Me alegra verte- me pregunta Kendra un poco emocionada.

-¡Genial! Y ¿adónde me llevarás?

-hay una fiesta cerca de mi casa ¿Quieres ir?- me dice agarrando una de mis maletas rosadas metiendola al auto y haciendo lo mismo con la otra.

-claro, con tal no me olvides y termine pérdida como en las demás fiestas que he ido contigo.-digo metiendome a su auto, Kendra se queda callada un par de segundos.

-eso paso solo un par de veces, no te quejes.

-¿ah si?¿Las 15 fiestas que fui contigo solo son un par de veces?

-espera ¿Las contastes?

-claro que si.

-bueno ¿Quieres ir a la fiesta si o no?

-¿Me prestas ropa?- digo y Kendra da una enorme sonrisa.


***


Bajamos del auto y entramos a la casa de Kendra, la casa de Kendra es hermosa, los muebles son blancos, la mesa, los sofás, literalmente todo. No recuerdo que fuera así cuando me fuí de aquí, subimos unas escaleras que dan directo al cuarto de Kendra. El cuarto era amarillo y el suelo gris, al lado de su cama estaba una gran ventan con cortinas blancas, al otro lado de la cama estaba su escritorio algo desordenado.

-oye, ¿Por qué toda tu casa es blanca menos tu cuarto?- le pregunto.

-no lo sé, vamos agarra lo que quieras de mi ropa y vístete.- me contesta mientras se ponía unos shorts cortos con una camisa rosa de tirantes y unos Vans.

-okay... ¿Tienes algo que no sea tan corto para no mostrar el culo?- dije mientras buscaba entre su ropa.

-toma, pruebate ésto.- me dijo tirando unos shorts cortos no tanto como los suyos pero igual cortos y una camisa que dice "no soy vírgen pero hago milagros". Me veo en el espejos y no puedo evitar reír al ver lo que dice la camiseta.

-¿ya estás lista?- me pregunta Kendra con una mano en su cadera.

-lista.-le contesto cuando terminó de ponerme el mismo estilo de Vans.

***

Tardamos como 15 minutos en llegar a la fiesta, Bajamos del auto, la casa donde supongo que es la fiesta es gigantesca, por las ventanas se miraba que habia mucha gente dentro de la casa con vasos en sus manos. Pasamos por un par de personas que están afuera y llegamos a la entrada, en el interior estaba decorado con globos rojos pegados en el techo con unos listones dorados al rededor de los globos. todo estuviera a oscuras si no fuera por las luces que usan para fiestas, no sé cómo se llaman esas cosas, la gente bailaba cualquier canción que ponía el DJ.

-tengo hambre.-le digo a Kendra que estaba a un lado de mi.

-¿Pero qué dices?

-¿Estas sorda? Que tengo hambre, comida-digo y llevando mi mano a mi boca haciendo como si estuviera comiendo algo.

-si tienes hambre ve a la cocina.-me dice señalando algún lugar.

-¿Podrías señalar dónde es otra vez?-le pregunto, levanta su brazo señalado otra vez un pasillo.

-okay ya vuelvo.-le digo caminando hacia el pasillo, estoy a punto de entrar en la cocina cuando me chocó con alguien, él dijo algo, pero no logré escucharlo. Él sé dió la vuelta, es mucho más alto que yo, así que levante mi cabeza para verlo.

-¿Qué diablos te pasa? - me dijo enojado. yo no puede contestarle, trate de ver su rostro en la oscuridad así que me le quedé viendo un par de segundos. Él estaba con una camisa negra y unos pantalones del mismo color, tenía su cabello negro como si alguien había pasado sus dedos sobre el.

-yo... Ehh... lo siento.- digo y comienzo a caminar de nuevo.

Entro a la cocina y encuentro a un par de chicos riéndose de algo que dijo uno de ellos, camino hasta la nevera, cuando la abro y saco una manzana unos de los chicos me habla.

-¿Cómo te llamas, preciosa?-me dice con una sonrisa que supongo es su mejor sonrisa. Lo ignoro y salgo de la cocina mordiendo mi manzana, de repente siento que me agarran el brazo.

-¿Dónde has estado?- me pregunta Kendra detrás de mí.

-En la cocina, lo supieras si me prestarás atención.

-Si te presto atención.-en dice arrugando las cejas.

-¿Entonces cómo no sabías donde estaba?.-digo poniendo una cara como de "a ver contesta, perra".

-por que...-dice viendo atrás de mi y arrugando poco a poco su cejas.-¿Qué hace Kemper atrás de tí, Laila?-me pregunta sería bueno diría enojada.

-¿Pero de que diablos hablas?-digo dandome vuelta y encontrándome con un Kemper justo enfrente de mí.

¿Cómo pude ser tan estúpida de no pensar que estaría en esta fiesta?

Él está más guapo que cuando me fuí, sus rulos estabas más largos, sus cejas a un más negras, tenía un pequeños rastros de barba haciendolo ver como si hace poco se la hubiera quitado, no le notaban mucho sus pecas pero supongo que es por qué no hay mucha luz en este lugar. Abro un poco mis ojos cuando me doy cuenta que es el mismo chico con el que me choque hace como 15 minutos, doy unos pasos para atrás para no estar muy cerca de él, no estar muy cerca de él es algo que había aprendido por el tiempo... que había compartido con él.

-¿Cuándo llegaste y qué haces aquí?- me pregunta con voz ronca y con la cara muy seria.



#25800 en Otros
#39243 en Novela romántica

En el texto hay: amigos, novelajuvenil, venganza

Editado: 12.07.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.