Capítulo 5: Imperfección.

Todos somos imperfectos.

Yo lo soy, cometemos errores, muchos y terribles errores.

Ella también lo es.

¿Acaso eso importa? La humanidad ha sobrevivido a pesar de eso, muchos se dicen felices a pesar de haber sufrido tanto...¿por qué yo no puedo? ¿Por qué no me creo merecedor de eso?

Ahora me encuentro solo, sin tener idea de que pasará, de si debería de hacer algo para empezar a avanzar o simplemente existir. Sigo pensando en que debí hablarle, sigo pensando en ella, ¿qué le pude haber dicho? Tal vez podría haberle preguntado su nombre, ansiaba conocerlo.

     Eso es extraño, querer conocerla pese a que sólo la he visto una vez, pese a que sé que tendrá defectos, que podría no ser una buena persona, aunque sepa que es probable que siquiera se haya dado a cuenta de que me sonrió, ¿habría sido aquello el detonante de todo esto, una insignificante sonrisa? No, espero que no.

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     Volví al trabajo como siempre, fui a mi siento y observe la pantalla de la computadora apagada con una simple luz parpadeando, ¿por qué no fui capaz de irme? ¿por qué no he sido capaz de abandonar este miserable trabajo? Y entonces, ahí estaba de nuevo, camino hacia los escritorios que se encontraban en frente y pregunto algo a quien estaba al lado del escritorio vacío señalandolo, después puso su bolso sobre el asiento y se fue. ¿Va a trabajar aquí? ¿A eso habrá venido la vez pasada? Realmente, de verdad, esperaba que no.