Los gritos se escuchaban por toda la casa, eran tan desgarradores que ningún miembro de la familia salía de sus habitaciones. Preferían no estar presente ante tal crueldad, pero no podían evitar los gritos.
Sabían lo que le estaban haciendo, pero no sentían ni un poco de lástima por ella, ni el mismo Antonio sentía piedad, solo repulsión y asco. Aquel joven se encontraba en la habitación de Isabella junto con la joven y Lucas. Sentía dolor por arrastrar de nuevo a Lucas en su mierda, ni siquiera pudo enterrar a Luna.
Lucas se encontraba acostado en la cama apoyando su cabeza en las piernas de Isabella, intentaba descansar pero los gritos de Nora no lo dejaban. Sentía tanta rabia dentro de sí, que no le importaba que no sobreviva.
Al mismo tiempo sentía asco por él, ya que si Nora muere no solo pagaría la muerte que Luna, también no encontraron al pequeño de sus amigos.
Tenía un dilema dentro de él, así que decidió cerrar su mente e intentar dormir un poco, mientras Bella le sobaba su cabeza.
La joven madre, Isabella estaba tan decidida en ir al lugar donde estaban torturando a Nora, pero no quería dejar a los jóvenes solos. Aún existía la tensión y odio entre ambas familias, esa fue la razón por la cual se encerró en su habitación con los jóvenes.
Dos únicas personas que le podrían ayudar a mantener a salvo a los jóvenes, uno estaba cuidando de su pequeño hermano y la otra estaba apoyando a su madre. Después de todo lo que ha pasado y el sufrimiento que ha causado no puede ser egoísta y quitarle el apoyo de su familia. Solo esperaba que su padre encuentre la información del paradero de su pequeño.
No creía en Dios, pero quería pensar si existe cuide a su pequeño. Era inocente nacido en un mundo de mierda. Solo quería encontrarlo con vida, el resto no importaba. Solo deseaba mantenerlo con vida.
No podía hacer nada, ya había cumplido su parte del trato, ahora solo falta que su padre cumpla el suyo.
Solo deseaba que la perdonen por lo que hizo.
----
Nora yacía amarrada en la silla y ensangrentada. No sentía sus piernas por la corriente y tampoco sus brazos por las puñaladas. Sólo faltaba poco para morir y no decía nada de lo que le preguntaban, solo gritaba de la impotencia que sentía al estar sometida por el maldito de Alfonso.
Cuando hizo el plan con las sombras no pensó que estos la iban a traicionar, y por culpa de ellos está en esta situación. Cada vez que le propinaron una nueva tortura solo gritaba, ya que era lo unico que salía de ella.
Solo esperaba morir, ya que no diría nada.
-Así que eres de las duras. - Hablaba Alfonso. - Entonces no te importaría morir, y a mi no me importaría cortar tu cuello. - Le dijo pasando el cuchillo por su cuello.
Al sentir el metal en su cuello Nora empezó a temblar.
-Solo eres una maldita que alardea, y al final solo eres una puta cobarde. - Apuntaba su cuello. - Te vendiste al mejor postor y terminaste con el enemigo de tu clan.
Nora solo temblaba y emitía quejidos por la presión.
-La diferencia más grande entre tu clan, el mio y tu, es que no traicionamos a los nuestros. Si tenemos un problema lo resolvemos y no los vendemos como partes en el mercado. Por eso estás sola y por eso morirás. - Termino de decir empezando hacer presión en su cuello.
-No estoy sola y nunca lo estaré. Mi familia siempre está conmigo. - Respondió.
-Estas sola, ya que tu mas grande esta con mi hija y eso te duele. - Le agarro el cabello. - Y eso te quema maldita bastarda, porque te recuerda al abandono de tus padres. Si ellos no te quisieron, como piensas que un simple hombre te va a querer, sabiendo la porqueria de mujer que vendió a su mejor amiga, secuestró al hijo del hombre que dices amar y destruiste la vida de tus dos amigos. No vales nada. - Termino de decir noqueando con su arma y saliendo de la habitación.
-Señor, qué hacemos con ella. - Preguntaba un guardia.
-Cuando despierte dejenla libre y vigilen a Isabella, que no se entere de esto. - Dijo y se dirigía hacia el bunker seguido de su hijo.
-Padre, porque dijiste que la liberen. - Le pregunto.
-La maldita se descubrió sola, y me confesó donde tiene al bastardo. - Respondió tecleando en su computadora.
-¿Dónde está?. - Pregunto.
-En el puto orfanato, dijo que su familia siempre esta con ella, y la unica que tiene es en el orfanato. - Respondió.
Inmediatamente llamó a sus hombres de confianza y al mismo tiempo a Héctor, el cual se dirigió inmediatamente hacia el lugar, sin antes dar la noticia a los Koslov.
Alfonso salió sigiloso de la mansión y al minuto se encontraba en dirección del orfanato. Tardó casi media hora cuando llegó al lugar y se encontró con el personal, entraron al lugar y estaba vacío. Al momento de revisar las habitaciones encontraron sangre y ropa de bebé.
Ambos jefes de la mafia se acercaron hacia el lugar donde yacía la cuna y encontraron el resto de un cuerpo pequeño. Maldijeron y salieron del lugar dejando a su personal a las órdenes de Héctor.
#2757 en Detective
#1528 en Novela negra
#7990 en Thriller
#4496 en Misterio
bebes celos ex engaño peleas, venganza amor muerte secretos, mafia muerte armas mentiras y traiciones
Editado: 25.09.2021