Capítulo 16

Slovocia/Koslov Vs Sombras.

Tres bandos enemigos yacen uno frente al otro.

Las Sombras, los recordaban como viejos amigos y hermanos.

Los Slovocias, como ratas asquerosas.

Y los Koslov, como sanguinarios al ascenso.

-¿Ya no somos hermanos?. - preguntaba Boris y no recibió respuesta. - No pensé que aquellas pequeñeces les había dolido tanto.-  empezó a reírse sin dejar de ver a los presentes.

-Fichar a mi hijo y amenazar a mi familia no son pequeñeces.-  emitió Carlos Sanchez.

-Infiltrar gente en mi casa y asesinar a la mujer que me crió, no son pequeñeces. - continuó Alfonso, y su contrincante soltó una risa.

-Sus padres se deben estar revolcando en sus tumbas al ver la fragilidad que sus hijos manejan.- dijo acercándose hacia ellos. - En nuestra adolescencia no les importaba nada, o te recuerdo Carlos que arrasaste con una familia sin dejar testigos y Alfonso no dudó en disparar a su tío cuando quiso abusar de tu esposa. - los dos hombres no respondieron. -  Éramos un trío en ascenso, pero todo cambió cuando decidieron procrearse.

-Las cosas cambian, maduramos y dejamos de lado los juegos de niños. - respondió Alfonso.

-Si, cambian, como cuando sus hijos decidieron reproducirse. - les dijo soltando una risa. - Creí que los problemas amorosos entre ustedes terminaron el día que Ana eligió a Alfonso por encima de Carlos.

-Eso no tiene nada que ver. - intervino Carlos.

-Tiene todo que ver, porque la historia se está repitiendo. 

-No existe un tercero en discordia en este asunto, tu problema es con nosotros , no incluyas a nuestros hijos. - dijo Alfonso ganándose una mala mirada por parte de Carlos.

-Lo dijo el hombre que torturó al primogénito de los Koslov, solo por embarazar a su pequeña. - espeto Boris.

-Si quieres nos matamos entre los tres, no tienes que involucrar a nadie más. Esto se termina como inicio.-dijo Carlos.

-Y dar de baja toda la diversión, no, las cosas fáciles no son mi fuerte. Pero respondiendo a tu pregunta, si hay un tercero en discordia. - ninguno de los dos entendió a qué se refería. 

-Oh ¿te refieres al asqueroso de tu hijo?. - pregunto apareciendo Melanie. - Hablando de él, ¿dónde está?. - volvió a preguntar con un puchero. 

-Aquí. - reaccionó Nicolás apareciendo detrás de los autos.

-¿Este es el tercero en discordia? - preguntaron juntos Carlos y Alfonso y rápidamente soltaron una risa.

-Aún sigues con el papel de idiota acosador. - preguntó Sofía apareciendo junto con Manuel.

-Pero mira que tenemos aquí, el ingenuo acosador de mi hermanita. - emitió Manuel acercándose hacia Melanie. -Qatila te agradece por los obsequios. 

Al instante de mencionar esa frase, aquel joven tomó una pose a la defensiva, mostrando así su única debilidad.

-Aunque Bella también los disfruto, recuerdas la bufanda roja que recibió por navidad. - preguntaba Sebastian y Manuel asintió. - Fue lo que usó cuando asesinó por primera vez. - Nicolas esbozó una sonrisa. - Tenía tanto asco por su rival, que no dudó ni un segundo en usarla como arma. - aquel joven eliminó la sonrisa. - Isabella odia el color rojo.

-Pero su víctima lo amaba. - Espeto Sofía y todos soltaron una risa.

-Lo odia seguido de las rosas, los perfumes dulces y los chocolates. - siguió Melanie y empezó a reír cuando el joven los miraba incrédulo. - Oh dulce palomita, te creíste la lista que te llegó con los gustos de Bella.

-No sabes como nos divertimos al crearla, todo lo que odiaba mi hermana lo amaba Qatila amaba, nunca enamoraste a Isabella Castro, lo hiciste de un animal, la cual conoce tu olor y al sentir la vibración del suelo podemos decir que está ansiosa por conocerte.

Y no mentía, la vibración que se sentía en el suelo de aquella entrada era tan fuerte que el equipo de seguridad temía por su vida si ella lograba salir.

-No lo hicieron. - dijo Boris llevándose a su hijo hacia el auto.

-Tu que crees. -dijo Carlos.

Boris dio la orden que llevarán a su hijo fuera de la zona ya que sentía la vibración más fuerte, y sabía lo que pasaría si se quedaba más tiempo.

La había visto.

Y aunque odiaba a su primogénito no le daría el gusto a nadie que no fuera él de quitarle la vida.

-Pero si la diversión acaba de iniciar, porque dejas que el cobarde de tu hijo se vaya. - preguntaba Alfonso acercándose con un control en su mano. - Así como te has divertido con nuestros hijos, porque no podemos hacer lo mismo.

Todo el clan Slovocia y Koslov mostraban una sonrisa perversa al sentir el miedo de aquel hombre, aunque en sus planes no está asesinarlo, pero causarle un poco de miedo no está mal.

-Tío. - grito Sebastián. - La frase correcta sería “porque no podemos volver hacer lo mismo” recuerdas que Bella  ya lo hizo.

Nicolas regreso a ver a su padre y este era inmovil observando aquel joven y reflexionando su confesión.