XI

"¿No has querido nunca dejar de sentir algo por el miedo a seguir haciéndote daño?"

Todo final es el principio de algo excepcional, cuando dejas ir el corazón comienza a latir. Todos tenemos sucesos que nos dejaron marcados, uno está roto por causa de uno mismo.

Mi estrella se encendió, mi energía renació, vivir lo condenó y fue así que renació. Un pájaro que ha sido herido por el peso que arrastró.

Todo se avanza con delicadeza, a veces la disculpa nunca llega cuando se necesita, quién no llora, no sana. La chica de cristal termino cortando a la vida, ya sanó la niña rota ahora toca verla.

Las olas se rompen, pero se vuelven a armar. Alas llenas de balas que cuando recuerdas lloras. La vida a veces duele, a veces hiere, no es perfecta, no es eterna, sólo es bella.

Los sentimientos dolían, las personas decepcionaban, es parte de la experiencia humana sentir dolor, hay heridas que hay que volver a sangrar como es debido.

Chica de las cicatrices sólo tú sabes cuánto lo intentaste, sólo tú sabes qué mereces. Sino la cuidas, te deja y se cuida ella sola, porque puede, porque quiere y porque no necesita a nadie.

Ningún príncipe tuvo la valentía de enfrentar sus monstruos, empapa mis miedos, empaña mis sueños. No todos los monstruos matan, algunos devoran tu corazón, y ella ya combatió al dragón y a su fuego.

Estrella que ha sido forjada, estrella que ha sido probada. Alguien que no te baje la luna sino que te lleve hasta ella.

Las cicatrices que marcan mi piel por cada herida que dejaste, por cada sueño que destruiste, por cada mentira que dijiste.

Todo lo que fui me trajo hasta aquí, así que no debes hacerte pedazos sólo para mantener a los demás completos, el amor que merezco también lo ofrezco.

¿Cuidarás mi corona?

Atte: una noble y audaz guerrera que se la vive poniéndose de primera.