Lo siento

Después de la comida subí a mi habitación, había estado hablando con los chicos hasta que se fueron a una reunión, deje el teléfono a un lado y busque algo de ropa que fuera acorde al lugar a donde íbamos a ir, algo casual así que abrí el armario y me quede unos minutos eligiendo algo que me gustara. Al final opte por una chaqueta negra, unos jeans del mismo color y una blusa blanca y unos tenis, hacia algo de frio como para usar algo más descubierto así que después de bañarme y alistarme mande mensaje a Lucy y Andy.

Hola, chicos, ¿nos vemos donde mismo?

Yo creo que sí, ya salgo para allá, ¿hablaste con Lucy? Creo que no ha visto los mensajes

No, desde hace rato, a lo mejor está ocupada o algo así

Solo Andy respondió a los mensajes, sin más salí de la casa casi a las 5 de la tarde, tomé las llaves del auto de mi padre, ya no iba a salir por lo que se lo pedí prestado. Al subir al auto marque a Lucy

—Hola Lucy, ¿paso por ti? —dije en cuento contesto

—Hola, si, se me hizo un poquito tarde, necesito de tu ayuda, no sé qué ponerme, nada me agrada

—Voy parra allá, ya estoy algo cerca —antes de terminar la llamada, me indico que tenía una llamada entrante de un numero desconocido —te veo en unos minutos, tengo que colgar

—Sí, mil gracias, aquí te espero.

Dejo de sonar el teléfono, pero después de unos segundos volvió a verse en la pantalla el mensaje de llamada entrante de un número desconocido, dude entre contestar o no. —¿Hola? —dijo la persona al otro lado, al parecer es de Corea

—Hola, ¿Quién habla?

—Yang Mi ¿eres tú? ¿Dónde estás? —No había reconocido su voz por el bullicio al otro lado, pero ere él otra vez

—Se Ryeon, no me llames más por favor —detuve el auto, me estacione a la irilla de la carretera, me latía el corazón con demasiada fuerza y las manos me temblaban —dame tiempo, lo que paso me dolió mucho, necesito mi espacio —pase una mano por mi frente.

—No quiero dejarte sola, me preocupo por ti, no quiero que cometas una locura, sé que lo que está pasando ahora te afecta.

—Me está afectando, sí, pero no voy a superar lo que está pasando si sigues hablado de lo sucedido. Ya dejemos de hablar de eso, solo empeora las cosas, te lo dije la última vez —se quedó en silencio —tengo algo que hacer, adiós.

—No, espera, sé que es difícil, pero te quiero y no me gustaría que te pasara algo malo, te he estado buscando desde hace días, fui a tu departamento, pero no hay nadie y en tu trabajo tampoco me dijeron dónde estabas, sigo preocupándome por ti.

—Por favor, deja de buscarme, dame espacio, tus palabras ahora solo me lastiman más no me hacen ningún bien —sin darle tiempo a responder termine la llamada y deje el teléfono a un lado, sentía el corazón latiendo más rápido de lo normal, seguí mi camino y llegue a la casa de Lucy.

Lucy estaba en la entrada concentrada en el teléfono, levanto la mirada cuando me vio llegar y me saludo con la mano, bajé del auto y fui hacia donde estaba ella.

—Te ves hermosa como siempre —dijo cuando llegue a su lado

—Gracias —dije con una sonrisa —y en un momento tú vas a estar más hermosa que siempre —entramos a la casa y fuimos directo hacia su habitación, no recordaba mucho de su casa, pero no había olvidado como llegar

—Tengo esto, pero no sé qué ponerme, acabo de ver los mensajes en el grupo, ya es un poco tarde —dijo sentándose en la cama, vi todo lo que tenía sobre la cama y sin dudar elegí un conjunto que estaba sobre una silla que estaba al lado de la cama

—Ponte este —le di unos jeans, un suéter blanco y una blusa gris —se ven muy bien juntos

—Gracias amiga, no se me habría ocurrido —se levantó de la cama y fue hacia el baño. Mi teléfono sonó a mi lado indicando una llamada de Andy

—Hola amigo

—¿Dónde están? Estoy en la plaza

—Ya vamos, Lucy está en algo, terminamos y vamos, unos 10 minutos máximo y estamos ahí.

Después de la llamada Lucy salió con lo que le había recomendado, se veía realmente bien, su cabello lo había dejado suelto, con un maquillaje nada exagerado, sin más tomo unas cuantas cosas, las puso en su bolso y salimos hacia donde nos esperaba Andy, el camino hacia allá fue agradable, en la radio sonaban canciones de los chicos y nada mejor que nosotras cantando sin importarnos las personas que pasaban a nuestro lado.

—Mira, ahí esta Andy —dijo Lucy a lo que nos dirigimos a donde él se encontraba, estaba muy concentrado en su teléfono que no vio cuando nos acercamos a él.

—¿Qué haces? —dije parándome a su lado, el solo dio un pequeño salto por el susto —lo siento, estas muy concentrado en tu teléfono, ¿Qué tiene de interesante?

—Estaba viendo las ultimas fotos que subiste a Instagram, se ven realmente bien, ¿Cuándo nos harás una sesión de fotos a nosotros señorita fotógrafa? —dijo pasando el brazo sobre mi hombro mientras comenzábamos a caminar hacia la cafetería que estaba al otro lado de la gran plaza.

—No lo sé, ¿Cuánto e pagaras? —dije levantado la mirada para verlo.