Capítulo 38

Canción para el capitulo Hold Me Down de Halsey ;)

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La veo conectada a esas máquinas, tan indefensa y expuesta, sería muy fácil terminar con su pobre agonía, me desharía de ella en un instante, pero no echaré a perder mis planes porque mataron a algunos de mis hombres y quemaron mi casa.

Alguien debería matarla ya, de todos modos, no creo que despierte. En el momento que me acerco a la camilla de la rubia que yace en la camilla frente a mí, ella abre sus ojos y oculto mi sorpresa al ver que está despierta, Brooke también sabe cómo ocultar su sorpresa, porque no se inmuta al verme, solo me observa desde su lugar con notable desprecio.

«Me pregunto si me recordara»

—Es bueno verte despierta —susurro ahora a su lado.

—¿Qué quieres? —cuestiona con dificultad.

—Te contaré algo que nadie sabe —Me siento en el sillón junto a su camilla—. Fernández me dejó a cargo de la mafia porque sabía que moriría ese día. Bonie no fue la única que dejó un sucesor.

—¿Quiénes son... los Occhiali da sole? —Sí que se esfuerza por hablar, que patético.

—Si me estás preguntando, es porque sabes quienes son, los jefes de jefes, te pueden acabar en un chasquido, pero no lo hacen porque todavía no eres una amenaza para él, para mí lo eres desde el primer día en que supimos de tu existencia —respondo al acomodar la sábana en la orilla de la cama. Llevo mi mirada a su rostro y medio sonrío.

—Eres una amenaza desde el día en que naciste, sabíamos que la primogénita de Zack Majid iba a ser la heredera de Bonie —admito. Los únicos que no sabían del plan de Bonie con Brooke eran Zack y Brenna.

—Seré una amenaza... para él, cuando lo tenga... frente a mí, y créeme... que lo acabaré más rápido que en un... chasquido. —Me susurra con mucho esfuerzo y sobre todo mucho veneno.

—Entiendo porque Bonie te eligió, joder, si no fueras una Majid, las dos tendríamos el mundo a nuestros pies, lástima que lo eres —balbuceo entre dientes.

—No soy cómo tú, soy muy... diferente, no soy una vendedora de drogas..., ni mucho menos... una mafiosa —escupe Brooke.

—¡Ja ja! No me hagas reír por favor, ¿Qué eres entonces? Vendes flores, traficas ropa, y juegas con pistolas de juguetes.

—Soy muy superior... a eso, yo seré la líder de los lideres..., y acabaré con todos... ustedes, recuérdalo siempre... Caitlin Hale. —Esta chica sí que tiene agallas para hablarme así estando en estas condiciones.

—Te veré muerta pronto, siquiera hace falta que te mate ahora mismo, en el estado que estas dudo que logres lo que Bonie —digo sin dejar de mirarla directo a los ojos, y ella responde con el mismo odio en la mirada. Me levanto de mi lugar sin que ninguna de las dos aparte la mirada.

—Por cierto, dile a tu sub jefe, o a tu padre, quien sea que esté haciendo todo esto, que no hacía falta dejar una nota para declarar la guerra —murmuro en su oído.

No sé cómo puede estar tan tranquila teniendo a uno de sus enemigos frente a ella, a solas, con grandes posibilidades de poder matarla. Quizá quiere morir.

—Fui yo —apenas logra decir.

—Pues considérate muerta Brooke —Es lo último que le digo con la mano en el picaporte de la puerta.

—Ya veremos —responde detrás de mí. Sonrío al escucharla, es muy atrevida. Me gusta que sea así de desafiante, me encantan los retos, especialmente cuando les pateo el trasero y les hago tragarse sus palabras.

Salgo como entre, con pasos sigilosos, aprovecho que todavía no ha llegado su escolta y hago mi camino al ascensor tranquilamente. Tengo que acabar con su gente, ella es quien está ideando todo, solo tiene que decir fuego y mi casa explota en pedazos, esa clase de poder le dio Bonie.

—Así te quería encontrar —levanto la mirada para ver de quien se trata.

—Tyler... —Me quedo sin palabras.

—Camina —Me toma por el brazo y me obliga a entrar al elevador, si no fuera Tyler, ya lo habría golpeado y dejado inconsciente.

—¿Cómo sabes que estaba aquí? —cuestiono incrédula.

—Solo lo sé, ¿Qué querías? —No puede creer que realmente esté hablándome.

—Tu hermosa novia acaba de quemar mi casa y matar a seis de mis hombres —respondo en mi defensa. Sé que él no aprueba que Brooke haga esto, lo mejor que podría hacer es alejarse de esa chica.

—Ella ni siquiera puede caminar bien —demanda.

—¿Y eso que? Ella es la líder, dio la orden —Estoy a nada de reírme de su ingenuidad.

—Y tu casi la matas, están a mano. —No esperaba esta respuesta de su parte, realmente la está defendiendo.

—Solo aléjate de ella, ven conmigo, no te quiero lastimar Tyler —susurro en cuanto llegamos al primer piso.

—Aléjate tú de ella, tendrás que lastimarme, porque Brooke es parte de mí. —Que cursi. No merece estar con Brooke, aun así, no digo nada, solo me alejo de él lentamente y veo como se queda allí parado, mientras me voy.

En ese momento tomó una decisión, aunque sea doloroso para mí, que se considere muerto.

Vuelvo a mi coche casi corriendo, tengo que reunirme con mi equipo e informar que la bella durmiente Brooke ya ha despertado, que se mantengan tranquilos mientras puedan, porque esto se quedará así, diente por diente. Conduzco por las calles de Londres hasta llegar Vincent Square, donde se encuentra mi oficina y lugar de entrenamiento para mis soldados, voy directo con mi asesor.

—Necesito a Samantha aquí, ahora mismo —le digo en cuanto lo veo.

—Ya está aquí, en tu oficina —dice Connor detrás de mí, lo miro confundida sin entender a qué se refiere con que está aquí.

—Me encargué de buscarla mientras hacías lo que sea que estabas haciendo —explica y una felicidad me invade todo el cuerpo, le doy un beso, largo y apasionado. Por esto somos la mejor pareja, Connor siempre que hacer, me encanta que siempre pensemos igual.