Confianza

Después de ese incómodo momento Noha me examina los senos y quedo tranquila al escuchar que todo está bien.

- Estás lista para dar de mamar, es la leche que se ha acumulado lo que te incomoda, ya cuando le des de comer al cachorro dejará de molestar. Aunque veo que mi hijo ya te ayudo muy bien.

- Noha por favor ya no digas nada.

- Megan yo puedo tener mil fallas, pero te aseguro que mi hijo es un buen hombre, lejos de todas las barbaridades que dicen de él es alguien incapaz de lastimar a alguien que no lo merece, mucho menos a un niño o una madre. Yo lo críe para que no fuera igual que su padre y estoy orgullosa de lo que hoy es.

- No dudo de eso, ahora veo el grandioso hombre que es y a mis ojos es un hermoso tirano y bárbaro con todos sus defectos y virtudes.

- Eso quiere decir que le darás una oportunidad.

- No piensas que yo soy poco para él, que puede encontrar a alguien mucho mejor que una simple hembra abandonada.

- Puede que yo me vea reflejada en ti y por eso te tenga tanto cariño, pero si tu corazón y el de él sienten lo mismo entonces yo estaré feliz. Megan yo te he visto crecer a mi manera especial y déjame decirte que no eres menos que nadie.

Un día más, mañana por la noche puede que de a luz y estoy tan feliz de poder tenerlo a ellos a mi lado. Yo me veía sola afrontando todo esto, asustada y con tantas inseguridades.. Pero ahora tengo una familia que me cuida y qusése que van a cuidar a mi hijo.

- Te quiero mucho Noha y me encantaría ser parte de tu familia.

Voy a la habitación y veo a Nodal dormido, acaricio su rostro y se ve que está reponiendo energías mientras yo me siento renovada por completo, lista para correr como una demente. Es lindo verlo así de indefenso, eso quiere decir que confía en mí lo suficiente como para bajar de esta forma la guardia así que yo también confiare en él.

♡♡♡

Con la noche cayendo la única que faltaba era Freía, las demás mujeres habían traído buenas presas entre ellas un siervo, jabalí y hasta un coyote salvaje.

- Faltan dos mujeres.

- No las hemos visto.

- Vayan a revisar los alrededores antes de que la noche caiga y con ella la helada.

Un pequeño grupo de hombres sale con sus lobos rastreando el lugar, no muy lejos encuentran a la primera.

- Ayuda por favor, me caí y lastimé la pierna. No puedo caminar.

- ¿Dónde está la otra mujer?

- Que mujer, pensé que ya todas volvieron.

- Llévenla de regreso y yo sigo buscando.

Sin cuidado alguno la levantan y la llevan como costal de papas de regreso al castillo.

- Más cuidado animal.

- Si no quieres camina.

Mugrosos salvajes, pero ahora más que nada quiero ver a Bas y saber por qué carajos no me atrapó nada.

- Freía que pasó contigo.

- Me caí mi señor y una roca lastimó mi pierna, no pude volver por mi cuenta debido a que perdí mucha sangre.

- ¿Dónde está tu presa?

- Escapó.

- Ya veo, quedas eliminada.

- No puede hacerme esto, sufrí un accidente no podía moverme.

- Mira bien esto, Luz ven aquí y muestra tus heridas.

- Si mi señor.

La mujer se quita el chal y deja ver muchas cicatrices. - Diles que son y como las ganaste.

- Jabalí, me atravesó con sus colmillos. Venado, me atacó por sorpresa. Oso, enterró sus garras. Halcón..

- ¿Alguien te ayudo?

- Siempre volví por mis propios medios.

- Aquí ninguna mujer es tan débil como para quedarse atrás por un simple razpón de rodillas. No sirves así que llamaré a tu líder para que venga por ti.

Me aferró a sus pies impidiendo que me deje atrás, quien diría que son tan sanguinarios como para no ayudar ni siquiera a las mujeres.

- Por favor no me mande de regreso, Jason de seguro no ha llegado a casa todavía.

- Mejor para él, el camino se le va a hacer más corto. O puedo mandarte solo a ti para no molestarlo ya sabes el camino de regreso y si dices que no entonces de verdad eres una decepción.

- Por favor deme otra oportunidad, prometo no volver a fallar.

- En la guerra no hay segundas oportunidades.

Siento como me empuja y se va, esas perras no dejan de reírse de mí y yo busco desesperada a Bas, ese desgraciado me las va a pagar.

Luego de llegar a mi cuarto lo veo entrar por la ventana. - Como te a través a hacerme pasar está vergüenza, jamás me sentí tan humillada en mi vida.

- Tampoco me mientas de esa forma, recuerda que yo siempre estoy a dos pasos de distancia.

Muerdo mis labios furiosa. - Que tienes para decir.

- No nos dejaron salir de los establos, esos malditos nos encerraron a todos y nos rodearon con sus lobos.

- Mate a la perra que se burló de mí. ¿Puedes encargarte de eso al menos en lo que logró que no me echen de aquí?

- Será algo difícil, la están buscando y de noche es suicidio meterse a ese bosque con esos lobos sueltos. Dime donde la metiste y veré que puedo hacer.

- Quiero que me des la medicina, si ese desgraciado no quiere escuchar entonces me voy a meter a su cama por las malas.

- Estás segura, si alguien lo descubre te cortaran la cabeza.

- La medicina de mamá es indetectable. Ella es la mejor haciendo esas cosas así que no tengo dudas de que funcionará.

Esta es mi último oportunidad, tengo que lograrlo.