Ser adoptada, no es tan malo que digamos, no para mí, porque literalmente nunca hubiera conocido a los mejores padres que ahora tengo, aunque mi madre adoptiva no me dio la vida o si mi padre no puso su espermatozoide.
Ustedes ya saben a lo que me refiero.
Pero aun así los amo, me crie con ellos, me dieron todo lo que tengo ahora, una educación, cosas que necesito y llegaron a ganarse mi cariño.
Me enteré de esa noticia a muy temprana edad, se podría decir a mis 9 años y gracias a mí querida hermana.
- Profesor buenas tardes vengo a recoger a Zuri - replica
- Pasa y toma asiento - escucho decirle, mientras que le señala el sillón
- ¿Pudo entender los problemas de matemáticas? - pregunta mientras que entra y se sienta en el sillón que está cerca de la puerta
- De hecho, masó menos, se le hace complicado poder comprender - dice mientras se acerca las escaleras y sus ojos topan con los míos - Zuri, ¿Qué haces hay?
- Vino mí hermana ¿verdad? - es lo único que consigo decir.
Demora un segundo en responder y luego veo que asiente, eso fue lo suficiente para mí, literal ese día mí energía subió al 100 %, fui a correr hacia ella y abrazarla.
Hubiera querido tanto que me abrazará, pero nunca llego ese abrazo que nos dábamos antes, solo hizo un movimiento y fue alejarme de ella.
- ¡Hey, Hey!, Cálmate niña - replica casi en un chillido - Ve a despedirte de tu amiga, bajas tus cosas y rápido - prosigue mientras que hace chasquidos con los dedos - ¡Debemos irnos!, tengo que salir y tú haces que me demoré
Se a lo que se refiere con mi amiga, lo dice por Bethania y sobre eso de que va a salir, sé muy bien que saldría con su novio.
Con mi cabeza baja y mi cara triste, llegue a decir solo tres palabras.
- Está bien, Lariza
Llegué a subir las escaleras y me escondí detrás de la pared, que está casi cerca del cuarto de Bethania.
- ¿Por qué la tratas, así? - escucho decir al profesor casi molesto
- Es que ella es adoptada - le decía mientras caminaba hacía al profesor de matemáticas - Es por eso que la trato así, no es tan inteligente como yo y mucho menos nos parecemos
Ese momento aún lo recuerdo.
Literal no sabía ese significado hasta que busque en el diccionario.
Al comprender esa palabra, tener la valentía de decirle a mis padres y procesarlo, demoré 4 años, hasta que decidí hablar con ellos.
- Mamá, Papá - digo mientras que estamos en la mesa cenando - O mejor dicho Miriam y Darnell
Eso hizo que me presten rápido su atención, se nota en sus caras que se quedaron sorprendidos cuando dije sus nombres, hasta yo me sorprendí, nunca los había llamado así, hasta ahora y se siente feo.
- ¡Porque los llamas así! - en vez que suene más a pregunta, suena a reclamo
- Eso no te incumbe hermana mayor - replicó mientras la quedó mirando y veo que se hace la ofendida
- ¡¿Qué te pasa Zuri?! - pregunta mí madre con voz fuerte mientras que se levanta de la silla y hace sonar la mesa - Nunca le has respondido así a tu hermana
- ¡Yo les debo de preguntar eso! - alzó un poco más la voz y me paró de mí sitió - ¿Qué les pasa a ustedes por no decirme que era adoptada?
Y fue lo único que hizo que detone la bomba, la sorpresa de mí madre se hizo notar al instante, se sentó lentamente en su sitio, asimilando lo que le acabo de preguntar, se le sale algunas lágrimas, me quedo mirando como si me preguntara de ¿Cómo lo supe? y mi padre solo mira a mí hermana como diciendo ¿Has dicho algo?
Justo ese momento me contaron toda la verdad.
Y sobre quién era mi madre, no lo saben y tampoco me importa saberlo, obviamente, para qué saber quiénes son mis verdaderos padres, si es obvio que nunca me quisieron.
Porque unos verdaderos padres, que te quieren, nunca en su vida te dejaría en el orfanato a los 2 meses de nacida o eso es lo que me dijeron mis padres.
No quisiera que mí disque madre me venga a buscar algún día, si fue capaz de abandonarme, si realmente le estorbaba me hubiera abortado.
Aunque Miriam no es mi verdadera madre, siempre me dice que él bebe que viene al mundo siempre tiene un propósito y yo no tengo ningún propósito en esta vida.
Es momento de contarles un poco más de mis padres adoptivos.
Como verán mi padre se dedica a la Administración y tiene su propia empresa. Sus ojos son hermosos tiene un tono de color verde que un poco se acerca al marrón, su cabello es negro, tiene 46 años y su piel es blanca.
No tan blanca como la mía y se ve muy guapo con su terno de empresario.
Por otra parte, mi madre estudio la carrera de Medicina Humana, tiene cabello de color rubio, sus ojos son negros y, su piel es casi morena, tiene 44 años, pero se ve de 30 en serio y me olvidaba de comentar que tiene su propio hospital.