NARRADO POR VALERIA: preparativos para la boda…

Bajo las escaleras, escucho papeleos en el comedor, supongo que es la señora Vanesa (la mamá de Leo), junto con mi mamá, arreglando todo lo de la boda. 
Dirijo mis pasos hacia aya, veo a las dos que tienen entre sus manos y sobre toda la mesa, carpetas grandes y veo en las portadas que son sobre pasteles, vestidos, recepciones, flores y más cosas sobre la boda. 

- Hola buenos días mamá, buenos días señora Vanesa. Digo a ambas mientras las saludo con un beso en la mejilla. 
- Hola Valeria buenos días, mira tenemos que enseñarte todo lo que hemos avanzado sobre la boda. Dice la señora Vanesa. 
- Siéntate hija. Dice mi madre. 
Tomo haciendo y comienzo a ver todas las carpetas y catálogos que me muestran. 

Han pasado unas 3 horas eligiendo todo y aún nos faltan más cosas. La boda será en un jardín con un hermoso pastizal verde, alado de un lindo río con agua cristalina, los arreglos florales serán de rosas blancas con hojas variadas de color verde, habrá una alfombra blanca que dará hasta el altar donde caminare junto a mi padre, elegimos mas decoraciones del lugar, las luces colgantes, faros, los centros de mesa, el pastel, las sillas, las mesas y en fin muchas cosas más. 
Todavía no me decido sobre mi vestido, tengo un enorme cuerpo que no sé si me quede el vestido de novia. La madre de Leo ya se fue, estoy con mi madre en la cocina, me enseña cómo cocinar más cosas de las que ya se.  
Después de un rato Leo ya ha llegado a la ciudad, después de que viajo hasta la ciudad vecina para checar su nuevo empleo. Él me marca para vernos y nos ponemos de acuerdo para salir en la noche a una cena. 
1 hora después. 
Leo a aparcado su moto en un edificio muy alto, me ayuda a bajar de la moto, tengo un vestido beige con flores bordadas azules y zapatillas que combina con mi vestido y una cartera beige con una cadena plata, y el cabello con suaves ondas, Leo está vestido con un traje azul oscuro, camisa celeste, corbata azul y zapatos negros. 
caminamos hacia el edificio, adentramos al elevador y subimos hasta el último piso, mis ojos topan con una terraza enorme, iluminada por luces colgantes y velas, veo dos fuentes rectangulares iluminadas por luces blancas, hay macetas con lindas hojas verdes veo el suelo y noto qué hay un camino de pétalos de rosas rojas y blancas que llegan hasta una mesa con velas platos y copas, a lado una botella de champán. Estoy totalmente sorprendida, dirijo mis ojos hacia Leo y entre sus manos tienen un ramo de rosas rojas. 

- Ten mi niña, son para ti. Me entrega las rosas. 
- Leo, esto… esto es hermoso, no se qué decir… me encanta Leo, todo es muy lindo, gracias por esta sorpresa. Digo mientras me acerco a él y le planto un beso en los labios. 
Leo me toma por la cintura y me abrasa mientras nos besamos. 
- Eres lo mejor que me ha pasado, esto y más te mereces nena. Sonríe con un lindo brillo en los ojos. 
Caminamos hacia la mesa y me ayuda a sentar y el se sienta, toma el champán y lo destapa mientras me sonríe, toma mi copa y la de él y sirve. Un mesero se acerca hacia nosotros y nos sirve la comida.  
Hemos conversado por bastante rato Leo es muy divertido, adoro saber que es feliz, veo sus ojos llenos de felicidad y no me cabe duda que yo también estoy enamorada de él, es la persona que amo, el que me ase muy feliz y él que quiero a mi lado. 
Noto que su mirada la tiene puesta en mi, tiene una mirada tan linda y a la vez tan intensa. 
- Salud mi niña. Dice mientras alza su copa hacia mi y sonríe. 
- Salud mi niño. Digo y choco mi copa con la de él y  tomamos un sorbo del champán. 
- Porque brindamos?. Pregunto al terminar de beber. 
- Por ti nena, y por lo que are. Dice mientras se levanta y busca algo adentro de su saco y estira su mano hacia a mi para que me ponga de pie. 
Veo que poco a poco se inca frente a mi mientras abre la cajita color negro que tiene entre sus manos y veo un anillo adentro. 
- Se que es un poco tarde pero, quiero preguntártelo de todos modos… Te casarías conmigo mi niña?. 
Siento mi estómago dar vuelta mientras y mis ojos se llenan de lágrimas de felicidad. 
- Claro que acepto mi amor. Me lanzo hacia sus brazos y él me abrasa por mi cintura. 
- Soy la persona más afortunada del mundo. Dice Leo mientras entierra su cabeza en mi cuello. 
- TE AMO. Digo, siento como Leo levanta su cabeza hacia mi y pega su frente con la mía. 
- TAMBIÉN TE AMO MI AMOR. Dice mientras acerca sus labios a los míos y comenzamos a besarnos. 
Siento sus manos apretar mis caderas mientras pega más su cuerpo al mío mientras mis manos rodean su cuello.  
Después de un rato deleitándonos con la hermosa vista de la ciudad iluminada y la luna con su lindo resplandor, decidimos ir a casa. 
Mis padres llegarán hasta tarde, Leo a decidido acompañarme para que no esté sola. Ambos estamos sentados en la sala viendo series, he preparado palomitas mientras vemos la tv. 
-  Ese Sheldon es un loco. Dice leo riendo al ver su primer capítulo de the big Bang theory. 
Me río con lo que dice Leo. 
-   Mi niño me iré a cambiar. Le digo a Leo. 
- está bien nena acá te espero. Me sonríe. 
Me levanto del sofá y voy a cambiarme, saco una pijama del closed y comienzo a desvestirme, al tomar la blusa de la pijama siento que algo anda por mi mano y veo que es una araña enorme, grito con todas mis fuerzas mientras aviento la blusa hacia el suelo, veo que la araña corre hacia mi y sigo gritando, me dirijo hacia la puerta para salir y siento alguien parado atrás de mi, es Leo todo asustado, me cuelgo de su hombro y me abraso de él como si fuera un bebe. 
- Saca la araña de aquí. Digo toda alterada. Mientras Leo me sigue cargando. 
- Donde está? Pregunta. 
- En la blusa. 
- Ya la encontré. Escucho que toma el vaso de cristal de mi mesa. 
- La atrapaste?. Pregunto mientras tengo mi rostro en su cuello. 
- Si nena tranquila ya no va a salir dice mientras acaricia mi cabello. 
Poco a poco apartó mi cabeza de su hombro y veo sus ojos, tiene una mirada tierna que de un ratito para otro se ase intimidante que me hace enrojecer. Siento su mano apretar mi espalda mientras la otra mano está en mis muslos, nos empezamos a besar y poco a poco camina hacia mi cama donde me recuesta muy despacio y comienza a besar mi cuello. Siento una sensación extrañamente placentera pero algo me detiene. 
Leo aturdido con la mirada intensa y con la respiración entrecortada, me ve a los ojos. 
- Nena, si no estás listas, yo, esperaré un poco mas. Dice mientras me regala una sonrisa tierna. 
- Gracias mi niño. acaricio su mejilla. 
Leo se acerca a mi para besarme los labios y después la frente, se levanta y me tiende la mano, me levanto de la cama, tomo mi pijama y me la pongo. Leo voltea a ver al vaso con la araña adentro. 
- Nena al parecer le tienes mucho miedo a las araña, me asustaste al escuchar que gritabas y corrí para ver que pasaba.
- Lo sé, y lo siento por asustarte es que cuando era pequeña, mis compañeros del instituto, se la pasaban atormentando a algunos niños, ellos pusieron una araña en mi mochila y cuando yo la abrí la araña subió a mi mano y comencé a gritar hasta que se callo al suelo, Mis compañeros comenzaron a burlarse de mi y desde entonces ponían arañas de verdad o de plástico entre mis cosas, fue un martirio para mi hasta que la maestra los descubrió y los castigo, pero yo me quede con ese miedo hasta hoy en día. Digo un poco triste. 
- Ay nena, no sabía nada de eso, pero tienes que superar ese miedo, las arañas no son tan malas como crees, si no las molestas, no te picaran, estamos en la ciudad y acá no ay arañas peligrosas, tranquila. Dice leo mientras rodea sus brazos en mi cuerpo y acaricia mi cabeza. 
Ya más tranquilos salimos de mi habitación y vamos hacia abajo para terminar de ver la serie que veíamos.