Esposa De Un PolicÍa

NARRADO POR VALERIA: los planes cambian...

Voy entrando a la casa, veo a Leo irse a toda velocidad con su moto, siento que algo no anda bien, él últimamente se ha comportado muy extraño.  
Ya estando sentada en el sofá me quito los tacones y me recuesto, pensando en que fue lo que lo molesto, no sé qué le ice.  
Escucho la moto estacionarse de nuevo, brinco al escuchar que está abriendo la puerta y lo veo entrar, al verme da pasos largos hacia mi, toma con cariño mis mejillas y me acuna en sus brazos.
- Nena, lo siento, no debí irme así. Dice abrasándome. 
Yo me quedo quieta sin hacer ningún movimiento, la verdad es que no sé cómo reaccionar. 
- No entiendo… qué pasa?. Digo extrañada. 
- Solo… lo siento no debí irme así. 
- E… esta bien. Digo y poco a poco recargo mi cabeza en su hombro. 
- TE AMO.  
- TAMBIÉN TE AMO MI NIÑO. 
Leo me abraza y me carga hasta la cama. 
- Jejejeje qué haces?. Digo sonriendo por su repentino cambio  
- Te quiero hacer mía. 
Leo cierra la puerta… 
Al otro día… 
- Buenos días mi niña… 
Me estiro en mi lugar y dejo caer el brazo en el abdomen de mi esposo y la cabeza en su pecho… 
- Buenos días mi amor. 
- Que dices si me quedo hoy contigo?. Dice Leo  
Mis ojos se abren de par en par y lo abrazo encimándome  en el. 
- Enserio mi amor?. Digo sonriendo. 
- Enserio nena. 
- Yei!,que dices si vamos a dar un paseó. 
- Lo que mi princesa diga. Dice sonriente. 
Voy a levantarme aún desnuda cuando siento las manos de Leo en mi cintura. 
-  Dúchate conmigo. Dice coqueto. 
- Claro que si.  
Ambos nos vamos a la regadera y nos bañamos juntos. 
Después de ducharnos nos alistamos y nos vamos a dar un paseo en el parque, caminamos por los pastizales, encontramos un árbol con gran sombra y nos ponemos de bajo, ambos platicamos de diversas cosas.  
Me prepare trayendo una cesta con frutas quesos y vino. También un mantel para que nos recostemos. 
- Quisieras tener un bebe?. Suelta Leo que está recostado en mis piernas mientras yo estoy sentada recargándome el árbol y me ahogo con la fresa que comía. 
-  No crees que es un poco apresurado. 
- Lo sé nena, pero sería lindo. 
- Jejejeje pues la verdad si sería muy lindo aunque mucha responsabilidad no crees. 
- Supongo que si pero te verías muy linda con tu pancita. 
- Más pasa?. Digo viendo mi enorme estómago. 
- Mi vida tú no tienes panza no digas eso. 
- Claro que la tengo, eres el único que no lo ve. 
- Jejejeje si tienes algunos kilos, pero que más da, me fascinan tus curvas. 
Pasamos la tarde viendo el hermoso día platicando y riendo Leo me cuenta las cosas que ha vivido como policía. 
- Tienes que tener cuidado. 
- Lo sé nena, pero sabes que en ese trabajo corro mucho peligro, la vez pasada un chico drogado me ataco con su navaja, acababa de asaltar a una señora y al momento de atraparlo él me clavó la navaja pero cómo llevaba chaleco anti balas eso detuvo que no me cortara, pero sabes que es lo peor?, que después de atraparlo la señora no lo denuncio, eso chico quedó libre. 
- Me imagino que es una impotencia para ustedes como policías. 
- Si y créeme varios me han amenazado de muerte, solo por hacer mi trabajo. 
- Y es cierto qué hay mucha corrupción? 
- Claro que si demasiada, pero ay algunos que todavía no nos dejamos comprar. 
- Adoro que seas honesto. 
- Gracias nena eres la única que valora eso. 
Le sonrío y seguimos platicando, después de un rato comienzo a guardar todo. 
- Ten. le doy el mantel a Leo para que lo doble, veo que se ase bolas y me lo entrega hecho una bola. Yo me rio al ver que no sabe doblarla. 
- Burlona. 
- Manos lisas. Digo riendo. 
- Ja ja. Dice sarcástico con una sonrisa. 
Ambos nos dirigimos a la moto y nos vamos a la casa a ver algunas películas. 
Al llegar al frente de la casa me bajo de la moto y voy a abrir la puerta de la cerca para que Leo entre con la moto, él arranca y entra al jardín con la moto al cerrar escucho que alguien me habla. 
- Hola Valeria. Volteo a la derecha y veo a Alan entrando también a su jardín. 
- Hora Alan qué tal?.lo saludo y doy algunos pasos a la cerca  
- Bien Gracias. Responde Alan, en eso escucho los pasos de Leo. 
- Qué tal mi nombre es Leonardo el esposo de Valeria. Dice Leo serio. 
- Yo soy Alan, no nos habíamos presentado.  
- No nos habíamos topado. Dice Leo. 
Escuchamos una puerta abrirse. 
- ALIII. Grita lili desde su puerta. Alan se voltea y lili corre a sus brazos. 
- Ten nena. Dice Alan a lili y le entrega una bolsa de fresas. 
- Gasias Ali. Dice lili y lo abrasa del cuello, en eso lili volverá hacia nosotros que estamos de otro lado del cerco, su mirada cae en mi y después en Leo. Ella trata de bajarse de los brazos de su hermano y camina hacia Leo, toma una fresa de su bolsa y se la ofrece a Leo. 
- Ten. Dice lili, poniéndose de puntitas en la cerca. Veo a Leo agacharse poco a poco y una sonrisa se estira en sus labios. 
- Gracias nena. Dice Leo y la toma, lili se dirige hacia mi y también me ofrece. 
- Ten vale. Dice mientras me da la fresa.  
- Gracias lili. 
Ella corre con su hermano y extiende los brazos para que la abrase, ya estando abrazada agarra una fresa le da una mordida y se la aserca a su hermano para que también la muerda. 
- Gracias princesa. Dice Alan todo batido por la fresa. 
Leo y yo reímos y nos despedimos de Alan y lili, entramos a la casa para ver películas y en lo que hago palomitas, Leo se sienta en la mesa y comienza a platicar conmigo. 
- Es una niña muy linda. 
- Jejejeje lo sé, es muy dulce. 
- Quisiera tener una nena así. Volteo a ver a Leo que me mira con una sonrisa y un brillo en los ojos que nunca había visto. 
- Creo que ya te entusiasmaste. Digo sonriendo. 
- Sería lindo tener a un bebe corriendo por la casa. 
- Mi vida, sabes que me encantaría pero aún no tengo mi universidad. Tu al menos ya casi entras a estudiar pero yo aún me falta. 
- Lo sé nena. dice agachando la mirada 
- No te pongas triste, verás que si nos esforzamos lograremos todas nuestras metas además tengo el tratamiento de las patillas durante un año, no puedo dejarlas así porque si. Digo tratando de animarlo. 
- Tienes razón nena. Dice y me abraza. 

Semanas después… 
Leo me ha estado tocando el tema de tener bebés, claro que me encantaría tener bebés pero solo tengo la preparatoria terminada y Leo apenas entro a estudiar criminología le faltan 3 años para terminarlo y después sigo yo y si se puede mucho antes entraré a la universidad. 
- Mira nena que carriola más bonita. Dice mientras dos chicas van pasando a lado de él y lo ven como si babearan. 
- Jejejeje ya no me digas nada he, no me  convences. Digo, no debí traerlo a hacer las compras conmigo, cada cosa de bebés que ve, se la quiere llevar o me la enseña. 
- Que dices si vas ya a la caja ahorita te alcanzo solo iré por mi acondicionador que se me olvidó pasar a traer.  
- Ok nena. Veo que se dirige a la caja en eso voy rápido a traer el acondicionador. 
regreso de nuevo veo que ya están pasando el código, termina la cajera de pasar todos los productos y pagamos nos dirigimos a un taxi que nos llevará a la casa.  
Al llegar comenzamos a guardar todas las cosas que trajimos en la alacena y al refrigerador. Veo que Leo se va a la habitación con una bolsa tratando de esconderla como un niño. . 
- Leo que llevas ay?. Pregunto sonriendo. 
- Ven. Dice el. 
Camino hacia la habitación y él está sentado a la orilla de la cama con las manos hacia atrás escondiendo algo. 
- Dime que tienes ay mi niño?. Me paro frente a él. 
- Extiendo tus manos. veo que va sacando unos zapatitos de estambre celeste con blanco y me los pone en las manos. 
Los acerco hacia mi y mis pensamientos se llenas de ilusión, esos hermosos zapatitos asen querer tener un bebito entre mis brazos. 
Mis ojos se llenan de lagrimas al pensar en que podríamos tener un bebito. Una sonrisa se estira en mis labios mientras los sigo observando. 
- Y bien? Que dices si llenamos esos zapatitos con unos piecitos pequeñitos?. Dice Leo. 
Veo un brillo en sus ojos que no me hace dudar en que él anhela tener un bebito que yo le puedo dar.   
- E… está bien. Digo y Leo me abraza con gran felicidad haciendo que mis pies se despeguen del suelo.  
- TE AMO MI NIÑA.  
- TAMBIÉN TE AMO MI AMOR. Digo y nos que damos abrazados. 
- Solo me faltan unos días para que termine el tratamiento de 6 meses de los anticonceptivos, iré con el ginecólogo para ver qué nos dice. 
- Claro mi amor yo mismo té llevo, necesitamos escuchar ambos que dice el ginecólogo. 
Dias después… 
Hoy es mi última pastilla anticonceptiva, Leo me dijo que en cuanto llegue del trabajo, iremos a ver al ginecólogo. El desayuno ya está listo y yo ya me he cambiado, me he puesto un pantalón de mezclilla celeste y una blusa blanca de manga larga con rallaras negras y mis tenis de piso blancos. 
Escucho la moto llegar y segundos después, Leo entra a la casa. 
- Hola nena, ya lista para que nos vayamos, que linda te vez. Me abraza y me besa la frente. 
- Jejejeje si estoy lista pero antes tienes que desayunar.  
Leo se va rápido a la habitación y en 10 minutos en lo que preparo un licuado para mi, sale ya bañado descalzo, solo con su pantalón, todo su torso y cabello está mojado. Se sienta a comer a toda prisa y después de unos minutos se termina de arreglar y nos vamos con el ginecólogo. 
Estamos en la sala de espera, veo a Leo que está sentado a lado mío que mueve los pies nervioso y me aprieta la mano que la tengo entrelazada con la de él. 
- Tranquila nena. Dice y me rio por que el nervioso es él. 
- Jejejeje creo que tu eres el que se debe de tranquilizar. 
Escuchamos la puerta del consultorio abrirse y vemos salir a una chica de unos 25 años con la pancita de embarazo. 
La asistente nos mira. 
- Pasen por favor. Dice. 
Ambos nos levantamos y nos metemos al consultorio. 
Le comenzamos a decir al ginecólogo lo que tenemos planeado y después de escucharnos me pasa al sillón, se comienza a inclinar asta quedar acostada y comienza a revisar mi vientre por un ultrasonido mientras que Leo ve desde su asiento.  
- Mira Valeria, por lo que veo tu matriz está muy bien al igual que tus ovarios se ven saludables, todo está perfectamente bien solo hay una cosita que debemos corregir. 
- Que es doctor. Pregunto mientras me abrocho el pantalón y me paro. 
- Tu peso, no digo que sea mucho es poco lo que tienes que bajar, pero aveces eso influye en que te cueste quedar embarazada… 


CHIC@S HERMOS@S ESPERO QUE LES GUSTE ESTE CAPÍTULO NUEVO. DÉJENME SU ESTRELLITA O ALGÚN COMENTARIO, PARA SABER QUE LES ESTÁ PARECIENDO Y PARA DEDICARLES UN CAPÍTULO. 
Las saluda Jacquivel.❤️❤️❤️ 
 



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En el texto hay: superacion, amor, traición.

Editado: 01.06.2021

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