Había transcurrido una semana de clases y no había pasado nada extraordinario en el cole solo el hecho de que a Alexander le gustaba cada día más Estefany.
Era costumbre en el colegio que para darle la bienvenida a los nuevos estudiantes se hacían dos actividades una era un campeonato de futbol y la otra una fiesta
Cabe destacar que la angloamericana era sumamente reconocida a nivel del país como uno de los colegios que tenían uno de los mejores equipos de futbol juvenil ya que los varones eran los actuales campeones y aunque las señoritas no habían ganado ningún campeonato tenían un equipo competitivo porque el colegio tenía las dos ramas de futbolito de jóvenes y señoritas.
Llego el tan esperado día el viernes que era el día del campeonato interno de futbolito todos los estudiantes estaba en las graderías del colegio en estos torneos era una forma fácil de darse a conocer y destacar.
El equipo de I técnico, el curso donde estaba Alexander eran los campeones del año anterior cuando todos ellos estaban en tercero de ciclo.
Alexander estaba en las graderías y observaba los partidos con atención lo mejor de todo es que Johana estaba sentada a su lado por increíble que le parecía a él ella siempre parecía querer estar a su lado y daba muestras de que le agradaba la compañía de él.
-Este año el campeonato está más emocionante dijo ella
-si esta entretenido dijo Alexander aunque estaba viendo el partido de reojo observaba que linda se miraba Johana así como andaba vestida, usaba un short blanco, una blusa roja, y una gorra blanca con ribetes rojos la verdad que como ella se vistiera se miraba bien
Johana era una de las chicas más populares del colegio una por su belleza pero sobre todo por su modo tan bonito y humilde que a pesar de saberse bonita no era nada creída era muy amable a todos les hablaba - muy al contrario de esas jóvenes que por saberse bonitas no le hablan a nadie sino que son súper creídas pedantes y arrogantes “que parecía que no iban al baño” según decían los varones ese tipo de actitud caía mal. Porque como decía Alexander “no hay cosa mejor que una mujer bonita y que además sea amable”
Gooooooool! gritaron los que estaban en las graderías. Era un precioso gol la verdad que los chicos de primero técnico eran excelentes jugadores por algo eran los actuales campeones esa jugada que habían elaborado Roberto al que le decían “Dieguito” por compararlo con el jugador Argentino Diego Maradona aunque el otro equipo era muy bueno también el partido estaba empatado 1 a 1- “se va el padrecito se la pasa a Roberto este la retrasa para coquí que con una gambeta se la pasa a Ronald este se quita a un defensa y suelta un derechazo y la manda al fondo de la red…. goooool!”Gritaba un narrador aficionado que estaba en las graderías. Termino el partido con un triunfo 2 a 1 a favor de la angloamericana
Todos estaban muy contentos el equipo de primero técnico estaba en la final contra la Nashville School su más enconado rival.
Mientras empezaba el partido de la gran final el ambiente era bien festivo, los estudiantes hacían diferentes actividades mientras algunos bailaban otros iban a la cafetería a comer algo y algunos platicaban en pareja entre estos últimos estaban Ronald y Johana
Que alejados del campo de futbol cerca donde estaba la piscina. Alexander los observo desde lejos y en su corazón sintió una punzada de entre celos y tristeza.
-Pero Johana vos sabes que te quiero dijo Ronald
-Eso dices pero no lo demuestras cuando estas con tus amigos te comportas bien indiferente conmigo y me ignoras completamente solo cuando estas a solas conmigo te portas cariñoso y además crees que no me doy cuenta que esa resbalosa de Nancy esta de ofrecida con vos si es que solo le falta que te pida que le hagas el amor. Al oír esto Ronald sonrió y dijo – ¿eso me suena a celos Johana? –No,dijo ella -ahora no tal vez en otro tiempo cuando éramos novios, cuando yo te queríay sabes te quise mucho pero vos no supiste valorar el amor que te tuve no me supiste valorar siempre de coqueto con ese montón de chavas. Sabes Ronald a veces uno no valora lo que tiene hasta que lo ha perdido.
Él sonreía nerviosamente sabía que todo lo que ella decía era verdad pues mientras él la tubo mientras fue su novia, ella que era una de las chicas más bellas del cole el no supo darle el valor que tenía y ahora que ya no andaban él se daba cuenta de lo que ella significaba para él.
-Es cierto dijo él pero olvidemos el pasado Johana regresa conmigo volvamos a ser novios sabes que todavía te quiero.
-Tal vez sea cierto Ronald pero lamentablemente ya no siento nada por ti—al decir esto Johana se mordía los labios y volvía la cara como temiendo que sus ojos traicionaran lo que acababa de decir
En eso escucharon un sonido de una ocarina que anunciaba que el partido estaba a punto de comenzar Ronald hizo un gesto de contrariedad pues había pasado mucho tiempo desde que tuviera el ultimo mano a mano con Johana y en cierta forma ella tenía razón en que él era muy diferente cuando estaba con sus amigos a cuando estaba con ella pues con sus amigos él tenía una reputación que cuidar y no se podía dar el lujo de mostrarse débil pues él era el líder y como tal tenía que darse su lugar, claro esas son cosas que las mujeres no entienden y no entenderán jamás, que ella no entendería.