Extraña cercanía

CAPÍTULO 9

SEVAN

Jayden no había llegado a la preparatoria, esperaba verla por la biblioteca, pero tampoco estaba ahí, quería disculparme con ella por lo sucedido en la noche, vuelvo a repetirlo no fue mi intención reírme o burlarme.

Hay pelirroja, si tu tan solo supieras por todo lo que paso te querrías alejar de mí.

Por la escuela y en todas partes se escuchaba el rumor de la desaparición de una chica y me pareció raro que haya pasado eso, aún no es semana ni mes de hacer los sacrificios, no nos podemos adelantar a menos que seas un superior y puedas hacer lo que a ti se te diera la gana, pero tengo en mi pensamiento de que la última vez que habló sobre esto fue Neil, él puso un ojo en la pelirroja.

Hoy era día de reunirse todos en el bosque, estarían todas las personas peculiares de este lugar. Cabe recalcar que todos aquí son jóvenes no hay ningún adulto y no lo digo por los que ya no envejezcan sino por los que son verdaderamente jóvenes.

Escuché que sonó la puerta principal y me dirigí a abrir para ver de quien se trataba y era Neil y Amira, esta segunda se le veía algo cansada, tenía unas ojeras algo notables. Neil la sostenía de un costado para que no se caiga, me alarmé porque se lo que significa esas señales en ella.

Le ayude a sostenerla y ambos ingresamos y la acostamos en uno de los sofás grandes. Coloque debajo de sus piernas una almohada.

—Sevan tienes que ayudarme —me suplico asustado, Neil— se ha levantado así y no sé cómo calmar esto.

Su rostro demostraba inquietud y desespero.

Amira se ha puesto así por falta de años, ella como es nueva en esto, su proceso de obtener vida es lento mientras tanto que los años pasan rápido y le van jalando tiempo de sobrevivencia.

—Hay una cosa que se puede hacer —le dije— pero tú sabes que es lo que puede pasar en ese momento.

Me acuclillé al lado de la castaña y sostuve su mano, tenía su rostro lleno de sudor y temblaba un poco.

—¡No me importa! —gritó— daré mi vida si es necesario, pero por favor que no le pasa nada a ella —suplicaba extendiendo sus manos hacia ella.

Mire a Becca desde mi posición y ella solo hizo una mueca, un pequeño dato de mi hermana es que en estos casos no demuestra sus emociones así que le da igual lo que esté pasando ahora, siempre me ha dicho que todo tiene solución así que el pensamiento de ella ahora es que Amira de podrá salvar.

—Bien —solo me limite a decir— debemos de llevarla al centro del bosque.

En estos momentos no me encontraba bien como para estar triste por ella, en partes lo estoy, pero tampoco lo demuestro, suena egoísta pero lo único que tengo en mente es solucionar todo con Jayden. Neil tiene mi apoyo y en ningún momento lo dejaré solo.

Cargue entre mis brazos a la castaña, estaba dormida ya que se había desmayado. Caminamos en medio de toda la nieve que había, era aún de tarde por lo que el sol ya se estaba ocultado y el anochecer se estaba haciendo presente. Tampoco quería que a ella le pasara algo, ha estado por mucho tiempo con nosotros y no es nada bueno que termine así.

Ella estaba un poco más delgada de lo normal, poco a poco se iba resecando su piel, su respiración en estos momentos era demasiado rápida y su cuerpo estaba caliente. Tenerla en mis brazos era como sostener a una pluma, literalmente ella pesaba poco con este cambio que ha tenido tan repentinamente.

¿En qué momento ella se descuidó para llegar a este extremo?

Me pongo siempre a pensar en mi hermana que tal vez le pueda pasar lo mismo, pero yo trato de que sus años de vida estén siempre completos. En cambio, para Amira, este es su segunda recaída, la primera no fue tan complicada.

¿Saben porque no podemos hacer en estos momentos un sacrificio?

Porque algún imbécil se le ocurrió hacer uno ahora recientemente, no podemos hacer más de lo que nos corresponde, porque se nos disminuirá un buen de años.

Luego de caminar por más de quince minutos, por un montón de pinos cubiertos de nieve. Nos dirigíamos a la parte más alejada para no ser descubiertos.

Neil iba preocupado agarrándose siempre las manos o cogiendo su cabeza a cada rato, en cambio mi hermana estaba normal como si fuese un simple paseo para ella, pero sé que en el fondo está preocupada.

Llegamos al lugar en donde sería nuestro destino. Este lugar que estaba al frente de nosotros era como una pared de puros pinos verdes llenos de nieve.

Por en medio saldría la ninfa la cual estos pinos cubrirían su cuerpo. Por delante como lo dije, aquel cuerpo era cubierto por yerbas enredadas por todas partes, sus cabellos largos oscuros caían por sus pechos y a estos los cubrían, tenía un cuerpo con curvas bien definidas y las partes de su piel que algunas eran notables se le apreciaban suaves, además de ser alta.

Cuando ella aparecía todos tenían que mirar hacia abajo, haciendo reverencia hacia ella. Nos paramos en frente de este sitio, mi hermana y Neil se pusieron a cada lado mío, quedando yo en el medio.

Amira ahora se encontraba acostada en un sitio hecho de piedras decorado con flores y rosas.



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En el texto hay: pelirroja, misterio confucion, amigos nuevos

Editado: 28.03.2024

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