Fabricio Belucci y Alessia Carson. Herencia Belucci #3.

16. La noche de bodas.

Buscando la mejor manera de salir de la casa.

-No hay salida solo existe la puerta principal, decía el señor Gabriel.

Fabricio toma la iniciativa y se decide salir e ir al hotel.

-Trae los vehículos al frente lo que más puedas a la entrada.

-Primero deberíamos salir nosotros dijo Luisa.

-Si es mejor los invitados primero. Vayan saliendo.

Y así se hizo. Hasta Pedro, su esposa los niños se fueron.

-Hay papá no te quería dejarte tan pronto. Hasta luego.

-Hija ahora estás casada ve con tu esposo. Se abrazan con ternura. Prometiendose volver a verse pronto.

-Fabricio decía el abuelo prepara a Alessia.

-Si abuelo.

-Preparar para que. Fabricio que pasa. Me tengo que esconder acaso.

-No cariño está ves no te esconderas.

-Ahora camiras a mi lado del brazo, levanta la cabeza con orgullo y no dejes que sus preguntas e insinuaciones te afecten.

-De acuerdo Fabricio lo haré.

-Hhaaay, Alessia no me llames así. Es más fácil si te acostumbras a mi amor o cariño simplemente.

-Recuerda mi niña de hoy en adelante eres una Belucci y tú comportamiento debe de ser como tal. Le cuestionaba el abuelo.

-Disculpe abuelo, así será.

-Papa la enfermera vendrá mañana y junto a los Tomasso te cuidaran. 

-Muchachos gracias por su servicio. Les decía Alessia al servio de catherinen

Se despidió Alessia.

Muy sería pues estaba entendiendo los alcances de la decisión que había tomado.

-Salimos, dijo con la voz quedrada. Resistiendo las ganas de llorar.

-Fabricio pensó que era por dejar a su familia, a sus vecinos y conocidos y a su ciudad.

-Bueno son dos autos en el primero vamos la abuela y yo, Julio y los tios. En el segundo auto van ustedes y Zury.

-De acuerdo abuelo.

-Vamos nosotros, pon atención Alessia.

-Si abuelo.

-El señor Piero adrio la puerta y si dirija al auto abrazando a la abuela, Julio iba primero junto a los de seguridad para adrirles paso.

Los flashes no paraba y los periodistas querían saber, por qué están aquí don Piero, es cierto que su nieto se casó en secreto don Piero, díganos algo.

-Julio abrió la puerta del coche y los tíos entraron luego la abuela entró el abuelo le hizo señas a Julio y este entro.

-El abuelo se quedó en la puerta y dijo con voz firme estamos de vacaciones cuál es el problema.

-Su nieto se casó a escondidas.

-Señor Piero.

-Señores daremos una conferencia al llegar a casa. Gracias a todos. Nosotros los llamaremos.

El abuelo subió a la limosina y cerró la puerta. Al hotel dijo el abuelo dirijendose a el chófer 

En lo siguiente Fabricio abrió la puerta y salieron con dirección al auto. 

Todos corrieron a su alcance pero el equipo de seguridad los rodeó y no los dejo acercarse.

-Señor Fabricio se casó usted a escondidas.

-Como dijo el abuelo se dará una conferencia. Ya les avisaremos en su momento.

-Señor, señor, señor Fabricio.

-Zury entro al auto luego Alessia y tal como lo hizo el abuelo dijo estas palabras.

-Para satisfacer la curiosidad. 

-Si señores me casé la semana pasada. 

-Hoy recogimos los anillos ya que fueron personalizados.

Entro al auto y salieron con dirección al hotel.

En la recepción del hotel se dieron órdenes precisas de que los paparazzi no debían pasar.

La seguridad privada cuidaban el ascensor ya que estaban en las Suits y nadie podía subir.

Sin embargó se formó un varuyo a la hora de que se dirijieron al restaurant del hotel.

Todos estaban en las puertas y ventanas del hotel los paparazzi y las luces de los flashes de las cámaras relucian en el cristal.

Fabricio pregunto a la chica de recepción si daban servicio al cuarto.

La chica respondió si, si, señor. Ese tipo de servicio no se dan.

-Ahhh déjeme hacer una llamada señor. Pero....

-Si, Señor, por ser las Suits si lo haremos.

-Gracias señorita.

En seguida un camarero subirá con el menú y tomara sus órdenes.

-Nuevamente gracias señorita.

Un jóven se acercó a ellos llevaba los menús en sus manos.

-Subimos señores tomaré su pedido.

-Comeremos junto en primera suite. Dijo Fabricio.

-No dejemos a los esposos compartir. Dijo el abuelo.

-Bueno abuelo gracias. 

-Nosotros comeremos aquí traemos fruta, papas y pescado. De acuerdo amor. Las bebidas las tomamos del mini-bar.

-Joven comeremos en la Suite#2.

Llegamos y pedimos platillos compartidos joven por favor. 

-Y trae un menú por suite. Por favor.

-Si señor en seguida. 

-Son unos veinte minutos de espera. Ya vuelvo.

Toc, toc, la puerta sonó.

Al abrirla el gerente del hotel paso, chicos por aquí.

-Los muchachos acomodaban en la mesas las diferentes viandas con comidas tal y como lo pidió el abuelo.

-Sirvieron al cuarto de mi nieto.

-Si, señor.

-En este momento se está sirviendo.

-Mientras en la Suite #1.

-Tocan a la puerta y una chica dice servicio. 

-Pasan dos chicas acomodan las viandas sirven el vino y Alessia y Fabricio se acercan a la mesa a cenar.

Comen, se rien, pasan un buen rato.

-Que tal si tomamos un baño y miramos películas.

-Tomaremos un baño juntitos...

-Oye tonto, bien sabes l...

-Si, ya entendí, jajaja, reían Fabricio divertido.

-Me bañaré primero. Dijo Alessia.

-Esta bien, aquí te espero.

Así pasaron la noche de bodas viendo películas y comiendo del mini-bar.

En la habitación de la Suite #2.

Se disfrutada de la noche.

El abuelo levanta la copa llamándola atención de los presentes.

-Un brindis por la nueva pareja, los nuevos socios y porque todo salga bien.

-Deberiamos apostar. Dijo un tío divertido.

-A qué se hace realidad. Apostaba el otro tío.

-Señores a kilómetros de nota la química entre esos dos. Por favor.




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