Capítulo 45: IMPARABLE

Aurora.

—Es un verdadero placer tener a Aurora Bellerose aquí —miro a una de las mujeres que está entrevistándome.

Me han invitado a un programa de televisión y no pude negarme a conceder una entrevista.

—El placer es mío —respondo con una sonrisa, miro a la audiencia y no puedo evitar no sonreír más cuando veo entre el público aquí a varias personas con carteles que tiene cosas hermosas escritas para mí.

—La Barbie de New York —habla otra de las entrevistadoras, logrando que regrese la mirada a ellas—. ¿Te gusta el apodo que han comenzando a usar contigo? —pregunta con curiosidad.

—Creo que es lindo —sonrío—. Es un verdadero placer que asocien mi nombre a una Barbie porque todos sabemos que Barbie se caracteriza por ser lo que quiere ser —ríen.

—Además, eres como una barbie personificada —sonrío ante el halago—. Todo New York ama tu estilo, te has convertido en un verdadero ícono de la moda, millones de personas te siguen ahora deseando aprender de ti, ¿cómo te sientes ahora que tu nombre resuena en todo New York?

Suelto un suspiro lento.

—No voy a mentir, ha sido un cambio brutal, estaba acostumbrada a pasar desapercibida y sentirme como una persona invisible entre la sociedad —comienzo—, y ahora, todo es tan diferente a lo que era mi vida años atrás —miro al público—. Aunque, realmente me gusta destacar y saber que hay personas que me siguen y adoran las cosas que hago, fue un cambio brutal y que dio un giro completo a mi vida pero sin duda alguna disfruto mucho del punto en donde estoy ahora mismo.

Miro a Selene entre el público, es quien me ha acompañado hoy a esta entrevista.

—Aunque sigue siendo raro caminar por las calles de New York y ver mi rostro en cada rincón de la ciudad —sonrío y todos ríen.

—Eres un ícono de la moda, una influencer a la que todos aman en redes sociales, locutora de radio, trabajas con marcas tan grandes e importantes y no solo eso sino que eres una de las magnates más importantes en New York —asiento feliz—. ¿En algún momento de tu vida viste posible que todo esto ocurriera?

Niego de inmediato.

—Seré sincera y la verdad es que jamás creí que esto podría ocurrirme —he hablado ya muchas veces sobre esto en mis redes sociales así que no me apena hablarlo, además, no es un tema que deba avergonzarme, es parte de mí—. Siempre fui una persona que se menospreciaba a sí misma, me encargaba de lastimarme y de no confiar en mí. Me conformaba con tan poco que el sentirme en una zona de confort me obligaba a mantenerme ahí.

Sonrío tenuemente.

—Tenía tanto miedo del cambio y temía tanto de la vida que me quedaba en los lugares que para mi eran un sitio seguro aunque en realidad también eran sitios que me obligaban a estancarme y no avanzar —todos me escuchan con atención—. Después, ocurrieron situaciones en mi vida que me hicieron caer en un pozo oscuro, creía que mis sueños y metas eran absurdos, rompieron mis sueños y yo di ese poder para que me hundieran, estuve por años en la oscuridad que llegó un momento en donde realmente me creí que esa sería mi vida para siempre —recordar el pasado me da melancolía aunque no me hace extrañar nada—. Fui secretaria y por un largo tiempo creí que ese sería mi destino para toda la vida entonces si yo le dijera a la Aurora de ese entonces que en realidad la vida nos va a recompensar con lo que verdaderamente merecemos, muy posiblemente esa Aurora se pondría a llorar pensando que es una broma de muy mal gusto.

—¿Extrañas ser secretaria? —pregunta una de las mujeres.

—Fue parte importante de mi vida y estoy agradecida de todo lo que aprendí en ese entonces, pero no extraño ser secretaria, mi sueño siempre fue ser locutora de radio y ahora que lo soy me siento completamente feliz de hacer lo que amo.

—Eras secretaria cuando diste el salto a la fama —habla la primera mujer—, con un video que se viralizó de ti cantando una canción de Taylor Swift —el público ríe y siento como mis mejillas se calientan, sonrío con orgullo—. ¿Era algo que esperabas que ocurriera?

Niego con una sonrisa.

—¡Estaba ebria! —suelto, logrando que las risas incrementen—. Estaba ebria —miro a la cámara—. No se emborrachen jamás y niños, si están viendo esto, beber no es bueno —más risas—. Estaba borracha, había sido un mal día, tenía una reunión con mis amigas y de la nada ya estaba en la tarima tocando la guitarra y tocando ‘Mine’ —suelto un suspiro—. No sabía que alguien me había grabado hasta el día siguiente que el video ya era viral en todo internet.

Paso las manos sobre mi falda Chanel.

—Aunque no puedo quejarme, después de ese video fue cuando comencé a trabajar en redes sociales y personas comenzaron a seguirme. Era una secretaria con un video viral de ella cantando Taylor Swift.

—¿Qué dijo tu familia acerca de ese video?

—Nada fuera de lo normal —levanto mis hombros—. Mi familia me escuchaba todo el tiempo cantar y tocar la guitarra que para ellos ese video fue nada cuando ya estaban acostumbrados a tener conciertos míos a diario.

—Y ahora todo el público goza de escucharte cantar cada que subes un cover a tus redes sociales —exclama sonriente una de las mujeres.

—Es algo que disfruto y sé que hay gente que también lo hace, me gusta compartirlo y soy la más feliz de hacerlo.

Miro a una de las entrevistadoras.

—¿Te molesta si iniciamos con las preguntas del público? —pregunta y niego.

—Será un honor.

Le pasan el micrófono a una pequeña que se levanta entre la multitud.

—¡Hola, Aurora! —saluda con una enorme sonrisa la pequeña castaña.

—Hola, linda —la saludo con un pequeño ademán y una sonrisa.

—Yo tengo una pregunta para ti —asiento—. ¿Copito es un gato gruñón?

Río al igual que todos aquí mientras la pantalla detrás de mí reproduce imágenes de mi gato.

—Copito es un gato encantador —comienzo—, pero sí es un poco gruñón aunque creo que es por los años que comienzan a caerle de peso —ríen—. Es un gato que disfruta mucho de mirar New York y no le gusta que lo molesten cuando está concentrado mirando la ciudad. Es un buen gato y no suele causar problemas pero a veces parece ser un gato que puede juzgarte con la mirada también.