Fantasía de un último deseo ll

Tan solo un golpe

Alex había activado en el pasado varias veces la Fase Límite y daba por hecho que en esta ocasión no iba a ser tan diferente ya que su cuerpo estaba acostumbrado a aquella sobrecarga extrema.

Podía recordar con claridad que la primera vez que la usó fue cuando enfrentó al Emisario de la Muerte, pero lo que nunca supo fue que aquel límite ya lo había utilizado antes, en un entrenamiento cara a cara con el Jefe. No había dudas de que con el tiempo fue capaz de manejarlo y no sufrir demasiado las consecuencias físicas que acarreaba su uso.

Sin embargo, estaba muy equivocado al pensar que era su carta de triunfo. Esta vez la situación era muy distinta. Su rabia e impotencia por la explosión ocurrida lo llevó a forzar su cuerpo a un límite del cual había perdido costumbre.

Se había lanzado con una velocidad asombrosa hacia el Invasor de la armadura de oro sin pensar que su cuerpo no respondería como lo conocía. Ni siquiera sus ojos podían adaptarse al vertiginoso movimiento del ambiente.

Quería devolverle todo el daño que había causado a las personas inocentes alcanzadas por la explosión, pero al no tener control de sus movimientos ni siquiera logró pasar cerca de él. Hubiera seguido descontrolado si no hubiese chocado con un grueso árbol que se hallaba en el camino y que, debido al impacto, se partió a la mitad.

"¿Tan torpe soy? ¡No puedo controlar mi cuerpo! Han pasado muchos meses desde la última vez que ocupé la Fase Límite y por no entrenar como corresponde... Todo se mueve tan rápido a mi alrededor que me está mareando... ¡Mierda!"

―Que no te engañen las apariencias. En ese estado cualquier Cazador se vuelve peligroso. Esta vez no debes confiarte.

―Al principio me sorprendió por la sorprendente cantidad de Energía que liberó su cuerpo, pero no es capaz de controlarlo. De todas formas, parece que me entretendrá unos minutos más.

―Que sean segundos. Hay que encargarse de los otros ―exclamó el Invasor de pelo blanco con una sonrisa en el rostro. Al ver el poder de Alex le hizo recordar muchas cosas que había vivido. En su interior solo se preguntaba si realmente se trataba de él.

Al intentar dar un paso hacia adelante, su Energía Espiritual se descontroló mucho más. El suelo cedió ante tal poder, quedando su pierna atrapada. Maldecía por su lamentable estado y que sus músculos gritaran de dolor. Se sentía como si cientos de agujas le clavaran cada fibra. Los temblores de su cuerpo eran cada vez más violentos, e incluso venían contracciones muy fuertes e involuntarias. Cada vena le sobresalía tanto que cualquiera pensaría que su torrente sanguíneo estaba a punto de estallar.

El dolor que lo estaba azotando era mucho peor que cuando competía hasta ya no poder más en cada carrera de atletismo. ¿Qué puedo hacer en este estado? Se preguntaba una y otra vez.

El Invasor se acercaba lentamente, riéndose de su penosa situación y aquello lo enfureció más. No solo había matado a sangre fría a personas y animales, sino que también se burlaba de él.

Presionó el agrietado suelo con los dedos de los pies para arremeter con mucha potencia hacia el Invasor, pero un calambre en la pierna lo obligó a salir disparado hacia el cielo.

Tanto dolor le obligó a contraer los músculos de la cara y apretar los dientes. Fue tal el malestar que no logró contener las lágrimas. 

"A pesar de que estas últimas dos semanas he entrenado mucho... no bastó para ser capaz de aguantar la Fase Límite. Estoy perdido. ¡Por más esfuerzo que haga no puedo controlar mi cuerpo!".

Yuuki se encontraba tumbada de espalda en el suelo sufriendo por el fuerte impacto recibido a causa de la explosión. Sus oídos no dejaban de emitir un doloroso e irritable pitido. Aun así, todo aquello estaba en segundo plano.

Lo que más le dolía en el interior era saber que habían muerto personas  y no ser lo suficientemente fuerte para defenderlos a todos.

―Si solo hubiese tenido más Energía Espiritual... habría podido crear más escudos o uno lo suficientemente grande.

Observaba el cielo con los ojos llorosos solo por la impotencia que le causaba el momento. Trataba de buscar un consuelo que la impulsara a seguir adelante. Pero ni siquiera su vida marchaba de maravilla.

―Por culpa de Alex... solo estoy sufriendo.

Sí. Era culpa de él por haberla ilusionado y que hubiese jugado con sus sentimientos para al final dejarla de lado con la aparición de Luna. Deseaba en el fondo no volver a hablarle, pero tampoco quería tomar aquella decisión tan drástica.

―¡No puedo seguir pensando en eso! ―exclamó al ver el cielo cubierto nuevamente por decenas de Invasores―. No permitiré que sigan matando. 

Alzó su arco listo para atacar. Al observar a su alrededor pudo apreciar con mejor detalle lo que había ocurrido. El edificio había explotado en miles de pedazos. Muchos humanos sin vida estaban repartidos por el terreno, pero la gran mayoría se había salvado gracias a su poder.

Sabía que necesitaba darse prisa, principalmente por la complicada pelea que estaba teniendo Alex. Se sorprendió al escucharlo gritar y entrar en Fase Límite.

La explosión del edificio conmocionó a Max que se encontraba rodeado de Invasores. Sabía que la onda expansiva había matado a un número no menor de personas, a pesar de que había sido de muy corto alcance. Se preguntaba cuántas, que estaban al interior del edificio, podrían haber sobrevivido. La única forma de averiguarlo era acabar con todos lo más pronto posible, pero por más que matara no dejaban de aparecer.

"No creo que hayan muerto tantos. Yuuki estaba ahí... algo debió haber hecho. Es muy preocupada por todos. Espero no le haya pasado nada malo".

Quería teletransportarse hasta ella para saber cómo estaba, pero primero que nada debía eliminar a los Invasores que seguían apareciendo.



#10597 en Fantasía
#14943 en Otros
#2390 en Acción

En el texto hay: extraterrestres, superpoderes, romance accion aventura

Editado: 09.07.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.