Fantasmas entre nosotros

Alma Inocente. Parte 2.

Sentía mis extremidades pesadas, no podía moverme con facilidad. Estaba bajo el agua, ahora podía ver, mis ojos ardían , no podía respirar. Intenté nadar hacia la superficie pero no podía, por más que nadaba no podía llegar, el aire en mis pulmones se estaba terminando. Entonces lo vi, Yibo, intentando sacarme, estiró mi brazo para poder alcanzar el suyo, pero algo me jalo hacia abajo. Todo quedo en negro, no supe mas.

Me desperté jadeando, mis pulmones pidiendo el aire que sentía que me faltaba, fue tan real. Tomé mi teléfono para verificar la hora, 4:32 AM. En ese momento, sentí como empezaba a vibrar en señal de que una llamada estaba entrando, era mi esposo, conteste inmediatamente.

-Hola amor, ¿te desperté?

-Hola, no tranquilo. Tuve una pesadilla, me desperté justo antes de que entrara la llamada.

-¿Y estas bien?, ¿Quieres contarme?

-Fue solo una pesadilla, estoy bien. Tranquilo, termina tu turno y ven a casa.- dije en un intento de tranquilizar a mi esposo. No es la primera vez que me pasa esto, pero casi siempre estoy con él cuando sucede, Yibo sabe que algunas pesadillas pueden ser muy reales como la de hoy.

-Esta bien. De camino a casa pasaré a comprar cosas para prepararte un delicioso almuerzo.- dijo y fue entonces que pude sonreír.

-Eso me parece bien. No me dijiste que pasó, ¿por qué me llamaste? .- dije intentando cambiar de tema.

-El turno nocturno está muy calmado hoy, estaba en mi oficina, pero me estaba durmiendo, fue entonces que pensé en ¿por qué no llamarle a mi esposo?

-¡Claro!, supongo que pensaste “mi esposo está en casa sin hacer nada a las 4:32 am, excepto tal vez durmiendo porque mañana tiene que trabajar” .- mencione con sarcasmo.

-Bueno, pero al menos no te desperté. Ya estabas despierto.- dijo y sospecho que probablemente estaba sonriendo.

-Touche.

Terminé de hablar con él. Intenté dormir nuevamente, pero me fue imposible. Seguía recordando ese sueño.

.

.

Llegué a la cafetería, mientras veía como unos repartidores bajaban algunas cosas y las ingresaban a la tienda, Yu Bin los estaba recibiendo.

-Ahí están muy bien caballeros, muchas gracias. - dijo Yu Bin cuando iba ingresando a la tienda. - Que bueno que llegaste Zhan, mira los que nos mandaron.- mencionó emocionado empezando a abrir una caja.

-Vaya, cuando el señor Jesus dijo que nos iban a empezar a llegar cajas con productos esta semana, no pensé que fuera a ser tan rápido.

-Lo sé, pero mira, en la caja vienen algunos posters podemos pegarlos en las paredes y otros en el vidrio para que la gente vea la novedad.- dijo emocionado.

Al principio, no estaba seguro de abrir una cafetería, sabía que quería tener mi propio negocio, de eso estaba seguro. Pero no tenía idea de que clase de negocio, lo platiqué con Yibo y entre tantas opciones, decidí que sería una cafetería. ¿Por qué?, bueno no hay muchas en el pueblo, solamente dos y están en distintas ubicaciones, demasiado alejadas del centro. Fue entonces que lo decidimos, buscamos un local y compramos el mobiliario necesario, para ese entonces Yu Bin se había ido a la ciudad a trabajar con su hermana, pero regresó alegando que un alma libre como él no podía estar encerrado en una oficina.

Mientras veía como él seguía sacando cosas de la caja, yo fui a la oficina a dejar mi abrigo y mi bolso. Sentí como perdía el equilibrio, y por un momento ya no supe nada de mi.

Desperté y todo estaba resplandeciente, era obvio que estaba en el exterior de alguna casa. Mire hacia a los lados encontrándome con una mesa de jardín, un patio grande y frente a mi estaba una piscina de gran profundidad, la casa era antigua, se notaba que la habían remodelado en diferentes ocasiones.

Camine hacia adentro, a simple vista parecía que no había nadie. Luego escuche ruidos, eran voces de niños provenían de la sala, camine hasta ahí y ahí estaban ellos, un niño y una niña de aparentemente 10 y 6 años. Estaban discutiendo, la niña al parecer quería jugar pero su hermano le dijo algo que no podía escuchar, entonces ella salió corriendo rumbo al patio, la seguí.

Vi como tomaba una pelota y empezaba a jugar con ella, hasta que al tomarla con fuerza, esta cayó en la piscina, intenté evitar que se acercara a ella pero no podía verme. Vi cómo intentó sacarla, cayendo al agua, vi como su hermano salió corriendo de la casa para intentar sacarla sin éxito alguno, vi como su vida se iba y vi como su fantasma apareció justo enfrente de mi.

Sentí el olor a alcohol etílico, y como Yu Bin me hablaba.

-¿Zhan?.. Zhan.. ¡Zhan!. Bien, llamaré a Yibo si no despiertas. Zhan, despierta. ¿qué te pasa?.

-Ni se te ocurra molestarlo, llego muy cansado.- dije con una voz dificultosa.

-¡Zhan! .- exclamó.- por Dios Zhan, crei que habias muerto.

-No seas exagerado. - dije mientras me ayudaba a incorporarme.

-¿Que no sea exagerado?. Estaba tranquilamente en la cocina acomodando las cosas cuando escuche un ruido de algo cayéndose, cuando entre te vi tirado en el suelo y sudando frío. Me asuste.

-Perdón. - dije con un puchero.

-Si está bien. Pero no lo vuelvas a hacer. Si te vas a desmayar, avisame primero. - dijo mientras se cruzaba de brazos con enojo fingido.

Reí por la forma en la que se comportaba.- Está bien.

-Pero ya dime que te paso. De verdad me preocupé, llegaste bien y luego verte en el suelo, bueno, hizo que casi quisiera llamar a las autoridades y no se ni para que.

No pude evitar reír por las ocurrencias de mi mejor amigo. De verdad que era el mejor para alegrarte en momentos difíciles.

-No fue nada. Es solo que iba hacia la cocina cuando de repente me sentí muy mareado. - dije. Yu Bin no dijo nada, solo se me quedó viendo fijamente. - ¿Qué? .- pregunte.

-Zhan, sé sincero conmigo.- dijo con voz seria.- ¿Yibo lo sabe?. Entiendo que esto no es lo que querías, acaban de casarse, pero cualquier decisión que tomes.- me tomo de las manos.- tienes mi apoyo.- declaró con voz firme.




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