fascinación

El acercamiento

El tropel de estudiantes se abalanzaba en la larga fila para acceder al transporte que los trasladaría desde las instalaciones universitarias hasta el centro de la ciudad.

Luego en la vía se iban apeando en las estaciones que estaban más cercanas de sus respectivos domicilios.

Natalia subió, tomó asiento y el asiento que estaba vacío a su lado fue ocupado por uno de los jóvenes simpáticos que se apostaban en la puerta del aula.

Era el de porte atlético y agradable sonrisa que tanto le llamaba la atención.

-Estuve desde temprano haciendo la fila, pero éste se llena pronto porque la mayoría termina las actividades académicas casi simultáneamente.

-Y tus amigos? Preguntó Natalia.

-Se fueron más temprano.

-Sé que tú eres Natalia, yo soy Vincenzo Falconetti.

Natalia sintió que su corazón hizo “tilín”. Se sintió halagada; ¡así que él conocía su nombre!

La conversación se desarrolló animadamente hasta que Natalia anunció que se bajaba en la siguiente estación.

-Si no te importa, me bajaré también del transporte en esa estación.

Vincenzo se ofreció a acompañarla hasta su domicilio si no la importunaba.

Natalia vio claramente la intención del joven de conocer donde ella vivía.

Caminaron hasta la entrada.

-Si quieres pasar, te ofrezco una gaseosa.

-Gracias, pero aún me falta un largo trecho para llegar a mi casa y es la hora de almorzar, no quiero interferir en la rutina de tu familia.

-Nos vemos pronto Natalia.

-Claro!

Natalia se sintió muy agradecida con la vida por los recientes acontecimientos con el chico de las gruesas gafas y la hermosa sonrisa.

Entró como un tornado a su habitación e inmediatamente llamó a Charlotte y le narró el episodio vivido con Vincenzo, el joven al que se le hacían hoyuelos en las mejillas cada vez que sonreía. 

Vincenzo hubo de tomar dos ómnibus para trasladarse a su residencia.

Llegando a ésta, lo esperaban Kevin y Mauricio.

-Qué tal estuvo el tour con Natalia, te atreviste por fin a hablarle?

El interrogatorio fue exhaustivo, querían conocer hasta el más mínimo detalle de la aventura planificada por ellos tres, para que Vincenzo conociera de cerca a la chica.  




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