Y supongo que se me fue de las manos, el quererte digo. Que sigo echándote de menos como el primer día, e incluso más. No pierdo la esperanza, no puedo perderla, porque si lo hago, entonces se acabó, del todo, para siempre. Lo único que me mantiene en pie es el recuerdo de que una vez me quisiste, y me he aferrado a eso para no derrumbarme.
Si una vez me quisiste, podrías volver ha hacerlo, porque nunca olvidamos a las personas del todo, siempre queda algo, un lugar, una fecha, una canción y, es por eso que aún sigo esperándote como la idiota que soy. Pero llegará el momento en que pueda dejar de aferrarme a los recuerdos y a la esperanza, y al soltarme de ellos, no me derrumbaré, seguiré hacia delante, sin ti. Eso no querrá decir que te haya olvidado, porque no se puede olvidar a alguien al que has querido tanto, pero recordarte no dolerá, o eso espero, porque si no, estare jodida, realmente jodida.