JOB

“este parece ser el lugar” se dijo Dalia en su mente mientras miraba un edificio alto con la puerta llena de personas, en su mayoría mujeres, que parecían esperar algo “todas vendrán para el trabajo?” se preguntó internamente.

Avanzo hacia el montón de gente, pero fue detenida por un a mano en su brazo – no puedes acercarte mucho – le dijo una joven. La cual tenía un cartel en la mano. Estaba por responder, pero fue interrumpida por la misma joven cuando grito – ya esta aquí!!!!!!! – y todas empezaron a correr y formar un camino con la guía del personal de seguridad.

Solo se podía escuchar gritos mencionando un nombre, pero no logro ver al dueño debido a la cantidad de gente que termino botándola al final.

Después de todo el alboroto, logro avanzar hacia la puerta, pero de nuevo fue detenida – vas a entrar a la empresa? – le pregunto un joven diferente a las demás. Pues no tenía carteles en la mano y parecía tranquila.

• Si – dijo Dalia.

La joven saco un sobre de cartera y se la dio – puedes hacerle llegar esto a Andru? Soy una fan suya y por eso no puedo entrar.

Dalia observo el sobre en su mano y lo levanto a la altura de su nariz – quien es Andru?

• Un modelo de esta empresa y también….
• Retírense de la puerta, ya se les dijo que tienen que estar detrás de esa línea – dijo un guardia. El cual termino interrumpiendo su conversación.

La joven solo se puso sus lentes de sol y se fue mientras Dalia se quedaba con el sobre. Sin más remedio termino por guardarlo en su bolsillo y se dio la vuelta – buenas tardes, estoy viniendo por trabajo…

• Muchas de esas chicas también han intentado entrar con esa escusa – volvió a interrumpirla el guardia.

Dalia busco la tarjeta y el papel que le dio Aileen y lo mostro de forma rápida – vengo en recomendación de la Srta. Aileen – le dijo.

El guardia la observo con desconfianza antes de mirar los papeles. En los cuales estaba la firma de Aileen como le dijo – puedes pasar – le devolvió todo y le dio pasada bajo la atenta mirada de todas las jovencitas en la puerta.

Dalia ingreso y se sintió perdida en ese lugar. Por fuera era puro vidrio resplandeciente y polarizado, y por dentro era pura loza blanca con acabados modernos. Avanzo hacía, la que pensó, era la recepcionista – buenos tardes, estoy viniendo para presentar mi curriculum para un puesto de trabajo…

• ¿Cuál es ese puesto? – le respondió. De forma nada educada y con una mirada despectiva.

Dalia sabía que esto se debía a su forma de vestir, pues al ser una agencia de modelos todo debía ser muy moderno aquí. Así que no hiso caso de eso y le entrego los mismos papeles que le mostro al guardia – asistente – dijo.

La recepcionista leyó los papeles y luego la observo mejor, de arriba abajo – hoy es la entrevista de trabajo en la sala 3 del tercer piso. Ya que eres una recomendada puedes pasar junto a tus documentos y mostrarlos todos allí – le devolvió los papeles y le entrego una identificación – ve – le dijo. Esta vez con un tono más amable y señalando el ascensor.

Dalia asintió y fue por donde le dijo. Pero cuando llego al tercer piso vio un montón de puertas y pasillos lo cual la hiso sentir confundida. Avanzo un poco y señalo con su mano de un lado a otro mientras jugaba un juego de niños para escoger “por halla” se dijo, mientras señalaba hacia la derecha.

Camino con la vista en las puertas, las cuales no tenían números, tenían escrito luces, vestuario, etc. Así que dejo de avanzar y estuvo a punto de dar la vuelta hacia la izquierda, pero fue detenida por el sonido de la última puerta, del cual salió un joven bien vestido junto a una joven. Ambos la observaron y Dalia solo pudo disculparse antes de dar la vuelta para irse. Lo cual no logro gracias a la voz del joven – quien eres? – le pregunto.

Dalia cerro los ojos y dio la vuelta otra vez – estoy buscando la sala 3 para una entrevista de trabajo – le dijo.

El joven la observo de cerca y se quedó mirando sus ojos de forma fija – ya veo – le respondió, con una sonrisa amigable y con los ojos en ella. Parecía que se había olvidado de la joven detrás de él.

• Evan – le dijo la joven antes de tocar su hombro para llamar su atención. A lo cual el joven solo se despidió.

La joven observo a Dalia de arriba abajo, parece que todos hacían eso con ella, y se fue dejándolos solos. Lo cual era incomodo y Dalia no pudo soportarlo – me puede decir donde queda la sala 3?

Evan le volvió a sonreír al darse cuenta de que se le quedo mirando – yo soy el evaluador de dicho trabajo. ¿No me conoces? – le dijo pregunto.

Dalia solo lo observo y negó con la cabeza de forma inconsciente, pero no era tonta. El joven era guapo y su nombre era el que gritaban todas esas chicas en la calle, así que él debe ser el modelo que está buscando una asistente. Qué vergüenza haber interrumpido cuando estaba con su novia y para colmo decirle que no lo conoce. “mejor sigo buscando otra cosa” se dijo Dalia internamente.

Estaba por disculparse e irse, pero Evan hablo – creo que eso es bueno – le dijo – acompáñame – paso por su lado y camino hacia la izquierda, donde ella quería ir.

Dalia observo las puertas y en estas estaba nombre, supuso que, de los modelos, hasta que vio Andru y se recordó de la carta que le dieron. Así que la saco del bolsillo y estaba por meterla por debajo de la puerta cuando esta se abrió y solo pudo ver unos zapatos – que haces? – le dijo el dueño de estos.

Dalia cerro los ojos con fuerza y se levantó para responder, pero Evan se paró delante de ella – es mi nueva asistente – respondió.

Evan era alto, pero el joven en la puerta lo era un poco más – las entrevistas recién van a comenzar – hablo y dirigió su mirada a Dalia. La cual seguía con el sobre en la mano – otra vez tu – le dijo.