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Volteé rápidamente cuando sentí unas uñas largas tocarme el hombro.

Sonreí al ver a mi novia, Alyssa, con un café.

—¿Qué tal nene? —tomé el café y se empinó para darme un beso en la mejilla—. ¿En qué puesto quedaste?

Alyssa era una novia muy atenta, además de linda y amable, siempre se preocupaba por su pareja, su estado de ánimo y si tiene algún inconveniente. Cuando empezamos a salir creía que lo había adoptado de ser como la "madre" de sus hermanos pequeños. Pero me agrada y no tengo ningún problema con ello.

Al final de todo, habíamos crecido juntos. Nos conocíamos.

—Cuarto puesto—comenté dándole un sorbo a mi café frío

—Oh, me alegro—respondió con sinceridad—. Para la próxima procura estar en el primer puesto

Sabía que era algo imposible, y que mi promesa sería vacía con el único fin de hacerla feliz con lo que quiere escuchar. Sin embargo, eso con ella no funciona.

—Lo intentaré

—Lo sé, yo te ayudaré—me sonrió, enamorándome otra vez

—Por cierto ¿Qué tal salió tu examen?

Se cubrió el rostro rápidamente y movió la cabeza de un lado a otro como si estuviera negando algo con mucho fervor.

—Hubo tantas cosas difíciles sobre la iluminación, colores, lugares, creía que me iba a morir, mi amor—me abraza por el torso—. Pero creo que respondí todo adecuadamente

—Toooonta—le dije y ella fingió estar enojada para golpearme en el abdomen.

Alyssa era apenas tres años mayor que yo, pertenecía al departamento de fotografía y cursaba el último ciclo de su carrera. El próximo mes tendría una especialización con los de su clase en otra ciudad y me está pidiendo que la acompañe pero sinceramente, los de su clase son muy estirados con personas de otros departamentos.

Yo pertenezco al de diseño y también tendríamos una especialización, pero en un campo a pocos kilómetros de la universidad.

—Me llamó Adam, me dijo que quería verme para "celebrar" su décimo sexto puesto—Alyssa comenzó a reír en cuando terminé de hablar

—Vamos a verle, quiero reírme en la cara de ese tonto

Recogí mi mochila junto con uno que otro libro que no quería dejar en el aula. Extrañaba las carpetas de la preparatoria donde podías dejar tus cosas en esas mesas con cajones por debajo.

Ahora debo cargar con muchos libros para ir a la universidad y regresar a mi casa.

Llegamos a la entrada del campus, donde visualicé a Adam parado con sus dedos moviéndose rápidamente sobre su celular, seguramente escribiendo un mensaje a alguien.

Alyssa se separó de mí y salió corriendo para darle un golpe en la cabeza a nuestro amigo.

Suspiré.

Joder, sí que la amo mucho.

—¿Cómo que quedar en el puesto diecisiete es motivo para celebrar, eh? —le reclamó, haciéndome recordar una escena parecida que tuvo conmigo

—¡Nil dile a tu novia que deje de pegarme!

Reí y animé a Alyssa a seguir dándole una paliza.

Al poco rato, mi novia se cansó y eso alegró a Adam.

—Bueno, sé que mi puesto en el cuadro de mérito no es el mejor, pero no los llamaba para celebrar, ¿Recuerdan a Zaid? —tanto Alyssa como yo asentimos—. Bueno, regresó hoy a la ciudad, quiere que salgamos

Zaid es un viejo amigo, tenemos la misma edad pero está estudiando en el departamento de producción. Por unas cosas personales tuvo que volver a su ciudad de origen hace poco.

—Oh, esa es buena noticia, pero yo estoy muy ocupada, tengo que comprar una correa nueva para mi cámara y conseguir una lámpara de iluminación amarilla—Alyssa hizo una mueca de tristeza—. Pero podemos salir a comer mañana—propuso

La miré.

—...

—Vamos Nil, no debes poner esa cara de "Si no vas, yo no voy" son tus amigos, no debes pedirme permiso

—Me sentiré aburrido si no vas

Alyssa comenzó a reír.

—Mi amor, ambos sabemos que eso no es cierto, tus amigos son unos idiotas capaces de divertir a cualquiera

La abracé y ella me besó pero está en la comisura de mis labios.

¿Está mal que me guste mucho sentirme como su bebé?

De pronto Adam grita el nombre de Zaid obteniendo toda nuestra atención.

—¡Adam!

Volteó hacia el lugar de donde provino la repuesta y me separo de mi novia al ver a mi viejo amigo caminar hacia nosotros.

Una vez cerca, me abraza y correspondo.

No sé qué tipo de cosas personales tuvo que ir hacer pero quiero que sepa que me tiene ahí para él.

—Hola Zaid—saluda Alyssa y el mencionado le sonríe abrazándola

A veces él es de pocas palabras y más de acciones.

—¿Qué tal tu viaje por la dura carretera? —pregunté

Pero Adam interrumpió volviendo a gritar.

—¡NO PUEDO CREERLO! ¡¿EIDER?!

—Sorpresa—susurró Zaid para Adam pero este ya había desaparecido

Miré a donde había ido el rubio y noté que había otra persona. Fue envuelta en los brazos de Adam y si no fuera porque nos acercamos, él nunca la hubiera soltado.

—Eider mi vida, pensé que nunca te vería de nuevo

—No seas drámatico Adam, tenemos un chat grupal—contestó aquella figura que seguí sin poder verla por el alto cuerpo de mi amigo

—El cual tú nunca contestas

—Hazte a un lado oxígenado para presentarles a estos dos que no lo conocen—habló Zaid, claramente refiriéndose a mí y a mi novia

Adam se apartó de mala gana y sentí todo el vello de mi cuerpo erizarse por completo.

Porque lo vi.