40. El fin

Todo parecía ir a mejor en los distintos reinos lo que provocó que varios de los pueblos dejasen de protestar, pero además Sonic comenzó a poner en la mesa de estrategias crear una mancomunidad en la cual los distintos reinos que estuviesen ahí tendrían su propio gobierno, pero estarían obligados a participar en luchas que pudiesen afectar al Reino del Sol. Poco a poco se iba creando una mejor y mayor comunicación entre los reinos que evitaba más conflictos internos.

Sonic y Blaze estaban muy contentos con los resultados, por lo que en una sala lejana del castillo de Blaze comenzaron a cenar para festejarlo.

–¿Te gustó la comida?– Pregunta Blaze a Sonic

–Pero claro que sí, aunque si lo tuviese que comparar con un delicioso chilli dog..., no tendría punto de comparación.– Respondió el erizo azul.

–Vos y tu comida chatarra, ¿será que alguna vez no pienses en ello?– Dijo Blaze.

–¿Pero de qué hablas? Yo pienso en muchas cosas importantes además de la comida chatarra, como vos por ejemplo.– Dijo Sonic abiertamente para voltear después de ello la cabeza un poco y tomar agua.

–Ah, eso es muy dulce...que te preocupes tanto por tu princesa.– Dice Blaze después de haberse sonrojado bastante.

–Sí, así es.– Responde Sonic para después poner su copa sobre la mesa.

–Pero...¿sí sabes que no podemos confundir las cosas? Yo...em...– Iba a decir algo Blaze cuando notó como Sonic parecía mirar triste a la mesa después de ello y después la miró.

–Lo sé, sé que no quieres que lleguemos más lejos, pero...no puedo negar que eso es lo que más deseo.– Respondió Sonic.

–Pero no podemos.– Dice Blaze.

–¿Por qué no? ¿Qué es lo que nos lo impide?– Pregunta Sonic.

–No quisiera hacerte eso, eres una persona con tanto potencial por delante, un espíritu libre, para que te ate así conmigo.– Dice Blaze.

–Lo sé, ¿pero y si funcionase?– Dice Sonic solo para ser replanteado por Blaze.

–¿Y si no?– Respondió Blaze dejando a Sonic sin palabras por unos segundos.

–Creo que necesito cambiar mi pregunta...¿y si lo hiciésemos funcionar?– Pregunta el erizo azul.

–Ya lo he pensado varias veces y siempre es lo mismo, sería más de lo mismo, tú queriendo abandonarlo todo al ver que perdiste tu vida con alguien aburrida como yo.– Dice Blaze.

–Eso no es cierto. Yo jamás haría eso, jamás.– Dice Sonic acercándose hacia Blaze.

–No lo sé... Yo no quiero hacerte pasar por lo mismo que yo he pasado.– Dice Blaze.

–No lo harás.– Dice Sonic tomando a Blaze de sus mejillas que se sonrojaron aún más que antes. –Yo quiero estar contigo, no tengo duda de ello y si alguna vez la tuve, nunca la volveré a tener, porque...– Traga saliba Sonic para acercarse más a los labios de su amada. –Eres esa flama que llena mi ánima, un alma enamorada, un espíritu flámico que arde con gran intensidad.– Dice para luego besar a Blaze.

En un principio Blaze se quería resitir al beso y quería apartar a Sonic, pero se dejó llevar por el momento. Ella solo dejó que sus labios una vez se uniesen y pudiese sentir como su cuerpo era correspondido finalmente.

Cuando Sonic finalmente separó sus labios de los de Blaze, ella tenía la respiración batante agitada y aún así hablo.

–Te amo y siempre lo he hecho.– Dijo Blaze mientras se reponía del aire.

–Y yo a ti.– Dijo Sonic quien no estaba muy agitado, pero sí un poco nervioso.

Después de un largo recorrido parecía que finalmente Blaze dejó abrir su corazón y que Sonic entrase en él.

Poco a poco el tiempo en aquella dimensión había pasado y se acercaba finalmente el cumpleaños 18 de Blaze después de que Sonic cumplió 19 y ambos querían hacer público su compromiso, por lo que Sonic y Blaze viajaron al universo de Sonic para invitarlos a un evento importante del que no podían faltar sin ninguna excepción en la dimensión de Blaze.

–¡Buen día, amado pueblo!– Diria Blaze desde el balcón con gran euforia. –El día de hoy los he reunido para darles una importante noticia como la tradición indica.– Dice Blaze. –Hoy os he citado a todos vosotros porque Sonic the Hedgehog, uno de los héroes más importantes del imperio durante estos años y quien ha estadl apoyando en las decisiones sociales del imperio por mucho tiempo y yo su princesa imperial y futura emperatriz, estamos felices de anunciar que nos encontramos en compromiso.– Termina Blaze de dar el discurso al pueblo para después oír al pueblo ovacionar por la noticia.

–¡Se hará un banquete de chilli dogs para celebrar el compromiso, no se lo pierdan!– Dijo Sonic al pueblo.

–No puedo creer que me hayas convencido de esto...– Expresó Blaze.

–Ya verás que te encantará, princesa. Solo dale una oportunidad.– Dice Sonic para después tomar de las manos a Blaze. –Solo necesitas darle una oportunidad a las cosas para ver si te gustará el resultado o no.– Le sonrió.

–Sí, tienes mucha razón.– Dice Blaze para ser guiada por Sonic adentro del castillo donde cuando el pueblo no los podía ver, donde finalmente cierran esta historia, no con un último beso, sino con uno de muchos más que vendrán después de que esta historia pueda ser contada.