Flipped Crosses

Primera parte.

Quedé en una pequeña ciudad al norte de Texas, busqué refugio en seguida de robar 200 dijes de oro que habían sido robados, los hombres primordiales se dieron cuenta y actualmente me búscan, no huí muy lejos.

-"Después de que me alejé de ti y de todos, pronto decidí planear mi venganza, una venganza a mi modo".--Susurré al despertar.--Leí esa frase hace años en la revista favorita de mi abuelo, y sigó hablando solo-.

De pronto escuche chillar la puerta de mi pequeña habitación al abrirse. Constance De Nebra, una mujer que ha estado conmigo los últimos ocho meses, no como consorte, sino como amiga. Agradezco el conocer el concepto de amistad con aquella bella mujer.

-¡Zacharias, tenemos que irnos-me informó!-. Te están buscando ahora.

Inmediatamente saqué mi maleta metí ropa al azar y coloqué aquella revista, lo único familiar que me tenía. 

-No olvides de avisarme cuando te hospedes-dijo Constance.-Ya vete.

-No confíes en nadie hasta que vuelva- le supliqué.

Me dirigí a una pequeña plaza en donde se encontraba Constance, ella había salido antes. No permitiría que nos vieran salir juntos de la habitación, por nada. Ella siempre estaría conmigo, si es que la necesito, no sabe cuánto lo valoro.

-Cuando regreses, te esperaré aquí mismo-me ordenó.-para volver a buscar una habitación nueva.

 Iba a viajar a Oklahoma a tratar de hacer un trato. Teniendo como plan rentar algún cuarto y esperar a que aquellos hombres lleguen, para devolver lo que había tomado. Realmente me interesaba estar en bien, no quería problemas, en lo absoluto. Así que así fue, subí a un pequeño autobús, no fue mucho el recorrido que solo duró menos de dos horas. Busqué mi habitación y me hospedé.

Avisé a Constance con una llamada que ya había llegado.

Sólo quedaba esperar y realizar lo que ya tenía planeado, me senté en el sofá y pronto pasaron horas, quedé contemplando como anochecía, así que me levanté y fui a recostarme y dormir. Pronto amaneció y agradecí. Llamé de nuevo a Constance para mencionarle que estaba bien.

No contestó.

Pensé que tal vez estaría dormida aún y caminé a ducharme. Después tome un té, en eso devolvieron la llamada.

-Te estoy escuchando-dije.

-Ya no hay necesidad de hacer tratos.-dijó un voz gruesa.

Me sentí frío, de pronto creí que mis planes se habían arruinado, ¿A qué te refieres?-le contesté

Si tanto te interesa averiguarlo, regresa a Texas, te espero en tu habitación- colgó.

Inmediatamente recogí mis maletas sin parar de decir que había tenido un plan estupido.

Tarde un poco en conseguir un autobús de regreso, pero lo obtuve, En cuanto llegué, abrí rápidamente la puerta. Ahí estaba Constance, y me tranquilizé. Tenía la mirada perdida y pregunté.-¿estas bien?-mientras cerraba la puerta.

Volteé a verla y presencié su muerte, la degollaron a mis ojos. Se me fué la respiración y caí de rodillas, sentí un gigante nudo en la garganta y no pude decir nada. Veía como se reían de mí, como se reían de ella. En ese momento me llene de rabia. Me levanté para ir hacia ella, pero un tipo de tomó por sorpresa y me golpeó, caí nuevamente, pero esta vez me desmayé.

Al despertar estaba en mi cuarto sin saber como llegué, no había nadie, ni siquiera un rastro de que hubiera habido un asesinato.

Lloré el resto del día. Jamás volví a ver a mi querida Constance.

Pasó mas de una semana en la que viví sin salir de mi habitación, a duras penas comía. Volví a ver la revista de mi abuelo, como cada vez que me sentía vacío. Decidí tomar una ducha, preparé un gigante plato de comida, comí y fuí a dormir.

-Ya no serán ellos los que me búsquen, ahora los buscaré yo a ellos, ya no para un trato si no para dar con mi venganza-dijé al despertar.

No agradecí por haber despertado, no volví agradecer nada, Dios no existía para mí, solo existía yo.

Mi rencor crecía mientras me alejaba de Dios.

-"Después de que me alejé de ti y de todos, pronto decidí planear mi venganza, una venganza a mi modo".--dijé mientras pensaba como aquella frase cobraba sentido.

 

 

Un me gusta para saber si apoyas a la obra. Los quiero.



#9330 en Joven Adulto
#3327 en Detective
#1774 en Novela negra

En el texto hay: venganza, suspeso

Editado: 26.01.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.