Capítulo -II: Traición

3 Días después.

Ubicado en Nave de Infinity Wing, Sala de las esferas.

Krónoda veía su esfera con la añoranza que hiciera algo más que estar, por lo que le lanzó una descarga umbrakinética para ver si le podía crear una hendidura y al igual que Yuliet entrar a la esfera pero no, su hechizo no le hizo perjuicio alguno, creó una espada umbrakinética para ver si con ello podía no, creó 2 dagas nada podía hacerle daño a la esfera, pero recordó que solo algo le pudo hacer daño, las Instorken por lo que le iba a pedir a Liuyen que le hiciera un agravio a la esfera.

Ubicado en Nave de Infinty Wing, Sala de Kalrash.

—Es frustrante buscar y buscar y solo encontrar un consuelo de información—Dijo Alzomoni.

—Tranquilo, al menos sabemos la historia de Ciradel—Dijo Alkara.

—Pero solo a los humanos se les ocurre nombrar su ciudad con el nombre del ángel del recuerdo—Dijo Kalrash.

—Te recuerdo amor que nosotros alguna vez fuimos humanos—Dijo Alkara.

—Y por eso ya no somos—Dijo Alzomoni.

—Muy bien pero tenemos que ir a esa ciudad a ¿qué? No sé ¿para qué? Tampoco lo sé pero debemos si queremos terminar con este enredo de las esferas.

Ubicado en Nave De Infinity Wing, Sala de Yulei.

—¿Ya lo pensaste?—Preguntó Yuliet.

—Pensar ¿qué?—Dijo Yulei.

—Lo que nos dijo Inisrra—Dijo Yuliet.

—Yo si lo he pensado—Dijo Liuyen, abriendo la puerta con algo de fuerza.

—Eso es...—Dijo Yulei.

—Decirle a los demás, no aguantar más esa información sola—Dijo Liuyen.

—Pero no te estás sola—Dijo Yulei—. Estamos juntas.

—Es que le estamos ocultando información a Kalrash, Alzomoni, Alkara y en especial a Krónoda—Dijo Liuyen—. ¿Desde cuándo Infinity Wing hace eso?

—Es que lo hacemos para que Krónoda...—Dijo Yulei.

—Pero si Krónoda es el líder, debe de saber—Dijo Liuyen.

—Jamás, como dice el “Aveces debes de adelantar el futuro, antes de que el te adelante” y en este caso el es futuro—Dijo Yulei.

—No necesito tu aprobación para decirle—Dijo Liuyen, dando medía vuelta con dirección a la salida de la sala—. Solo vine a informarte lo que haré

—Te dije que no—Dijo Yulei, agarrando la mano de Liuyen.

—No me toques—Dijo Liuyen, sintiendo la fuerza de su amiga en la mano.

—Es que no—Dijo Yulei—. Antes debemos...

—Qué no me toques—Dijo Liuyen, dándole un puñetazo con su otra mano a Yulei en el rostro para que la soltara.

Yulei desconcertada por esa acción, se agarró la boca, vio su mano y vio un poco de sangre así que creó una barrera aerokinética a la salida de su sala. Liuyen molesta por eso empezó a imbuir sus puños con energía geokinética.

—Tranquilas, no deben que hacer esto—Dijo Yuliet, viendo como ambas estaban dispuestas a luchar.

—Krónoda sabe más que tú—Dijo Liuyen, mirando fijamente a Yulei—. El sabrá que hacer.

—Lo sé pero ¿qué hará? Castigarnos por saltarnos su autoridad ¿acaso no recuerdas lo que le hizo a Yaktiritimoto y Jely? Yo no quiero eso para ninguna de nosotras—Dijo Yulei.

—Krónoda no es tán tirano como crees—Dijo Liuyen.

—Tengo una mejor idea—Dijo Yuliet—. Si tantas ganas de decirle a alguien tienes, hay que decirles a los demás líderes. Si preguntan que como conseguimos la información, les diremos que la investigamos y que fueron los resultados.

Horas más tarde.

Ubicado en Nave de Infinity Wing, Sala de Alkara.

—Compañeros—Dijo Yulei, abriendo la puerta con algo de revuelo junto a Yuliet y Liuyen—. Necesitamos su ayuda.

—Pero ¿qué hacen?—Dijo Yuliet, viendo a Alkara, Alzomoni y Kalrash un poco apresurados.

—Preparándonos para ir a Ciradel, al igual que ustedes, necesitamos respuestas—Dijo Kalrash.

—Antes de que hagan eso, tengo algo que decirles—Dijo Yuliet.

—Las 3 tenemos cosas que decir—Dijo Liuyen

Alkara, Alzomoni y Kalrash se detuvieron y las miraron.

—¿Qué cosa es?—Dijo Alzomoni.

—Tuvimos...—Dijo Yuliet un poco agitada—. Contacto con...

—Tranquila, yo les digo—Dijo Yulei, mirando como se alteraba su hermana—. Investigamos por nuestra parte lo que eran las esferas.

—Muy bien ¿cuáles fueron sus resultados?—Dijo Alkara.

—No los mejores—Dijo Yulei.

—Por que eso nos condujo a preguntarle a Los Caídos—Dijo Liuyen.

—¿Cómo que a ellos?—Dijo Alzomoni desconcertado—. ¿Acaso Krónoda les permitió hacer eso?

—No—Dijo Yuliet.

—¿Se saltaron la autoridad de Krónoda? ¿Están locos o qué?—Dijo Kalrash—. Fuiste tú—mirando a Yulei—. Tú les diste la idea, si te hacen algo, bajo tu responsabilidad.