Ruinas de lo que fuimos

En el silencio de una habitación vacía,
donde aún resuena tu risa perdida,
se desploma mi alma, fría,
cargando el peso de tu partida.

Fuiste mi sol, mi luna y mi estrella,
la razón por la que mi corazón latía,
pero ahora el cielo se torna gris, sin huella,
y la luz de mi vida se desvanece, sombría.

¿Dónde quedaron nuestras promesas al viento?
Las palabras que juramos eternas,
se ahogaron en un mar de tormento,
dejando cicatrices internas.

Cada rincón me grita tu nombre,
cada sombra guarda tu silueta,
y aunque intento borrar tu recuerdo,
el dolor me acecha y no se aquieta.

Dime, ¿fui yo el culpable de este abismo?
¿O fue el destino, cruel e implacable?
Lo que construimos con amor y heroísmo,
se convirtió en un sueño inalcanzable.

Hoy camino entre las ruinas de lo que fuimos,
con lágrimas que caen, como ríos sin fin,
recordando el amor que un día tuvimos,
y que se desvaneció con un cruel "fin".