Fortaleza Buscando la Felicidad

El Pueblo donde nacen los sueños: El regreso del Sol después de las nubes grises y la revelación

(PÁGINA DOS) Fortalezca Buscando la Felicidad por YSIDRO COLINA YACC INFINITODOS
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Capítulo 2

El Pueblo donde nacen los Sueños: El regreso del Sol después de las nubes grises y la Revelación

El pueblo siempre había parecido un lugar tranquilo, como un rincón detenido en el tiempo, donde las calles de tierra guardaban los secretos de quienes se atrevieron a soñar. Para Ordisi YACC INFINITODOS, ese pueblo no era solo un lugar: era la cuna de sus recuerdos, de sus dolores y de sus esperanzas. Allí nacieron los primeros susurros de amor, pero también las heridas más profundas que lo arrastraron a la oscuridad.

El sol volvía a brillar después de aquellas nubes grises que lo habían acompañado durante años. El regreso al pueblo era, para él, una revelación: volver a mirar de frente la historia que lo marcó.

La sombra del pasado y el brillo de Amor

Amor había sido la chispa que encendió su corazón. No era una simple muchacha, sino la representación de todo lo que Ordisi anhelaba: ternura, luz y destino. Pero no estaba solo en ese sentimiento. Cairel, su amigo de la infancia, se había obsesionado con ella de una manera enfermiza. Esa obsesión generó silencios tensos, miradas cargadas y un fuego oculto que a veces parecía explotar en cualquier esquina del pueblo.

Ordisi también amó a Amor. Lo aceptaba sin reservas, aunque sabía que ese amor lo pondría en peligro, no solo por la sombra de Cairel, sino por los fantasmas de los amores pasados que aún lo perseguían. Esas antiguas historias de ilusiones rotas y engaños lo llevaron en más de una ocasión a hundirse en una depresión que parecía interminable. Sin embargo, en medio de tanta oscuridad, tres fuerzas lo rescataron: Dios, el Arte y su Familia.

Entre vicios y fiestas

Antes de encontrar su camino, la vida de Ordisi había sido desordenada. El pueblo lo conoció en su faceta más salvaje: noches interminables de fiesta, risas ahogadas en humo y licor, y compañías que lo arrastraban cada vez más hacia los vicios. Pero en su interior sabía que aquel no era su verdadero destino. Había una voz que lo llamaba, un eco que le recordaba que él había nacido para algo más.

Cuando finalmente comenzó a cambiar, la transformación fue notoria. El arte lo salvó, el teatro le dio un lugar donde gritar sus verdades, y la música se convirtió en un refugio donde sus heridas podían encontrar sanación. Poco a poco, el joven desordenado dio paso a un Ordisi renovado, más fuerte, pero también más consciente de los peligros que aún lo rodeaban.

El Pueblo de los sueños y las sombras

El pueblo tenía su magia, pero también su misterio. Detrás de las fachadas sencillas, se escondían secretos que solo algunos se atrevían a nombrar. Entre sus amigos inseparables, había uno que todos temían: Santiago. La gente decía que tenía tendencias satánicas, que hacía rituales oscuros, y que una sombra lo acompañaba a todas partes. Muchos lo evitaban, pero Ordisi nunca lo abandonó. Él sabía que, más allá de las apariencias, Santiago tenía un corazón que buscaba comprensión.

En aquellos días también estaba Lui, el chico que todas las chicas deseaban y admiraban. Su sonrisa desarmaba y su valentía lo convertía en una especie de héroe en el pueblo. Lui era protector, era amigo, era hermano del alma para Ordisi. Con Santiago, Cairel y Lui, formaban un grupo inseparable. Su adolescencia estuvo marcada por esas aventuras, por los secretos compartidos, por las risas bajo las estrellas y por los pactos de hermandad que parecían eternos.

Pero el destino no perdona. Cuando Ordisi viajó a la ciudad para estudiar teatro, una tragedia lo sorprendió: Lui falleció. La noticia llegó como un puñal que atravesó su corazón. No pudo regresar para el funeral, y la culpa lo acompañó desde entonces. Aquella ausencia se convirtió en una herida abierta, un dolor que lo persiguió cada vez que volvía a caminar por las calles del pueblo.

Suspenso, revelaciones y nuevos caminos

La vida en el pueblo estaba marcada por esa mezcla de belleza y peligro. Ordisi sabía que no podía escapar de los fantasmas de su pasado: Cairel y su obsesión por Amor, la oscuridad de Santiago, la pérdida de Lui, los recuerdos de amores que lo habían dejado en ruinas… Todo se mezclaba en su regreso.

Pero en medio de tanto dolor y suspenso, había también una certeza: él había cambiado. El regreso al pueblo no era para hundirse otra vez en las sombras, sino para enfrentarlas y salir más fuerte. El sol volvía a brillar después de las nubes grises, y con ese brillo llegaban revelaciones que aún no se atrevía a decir en voz alta.

Porque el pueblo donde nacen los sueños también era el pueblo donde nacen las batallas más intensas del alma. Y Ordisi estaba listo para enfrentarlas todas.

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✍️ Escrito por:
Ysidro Colina – YACC INFINITODOS
Fortaleza Buscando la Felicidad

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