V

La mañana iluminaba la ciudad y el olor a café recién hecho emanaba por toda la habitación de Anderson, la puerta principal había sido abierto por coraline quien entró junto con expedientes de cada víctima para que el detective inspeccionara cada uno y poder conseguir una línea que los lleve al asesino.

—Veo que hoy son muy buenos días — Alardeo Einar al tomar las carpetas y darles una hojeada rápida antes de hacerlo con delicadeza — veo que son todos tienen cola para que les pisen.

—No fue fácil conseguirlos ya que todas esas carpetas estaban bajo seguro al ser pagados para que no salieran a la luz.

—Vaya, vaya. Al parecer tenemos un caso de corrupción en la jefatura, no me sorprende ya que son todos así en el mundo, pero me intriga como es que los conseguiste.

—Alguien me debía un favor, así que tomé ese comodín para sacarlos de su escondite, obviamente por un tiempo limitado.

—Te felicito por completo al obtenerlos por un tiempo temporal, te prometo que te daré una buena recompensa cuando se termine esto.

—Gracias y yo  le recomiendo que les saque copias a cada uno antes de que sean devueltos.

—Eso es lo que estoy haciendo ahora —respondió encendiendo la fotocopiadora— mientras puedes tomar asiento, bebe un poco de ese café mexicano que traje de mis cortas vacaciones, es delicioso.

Coraline aceptó su indicación sentandose en el sofá y agarrar una taza de aquel café que le había recomendado hace unos segundos donde le encantó demasiado al darle un sorbo.

—Por cierto coraline ¿no te han entregado el expediente sobre la mujer de ayer?

—Aún no, el médico forense aún está redactando los resultados de la necropsia para anexarlo, más tardar en la tarde se lo entregaré.

—Perfecto, solo necesitamos leer todo estos junto con las muertes  que fueron sometidos para poder saber más del asesino.

—¿Con eso podría llegar a una teoría?

—Más bien una hipótesis, paris. Ya que de ahí nos podemos enfocar y saber el significado de cada mensaje que les dejó a cada uno al igual que poder saber por qué lo hace.

—Entonces hay que ponernos en marcha antes de que se nos acabe el tiempo.

—No hay tiempo que pensar cuando ya tenemos copias de lo confidencial, ve a entregárselo a esa generosa persona para así enfocarnos, yo mientras voy a leerlo para sacar un resumen de todo esto.

Le entregó los archivos originales  a la chica en sus manos dándole un leve empujón para que empezara a caminar y no perdiera tiempo del que tenía limitado sobre aquellos cargos de las víctimas. 
salió de la habitación rumbo a la jefatura donde se encontraba aquella persona que le facilitó los documentos para entregarselos mientras que Anderson adelantaba la lectura con las copias que habías sacado de aquellos papeles que dictaban los delitos que hicieron cada uno de las víctimas.

En Ballycroy Alessia terminaba de despejar el granero donde viviría y terminar igual  de acondicionarla con las pocas cosas que podía reciclar, tomó asiento en su colchón inflabe que había puesto en el segundo nivel donde podía ver desde una pequeña ventana la calle y los pocos automóviles que pasaban. Sacó un dardo de su maleta lanzandolo en en dirección hacia la derecha donde se clavó en una de tantas fotografías recortadas de periódicos que estaban pegadas en la pared, algunas de ellas estaban marcadas con una tacha roja indicando que ya los había ejecutado.

—César Lottuier —pronunció al ver donde había atinado el dardo.

Empezó a buscar en su portátil noticias recientes sobre aquel hombre y donde estaría para crear su plan de ir tras él. La chica era una experta en el hackeo  haciendo que todo sea más fácil incluso para tener Internet para navegar y seguir los pasos de todas sus víctimas a travez de las noticias que publican o incluso de sus redes sociales, para ella cometer todo esos crímenes eran por una razón muy delicada que nadie sabe, solo era secreto para sí misma. 
Minutos pasaron y consiguió información sobre cesar donde decía que haría una fiesta  en un salón privado de toronto para festejar su logro de comprar acciones millonarias en vancouver, filtrarse ahí sería difícil para Alessia, dejó a un lado su ordenador portátil y comenzó a trabajar con su estrategia para adentrarse ahí sin ningún problema al igual que alejar a su víctima de toda esas personas.

En el departamento de Einar, él y Coraline quien había regresado, habian terminando de leer cada copia de los expedientes criminales de las víctimas donde Anderson juntó cada uno con sus respectivos dueños en un pizarrón para tener algo claro.

—¿Notas algo en todo esto? —preguntó Einar a coraline.

—La verdad no ¿hay una diferencia?

—Es obvio que hay una diferencia, la Mayoría tienen un delito que cometieron y todos son desde difamación hasta adulterio, entonces si ordenamos los primeros como lo es como ejemplo del actor Lorrent que fue denunciado de adulterio por su esposa, y su mensaje de frasco mencionaba la lujuria, entonces el asesino sabía de esto, tomándolo una excusa para matarlo.

—Entonces el ángel de la muerte se fija de los delitos fuertes de sus víctimas para ejecutarlos.

—Exactamente y los pone como castigos de sus pecados relacionados a sus delitos.

—Pero... ¿cual es su motivo para hacer todo eso? ¿Que gana con matarlos? Porque no creo que la haga de justiciero acabando con todo ellos ya que el mundo está corrompido por esos pecados.

—Debe de haber un motivo para que lo haga y eso es un punto extremadamente clave para esta investigación.

—¿si en realidad no solo es una persona y es una secta ?

—Lo dudo —respondió recordando a la chica que se encontró anoche — si fuese una secta, el número de asesinatos elevaría a una velocidad, pero viendo las fechas y los resultados de tiempo responden por si solas que se trata de una sola persona que asesina.

—Pará ser uno que haga todo esto me sorprende su dedicación en que lo hace.