Rechazo perpetuo

En mi sueño, nos encontrabamos en el salón. Te sentaste a mi lado y apoyaste tu cabeza en mi hombro, pusiste tu mano izquierda sobre la mia y con una carcajada empezaste a acomodar tus brazos alrededor de mi cuello.

Tenías la mirada fija sobre mí. Observe tus ojos con aquellas pupilas dilatadas, que centelleaban como las estrellas.

Las mejillas rosadas y tus labios delgados mostraron una sonrisa que me permitía observar la felicidad que manifestabas en aquel instante. Sentía la calidez y suavidad de tu piel, aquella sensación nueva que no podria describir. Además de, unos latidos fuertes y acelerados en el pecho, que me hicieron quedar petrificado ante ti.

Luego te acercaste más y más, diciendome con una voz susurrante "cada segundo cerca de ti, me hacen sentir más enamorada, te amo...."

Estabas apunto de besarme cuando sonó la alarma y volví al mundo real.

Desperte confundido, quise volver a ese lugar y vivir en aquel sueño por siempre. Mi pecho tenía encerrado a un órgano que no dejaba de dar fuertes palpitaciones con solo recordar lo que vivimos juntos en mi imaginación.

Sin embargo, me aferre a la realidad, aliste mis cosas rapidamente para encontrarnos en clases.

Cuando llegue, te vi sentada lejos de mí. Tan bonita como siempre, tan delicada y hermosa como una princesa.

Las clases terminaron, miro que te vas, pero yo te sigo, te persigo y alcanzo. Camine hacia ti sin plan alguno. De pronto me dirigiste la mirada pero... con repugnancia.

Que quieres???- me contestó sin titubear

En aquel momento, decidí ir con la verdad y decirle cuales eran mis sentimientos, no importaba como me tratara o si repondía de alguna manera cruel.

Sin embargo, depués de una larga y profunda confesión, ella solo rio y no contesto.

Volteo y siguio su camino, encontrandose y dirigiendose a los brazos de otro hombre a solo 10 pasos de distancia.

Volvi a casa, para llorar amarga y profundamente. Me quedo dormido y dejo que todo siga su curso, no quiero levantarme de la cama pero las responsabilidades exigen hacerlo.

Los días pasan, todo sigue su curso. Ella no me habla y pasa de mí como si fuera un extraño.

Conozco a más chicas, se vuelve a repetir el ciclo.

Pasaron los años y no vuelvo a sentirme como en mis sueños. Intento entender que me sucede, las responsabilidades terminaron, trato de imaginar una vida contigo, pero al saber que nunca sucedera solo pienso en nunca levantarme.

Quisiera volver a soñarte, en revivir ese momento, en sentir aquellas mariposas, aquellos latidos, eso que me hizo sentir tan especial.

Quisiera sentir tus labios, tus besos, tus caricias. Anhelo vivir esos momentos tan especiales contigo, pero es seguro que ni siquiera te acuerdes de quien soy.

Por favor, solo pido que alguien me ame.... solo pido... sentirme amado.