Capítulo XXXV: Ilusión De Madre

Esto tenía que ser un sueño, no había forma de que fuera real. Primeramente, no podía ver el rostro de aquella mujer. Además, un parque flotante que está escondido para que los propios habitantes no causen un desequilibrio, es algo que solo sucede en la ciencia ficción. Siguiendo la realidad, es imposible que yo pueda tener una habilidad tan grande, cuando traté de usarla, terminé agotado y  cayendo al suelo, eso no es nada comparado a los otros niños con habilidades que mencionaba el cuadernillo que me dio Lukk.

Era prácticamente imposible, pero era más imposible que yo no lo supiera. Si yo no sabía nada de esto hace unas horas, ¿cómo alguien que no conozco podría saberlo? ¿Acaso podría confiar en las palabras de alguien así...?

Esto comenzaba a dar mala espina, no pude terminar de pensar, ella interrumpió mis pensamientos y dirigió la conversación.

—Supongo que te estás preguntando quien soy realmente, ¿no? ¿Cómo conozco todo eso si no tienes ningún recuerdo de mí? ¿Es posible saber algo de alguien sin siquiera haberlo visto? La respuesta es fácil, conozco a alguien que piensa igual que tú. Incluso las expresiones que haces y como caminas, lo haces del mismo modo que él. 

—¿Y quién es él? —pregunté interesado en sus palabras—. ¿Lo conozco? 

—Podría decirse que sí, aunque… También podría decirse que no realmente. 

—Te agradecería si dejaras de jugar con mi mente. Solo quiero saber la verdad, ¿podrías decirme quien realmente eres tú? 

 —¿No tienes alguna otra pregunta? 

—Creo que no, mi última pregunta además de quien eres, sería acerca del año que ha pasado, pero supongo que no sabes nada al respecto o ¿sí?

—Eso es algo que no puedo responder, lo siento. Pensaba que tu memoria seguía intacta, pero veo que me equivoqué, si quieres puedes olvidar todo lo que hemos hablado aquí, no habrá algún problema si lo haces.

—¿Por qué te disculpas? ¿Acaso tú sabes algo de lo que me pasó...? Siempre me hablan de esa manera cuando menciono mis recuerdos, ¿eran tan importantes? 

—Si no hubiese consecuencias graves podría contarte de inicio a fin. Sin embargo, no puedo. Tú me explicaste específicamente que no lo hiciera, así que sería una falta a nuestra promesa, y yo no te he criado para terminar las cosas de mala manera. Tómalo como una forma de saberlo después. ¿Está bien?   

—¿Está bien...? ¡¿Cómo podría estar bien?! ¡¿Acaso ver este tipo de cosas es de una persona saludable?! ¡Estoy prácticamente alucinando que hablo contigo, no sé si realmente existes o solo estás en mi cabeza! —respiré hondo y miré a mi alrededor—. Quizás solo seas una creación de mis pensamientos y me estoy volviendo loco alucinando cada cosa de aquí, ni siquiera sé por qué lo hago realmente. ¿Por qué te metiste en mi mente? ¿Qué haces aquí? ¿Quién eres...?

Ella no dejó que terminara de hablar, se levantó de su asiento y sin preguntar, corrió desesperadamente hacia donde estaba yo y me dio un abrazo.

—Has sufrido demasiado, lamento que tengas que hacer esto, Anth. No fui yo la que decidió que seas tú el que cargara con todo, solo sucedió. Aun así, ten un poco más de confianza en ti. Todo llegará a su tiempo, ¿no es esa la razón por la que yo estoy aquí? —dijo enredándome entre sus brazos, como una madre que ve a un hijo herido. 

—Hablas demasiado con alguien al que apenas conoces. Incluso ahora me abrazas y mencionas todas estas cosas, dices que todo llegará a su tiempo y que yo decidí que fuera así. ¿Por qué decidiría algo que desconozco...? ¿No es eso algo anticientífico? ¡Yo no soy así! ¡Dejar cabos sueltos no es mi estilo!

—Aunque no lo creas, esto lo planeaste tú. Incluso nuestra conversación de ahora es a causa tuya. No me gusta que estés deprimido, tampoco me gusta que te lastimes, si fuera por mí acabaría con todo y te llevaría conmigo, pero eso solo acabaría destrozándote el corazón, y no quiero eso, Anth.  

—Creo que debiste comenzar con eso. Realmente nos conocemos, ¿no es así...? Si no fuera de esa manera, ¿cómo es que sabrías mi nombre? —pregunté dudando de ella.

—Supongamos que sí te conozco, ¿qué ganarías con saber eso...? Por más que te dijera que sí o si te dijese que no, no cambiaría lo que tienes que hacer. No soy tan relevante para nuestro objetivo, tampoco es que pueda manipular algo como lo puedes hacer tú, pero no te preocupes, puedes lograrlo. Todos te apoyan y también tienes todo mi apoyo. 

—¡¿Qué no eres importante para ese objetivo?! No sé cuál sea ese objetivo, pero cuando estoy cerca de ti, siento que recupero algo que perdí. Como si fuera la primera y la última vez que te veo. ¿Sabes...? Odio no recordar nada, sinceramente no sé que esperan de mí... Yo no soy alguien especial como para hacer algo por mi cuenta, no tengo la habilidad suficiente para arreglarlo todo, solo soy un niño. ¿Por qué dejan todas sus esperanzas en mis manos?

Al terminar de decir eso, pude darme cuenta de que esa mujer realmente se me hacía familiar. 

Sé que la conozco, su aura es el aura de alguien a quien he estado buscando hace mucho tiempo. Pero mi ser actúa como si no la conociera, como si mis recuerdos bloquearan esa parte y no pudiera recordarla, como si hubiese un candado dentro de mí que reprimiera algunas partes de mi cerebro. 

Entonces, la tristeza y la alegría se mezclan con mi alma, siento un dolor en el pecho. Ese sentimiento es difícil de describir, pero sé que es algo similar a la perdida de algo. Sí, perder algo. ¿Esto es acaso nostalgia? ¿Nostalgia es este sentimiento que siento al ver a aquella mujer abrazarme y decir todo eso? Quizás se deba a que he tenido varias emociones el día de hoy o tal vez se deba a la angustia de querer saber acerca de ese año que ha pasado y no recuerdo, quizás sea porque realmente conozco a esta mujer o quizás no.