Después de unos momentos, Lukk volvió al cuarto donde yo estaba descansando e inmediatamente volvió a actuar como un niño inmaduro. Molestado por su presencia, decidí seguir pegando los parpados e ignorar cualquier tipo de contacto con él. No obstante, como cualquier niño de su edad, siguió molestando e insistiendo para que me levantara, así que terminé por despertarme y hacer caso a su petición.
—Chist… Podrías dejar de molestar, ¿por favor? —mencioné aun cerrando los ojos.
—¡¿En serio estás dormido...?! Es increíble que me vaya por unos minutos y sigas cerrando los ojos, pensé que ya habías descansado lo suficiente como para seguir así más tiempo, definitivamente eres un anciano.
—No soy un viejo, técnicamente tengo doce años. Aunque me vea de diecinueve por obvias razones que tanto Isaac como tú saben, solo soy un niño en pleno desarrollo, descansar el cuerpo es fundamental.
No podía decirle nada acerca de lo cansado que estaba por el uso de esas supuestas habilidades que Isaac me había hecho usar, así que por más que intentaba dar mis razones, él seguiría tratando de ganar la discusión, solo me quedaba rendirme ante su palabrería.
—A la vista de los demás y a la mía eres un adulto. Además, eso es lo que diría un anciano. ¿Tantas ganas tienes de seguir durmiendo? —preguntó moviendo sus cejas de manera uniforme—. Ya va a ser la hora de cenar y aún sigues con esas pintas. ¡Levántate de una vez!
—No quiero problemas, Lukk. He visto muchas cosas el día de hoy, es natural que quiera descansar un rato, ¿no crees? Muy aparte de eso, solo faltan unas seis horas para que sea el día de mañana, debo descansar lo suficiente para lo que vayamos a hacer… ¿O acaso lo has olvidado?
—No, no lo he olvidado. Tampoco puedo decir que haya visto lo mismo que tú, pero sería interesante si me contaras un poco. Quizás así pudiera entenderte, claro... Solo si no te molesta —mencionó mientras tomaba asiento a un lado de la camilla.
—¿Prometes no burlarte de mí? —pregunté con voz titubeante.
—Lo prometo, aunque no creo que sea algo vergonzoso, o ¿sí...?
—Es algo que tiene que ver con mi infancia, algo que sucedió hace mucho tiempo y sí, puede ser un poco vergonzoso.
—¿Quizás se trata acerca de un amorío de niño? —preguntó Lukk con una sonrisa pícara.
—Si vas a burlarte no te contaré nada. Además, no es nada relacionado con el amor, es algo acerca de mi familia, específicamente a mis padres.
—Ah, ¡pudiste haber comenzado con eso! —exclamó decepcionado y agregó—. Bueno, ¿qué sucede con tus padres?
—No sé como explicarlo de una forma sencilla —mencioné agarrándome la cabeza—, pero de lo que sí estoy completamente seguro, es que soñé con mi madre. Ella estaba un parque gigante de color blanco, tan resplandeciente como la nieve, tenía un pequeño lago en el centro con un árbol enorme y también una gran casa. Dentro de este parque, había un montón de niños y ella me contaba bastantes cosas sobre ese lugar, incluso me abrazó y lloró conmigo, me dijo que confiara en mí y que me esforzara.
—¿Y qué hay con eso? No le veo nada de raro a soñar con tu madre cuidándote, creo que la mayoría de niños sueñan con algo similar, incluso, si yo tuviera recuerdos de una, sé que también soñaría con ella.
—Entiendo eso... pero ese no es el punto que quería tocar —dije tratando de cambiar de tema.
—¿Entonces...? Si no es acerca de tu madre, ¿qué es lo extraño de ese sueño?
—Mi madre está muerta.
El silencio volvió a gobernar la habitación, Lukk se quedó pensativo ante mi respuesta, como cuidando las próximas palabras que iba a decir. No obstante, yo quería seguir hablando, así que le dije que no le tomara importancia.
—No te preocupes, no me molesta si haces preguntas sobre ello —dije tratando de no incomodarlo.
—Oh… ¿Y desde hace cuanto tiempo que ella...? Ya sabes, eso… —preguntó luciendo interesado en mi historia familiar.
—Cinco años, quizás… Aunque no estoy seguro de eso —mencioné viendo de un lado para otro—, mis recuerdos con ella son borrosos, pero sé que podría reconocer ese calor a donde quiera que fuera. Podrías llamarlo intuición, tal vez.
—Entiendo, y bien... ¿Qué cosas te dijo ella en tu sueño?
—Según entendí, algo sobre unos códigos raros, un espécimen de prueba, habilidades especiales y algo relacionado con una misión o un objetivo.
—¿Tiene que ver con algo que leímos en el informe? —mencionó mostrando cierto interés en mis palabras.
Ciertamente tenía que ver, aquella “Habilidad Divergente” tenía relación con el “COD-000”, “COD-001” Y “COD-002”. Podría decir que tanto el informe con lo que me contaba mi madre, era reflejado al tan mencionado “Espécimen de prueba”, e incluso podría afirmar que el cuadernillo que encontró Lukk, pertenecía a uno de los que poseían estos tipos de habilidades, seguro había sido trasladado de otra instalación en conjunto con la hermana a la que se mencionaba en varias ocasiones.
Era simple lógica.
Lo interesante en esto es, que si mi madre sabe acerca de este proyecto, es posible que aun siga viva. Claro, obviando su supuesta muerte hace cinco años. Según mi descabellado sueño, ella estaría en “Zero”. Lo que vendría a ser un supuesto plano descrito en el informe de la “Habilidad Divergente”.