015

—¿Y-yoojung? —susurró el menor. Lágrimas comenzando a caer por sus mejillas.

—J-Jimin... —llamó el mayor, abrazándolo por los hombros, haciendo que girase para empezar a caminar en dirección contraria.— hay que salir de aquí...

—¡No! —gritó, empujando al peligris con algo de fuerza, llamando la atención de varias personas que caminaba por ahí, junto a ellas las dos chicas que se estaban besando en la banca. Dirigió su mirada hacia una de ellas, -Yoojung, específicamente- ésta se paró de inmediato, tenía una expresión de terror en su rostro. Jimin se acercó un poco, Yoongi yendo tras de él.— puedes quedarte con ella... —se refería a Doyeon, después redirigió su vista hacia la pelinegra.— tú te puedes ir al infierno... —y dicho aquello, se dio la vuelta para, ahora sí, retirarse, pues ya no tenía nada más que hacer ahí.

—¡J-Jimin! —llamó Yoojung, pero sólo recibió un dedo medio de la mano del rubio como respuesta.— Y-Yoongi... —susurró, pero el aludido sólo le dirigió una mirada molesta, llena de odio, cargó a Holly y entonces salió corriendo en dirección hacía Jimin.

Estaba destrozado, ¿Qué más le podría salir mal?

—¡Hey, Park, espera! —gritó el peligris, acercándose al rubio que ya llevaba bastante recorrido detrás.

—¡¿L-la viste?! —exclamó molesto, mientras que lágrimas seguían cayendo.

—Jimin... —susurró Yoongi, con algo de lástima por ver el estado del menor.— todo... Todo estará bien, ¿Sí?...

—¡No me sirve tu maldita lástima!... Y-yo... ¿Soy tan desagradable?...

—oh, Jimin, claro que no, ven, vamos...

—¿O es que acaso no supe valorarla?...

—Jimin... No digas eso, si alguien no supo valorar, es ella, por no ver a la persona que tenía en frente.— el mayor se cubrió la frente y ojos con su mano, en muestra de frustración.— ¿Sabes?... —Ya sólo se escuchaban los hipidos por parte del menor, quería saber lo que diría Yoongi.— no lo entiendo... Tú, siendo tan... ¡Wow!, ¿Es que acaso es tonta?... —murmuró.— eres una persona divina, no tengo nada más que decir —se descubrió sus ojos y entonces pudo apreciar el rostro completamente sonrojado del menor.

—h-hyung...

—a-ah... J-Jimin y-yo... E-ehh... N-no me hagas tanto caso... Y-yo sólo soy un idiota...

Pero en ese momento, el menor se acercó, intimidando un poco al mayor. Se paró de puntitas y entonces depositó un pequeño beso en la mejilla del contrario, abrazándolo después.

—gracias, hyung...

 

—•⨳•—

—es gay...

—¡Cuánto a que no!

—pero sí parece...

—igual Hoseok tiene cara de marico y bien que le gustan las papayas.

—¡Hey!

Mientras tanto, en la casa "Bangtan" —ya que así dijo Namjoon que se llamaría la casa— estaban viendo entretenidos la película "el stand de los besos", los chicos habían invitado a sus parejas, (excepto Hoseok, ya que T/n estaba en T/p) y estaban discutiendo acerca de que "Lee" podría ser gay, ya que la forma en la que se comportaba con "Elle" se parecía a esa con la que se llevaban las chicas en la preparatoria.

—pero igual se comporta así porque es su mejor amigo, ¿No crees, mi amor? —respondió Jungkook, abrazando más al castaño entre sus brazos.

—entonces... ¿Se quedará con ella? —miró Taehyung a su novio, haciendo un puchero, provocando una leve risa en el azabache.

—se nota que no la has visto... —murmuró Jin, apoyando su cabeza entre el hombro y cuello de Namjoon, aún no eran novios, pero ya parecían como unos.

—¡Oh!, Pero qué lindos se ven... Y uno aquí bien gracias... —chilló Hoseok.

—tú sigue abrazando a la almohada con la foto de T/n... —susurró Taehyung. El pelirrojo bufó después.

Pero entonces la puerta se abrió, revelando así a la silueta de un chico peligris, cargando a otro en su espalda, tipo "caballito", y un perrito a los pies de éste. El rubio que venía siendo cargado estaba dormido, pero aún se escuchaban pequeños suspiros y hipidos provenientes de su pequeña boca.

—¿Qué pasó? —preguntó en un susurro Taehyung, reincorporándose para ir hacia el apenas llegado, recogiendo al cachorrito entre sus brazos.

Pero sólo recibió una negación con la cabeza como respuesta por parte del peligris. Todos estaban confundidos, pero eso no impidió hacer que Yoongi subiera las escaleras, aún con Jimin en su espalda.

—les haré galletas... —informó Seokjin cuando aquellos dos ya se habían retirado, se levantó de donde estaba recostado y trató de buscar la cocina con la mirada.

—¿Sabes cocinar? —preguntó sorprendido Jungkook.

—¿Te casarías conmigo?—preguntó bromeando Namjoon, provocando un sonrojo en Jin.

—¡¿Galletas?! —exclamó emocionado Taehyung.

—¿Te ayudo? —se ofreció amable Hoseok.

—a-ah... Uno; sí, dos; en un futuro, tres; eso fue lo que dije, y cuatro; ¡claro! —les respondió, para después dirigirse a la cocina, siendo guiado por los chicos.

 

—•⨳•—

Llegó a su habitación y entonces recostó al menor en su cama. Se veía tan delicado, tan pequeño... Tan adorable.

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–p-perdón...

–¡Tus disculpas no servirán de nada! —gritó enfurecido su padre, azotando uno de los jarrones favoritos de su madre contra el piso.— sólo esto me hacía falta... Un niño inútil que además es marica... Ahg, me das asco —el hombre escupió a los tenis del menor.

–l-lo s-siento... P-pero de verdad me gusta... —dijo entre sollozos el menor.

–¿Qué va a saber de amor un mocoso de ocho años? Nada, no sabes nada, y prefiero morir que tener un hijo maricón como tú.

–p-papá... —vio como el hombre empezaba a agarrar varias cosas, colocándolas en una maleta.— ¿Q-qué haces?...