Fudanshi ❈ Ym

023

—Holly está completamente sana, sólo necesitará usar estas vendas por un tiempo, pero nada grave. —informa sonriente Jisoo.

—¡Gracias! —tomó al cachorrito entre sus brazos, recibiendo lamidas del pequeño.— ehh... ¿Ya me puedo ir?...

—¡Qué apuro!... ¿Y Jimin? —pregunta curiosa Rosé.

—ehhh...

Al ya terminar la revisión de su perrito, le llegó un mensaje de su mochi diciéndole que ya estaba esperándolo en el parque. Yoongi sólo le sonrió a Rosé y decidió salir lo antes posible de ahí.

—¡Espera! —llamó la pelirroja, haciendo detener al peligris.

—¿Si? —preguntó ansioso, ya se quería ir.

—sólo... Cuídalo mucho...

—lo cuidaré con mi vida... ¿Ya me puedo ir?

Rosé asintió y entonces Yoongi salió disparado hacia el parque.

Era extraño, ¿Por qué le había pedido algo como eso?... ¿Acaso... Algo había pasado con Jimin antes?...

Como sea, hoy aclararán las cosas.

Al llegar al parque se encontró a un lindo pelirrubio sentado en una de las bancas del lugar, estaba jugando con sus pies mientras que comía de un helado... De vainilla.

"Ahg... Te devoraría la boca por comer de mi helado favorito... Pero aún no es el momento."

—¿Jimin? —llamó el peligris, sobresaltando al rubio.

—¡h-hyung!... S-siéntese p-por favor... —Yoongi alzó una ceja manteniendo una sonrisa en sus labios, pues el rostro del menor se había colorado a tal grado de parecer un lindo y pequeño tomate. Precioso.

—ehh... —se sentó y como Holly venía dormido, lo recostó sobre su regazo para que descansara un poco. Le daba también pequeñas caricias en su cabecita.— ¿Qué querías decirme?...

Jimin movía sus manos nervioso, incluso casi se le cae su helado, se relamió los labios y miró a su hyung a los ojos. Yoongi estaba más confundido que curioso por la actitud del menor.

—b-bueno ehh... He-e estado p-pensando y... B-bueno... C-creo que... M-me gusta... —los ojos de Yoongi mostraban sorpresa, ¿Acaba de decirle que le gusta personalmente?.— a-ahhh... A-ahhh... ¡N-no me m-mire así!...

—Jimin... —habló Yoongi desconcertado— yo... ¿De verdad te gusto?...

Un leve asentimiento por parte del menor recibió como respuesta. Yoongi se encontraba bailando de felicidad internamente.

El pelirrubio decidió mejor desviar la mirada de aquellos ojos cafés que tanto le gustan y le hacen perder la cabeza. Siguió comiendo de su helado, pero entonces se manchó en la barbilla.

—oh, Jimin... Ven... —se acercó un poco, intimidando al menor, se puso rojo, y con el toque de la yema del pulgar de Yoongi hizo que sus ojos se cristalizaran. ¿Por qué tenía ganas de llorar ahora mismo?— J-Jimin, ¿E-estás bien? —preguntó preocupado, pero el menor no contestó, mejor le dio un pequeño abrazo, cuidando de que Holly no se sintiera incómodo, y empezó a llorar en el hombro del mayor.— shh... Tranquilo... —arrullaba mientras que acariciaba un poco la espalda del pelirrubio.— ¿Qué pasa?...

—y-yo... Y-yo... L-lo siento... —dijo entre hipidos, sorbiendo su nariz, estaba hecho un desastre, se estaba deshaciendo en los brazos de Yoongi.

—¿Por qué?... Tranquilo... —también empezó a acariciar su cabello.— está bien, tranquilo...

—n-no... E-es que... Y-yo... L-lo quiero t-tanto... Q-que m-me da miedo...

"¿Miedo?, ¿Por qué?"

—¿A qué le temes, Jiminie? —ahora empezaba a hablar en susurro, quería que su pequeño mochi dejara de llorar, le dolía mucho verlo así, y lo peor es que no sabe el porqué.

—a-a... P-perderlo... N-no se v-vaya... N-no quiero... N-no s-soportaría...

Aquello hizo enternecer al corazón del mayor, era tan dulce su pequeño, y tan puro, que de verdad muestra lo tanto que le afecta lo que está diciendo, sin filtro, esa sería una descripción completa acerca de los sentimientos de Jimin.

—¿Y quién te dijo que me voy a ir?... —rió un poco, los sollozos del rubio aumentaron— pero no llores... Por favor... M-me dueles... —el menor alzó un poco la mirada, los ojos del mayor conectando con los de él. Pequeñas cosquillas en el estómago y espalda.

No pudo soportarlo más, debía de hacerlo, tenía tantas ganas de hacerlo... Y lo hizo.

Por primera vez, Jimin y Yoongi se estaban besando. 
Los labios del menor eran muy dulces, tan esponjosos, tan... Perfectos. Y los labios del mayor encajaban a la perfección con los de Jimin. Era un beso perfecto. Un beso puro y lleno de sentimientos. Se decían todo lo que sentían el uno del otro en aquel sencillo y delicado contacto de labios.

Holly despertó y dio pequeños ladridos, haciendo que aquellos dos jóvenes chicos sonrojados se separaran. El cachorro lamió la mejilla de Yoongi, sacándole una pequeña risa, después se dirigió hacia el regazo de Jimin, lamiendo sus manitas, y acabándose del helado que había comprado el menor.

—¡Heyy!, ¡Mi helado! —se quejó el rubio, riendo después.

—¿Te compro otro? —propuso el peligris, haciendo sonrojar a Jimin, éste asintió tímido, haciéndolo sonreír, mostrando sus encías.

Jimin no lo sabía, pero a él era el único al que le había sonreído de verdad.

Yoongi se puso de pie, tomando la correa de Holly para que no saliera corriendo, después le extendió su mano a Jimin, que la correspondió tímido. Se puso igualmente de pie el menor, se sonrieron mirándose a los ojos, aquellas hermosas chispas sintiéndose de nuevo.

—¿p-pero e-entonces somos...? —habló el menor, sosteniendo la mano de Yoongi con un poco más de fuerza. Se sentía acolchonado, las pequeñas y gorditas manos de Jimin eran adorables.

—amigos —sonrió, desconcertando al menor— s-sí uhmm... L-lo que pasa es que... Hay que ir por tu helado primero –besó la frente de Jimin, haciéndolo sonrojar por milésima vez, se dio la vuelta y empezó a caminar. Sus dedos entrelazados.

Si son amigos, ¿Por qué se tratan como pareja?
 



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En el texto hay: kookv, yoonmin, namjin

Editado: 07.03.2021

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