Las vacaciones de verano habían iniciado al fin. Es curioso saber que antes sólo eran Yoongi, Namjoon y Taehyung haciendo locuras por ahí (Hoseok también, pero él estaba en T/p). Pero ahora habían más personas conformando su círculo de amigos, y vaya que son muy valiosas.
Hablamos de Jin, Jungkook y Jimin. Aunque también algunas chicas se juntaron, haciendo el círculo más grande y divertido.
La mansión "Bangtan" siempre estaba llena de personas. Algunas por la sala, o la cocina. También por las habitaciones, el jardín o incluso los baños... No hay que hablar de eso.
El punto es que todos se han vuelto más unidos que antes, y necesitan aprovecharlo al máximo, ya que en algún momento se separarían.
—¡Jiminnie! —gritó el mayor, sobresaltando a todos los que estaban viendo tranquilamente una película.
—¡Estúpido, asustas! —regaña Rosé, después le dio pequeños golpecitos al brazo de su hermano que estaba riendo un poco por la inesperada llegada de su novio.— anda, mochi, vete con tu novio a no sé dónde, ¡PERO DÉJENME VER MI PELÍCULA!
Taehyung que estaba a un lado de la pelirroja, empezó a soltar pequeños sollozos, siendo abrazado por Jungkook, quien le daba suaves besos en su frente, mejillas y ojos para apaciguar su llanto.
—lingo, lingo... —susurró el rubio y después sorbió su nariz.
Después de otros cuantos sollozos por parte de Taehyung, Jin y Baekhyun, por fin Jimin decidió irse de ahí junto con su novio a quién sabe dónde, sólo salieron de casa y comenzaron a caminar.
—¿Me dirás a dónde vamos? —pregunta divertido Jimin. Sus manos iban entrelazadas.
—te había prometido un helado... ¿No es así? —le sonríe dulcemente a su pequeño novio.
Entonces con la sonrisa que se le es correspondida por el castaño, (que muy pronto se volverá a tintar el cabello) se dio cuenta de la gran suerte que tiene. Esos ojos, esos labios, ¡Dios!, ¿Cómo es posible que un simple chico como él, un tipo aburrido y aficionado por los libros que también dibuja y juega un poco de basquetbol, pueda ser poseedor de un novio tan... Como Jimin?. Con tan sólo mirarlo se da cuenta que es su más grande tesoro. Cada milímetro de su cuerpo son como veinte quilates de oro y diamantes, y es todo suyo... Pero luego recuerda el verdadero propósito de aquella salida, y eso simplemente lo hace decaer un poco. Sonríe cabizbajo.— ¿A la heladería de siempre?... —pregunta en un bajo tono, cosa que no es desapercibida por Jimin que enseguida lo detiene en su caminar. Voltea a verle y se encuentra con un pequeño mochi con el ceño fruncido y haciendo un tierno puchero.
—te amo, me amas, ¿Qué ocurre? —dice de repente, de una manera que lo hace ver tan gracioso... Pero igual el mayor se aguanta las ganas de reír, como todo un campeón.
—no pasa nada... ¿Por qué? —pregunta sonriendo, desviando la mirada de los ojos de Jimin.
—¿Qué te tiene tan preocupado?
"¡¿Cómo lo supo?!"
—¿Q-qué?...
—estás rascando el bolsillo de tu pantalón...
"Bebé, das miedo."
—a-ah... Hay que ir por tu helado, ¿Te parece? –evade la pregunta y se apresura a ir hacia la heladería. Jimin no muy convencido por la actitud de su hyung, lo siguió de todas formas.
—•⨳•—
—¿Lo dices en serio?...
—así es... Yo... Bueno, perdón... Pero sabía que este día llegaría... Aunque no pensé que tan pronto... Lo siento, Jiminnie...
un capítulo re chikitiko, srry
Editado: 07.03.2021