Narra Samantha
-¿Podemos pasar?-dije asomandome a la puerta del salón
-Adelante, llegan justo a tiempo
Rebecca y yo pasamos y nos sentamos donde siempre, y la clase inició normal, aun que un par de minutos despues llamaron a la puerta.
-Adelante- dijo la maestra
-Buenos días, maestra, vine para asignarle a su nuevo alumno-dijo el prefecto
-¿Nuevo alumno?, Nadie me informó de esto- Mmm eso es raro
-Son órdenes de arriba, en fin, se lo dejo
-Si, adelante- suspiro resignada la maestra.
El chico que les decía entro por la puerta.
Todas las chicas babeaban por el, excepto yo, claramente. Por que incluso a Rebecca se le notó que le gustó.
-Buenos días, ¿puedes presentarte?- le dijo la maestra.
-Claro, un gusto, soy Elver- sonrió dulcemente.
Ja ja ja, una broma. Que estúpido
-Muy bien, Elver, te anotare en la lista para poder pasar asistencia, así que escribe tu nombre completo en el pizarrón, toma.- le dio un pulmón a Elver, y él comenzó a escribir su nombre.
Terminó y todo el salón se estaba riendo, pero yo no. No es gracioso
-Elver... Galarga... ¡¿Es una broma?!- dijo la maestra indignada.
-¿Qué?, yo sólo escribí mi nombre, ¿le parece una broma?-dijo "inocente"
-Ya, deja de hacerte el chistoso y escribe tu nombre real o te irás a dirección en tu primer día- dijo amenazante.
-Okay, okay, soy Omar- Sonrió y se volteó al pizarrón, borró el "nombre" anterior y escribió el suyo.... Bueno, otra broma, y obviamente el salón estaba lleno de risas... De nuevo.
-Omar Icon.... ¡Vete de aqui, no te quiero en mi salón!-dijo la maestra muy molesta
-Ya, ya, perdón, me llamo Christian Callen White, la tercera es la vencida, ¿no?- rió suavemente
-Ve y sientate donde haya lugar, señor White-dijo la maestra en un suspiro rendido.
-Trato hecho- sonrió y caminó hacia el lugar que estaba justo detras de mi.
Maldita sea.
-Más tarde-
Finalmente sonó la campana que indicaba el descanso, así que me fui con Rebecca camino a la cafetería, y fue entonces cuando ese chico nos vino a molestar.
-Buenos días, preciosuras, ¿me podrían acompañar a almorzar?, ya saben, soy nuevo y no tengo ni la menor idea de dónde está la cafetería - dijo coqueteando
¿Qué piensa que haremos? ¿Caer rendidas a sus pies? Pobre imbécil.
Preferí ni siquiera mirarlo, aun que Rebecca estaba como idiota mirandolo.
-Claro, te llevaremos... ¿Carlos?- dije friamente burlandome de su nombre.
Sé cómo se llama
-Christian- corrigió sonriendo -¿ y tú eres...?
-Samantha, y ella es Rebecca- nos presenté
-Lindos nombres para preciosuras como ustedes- sonrió coquetamente.
No va ni un día y ya no lo soporto, ¿puedo expulsarlo? ¿Si?... Zach me mataría
-¿Vas a querer que te llevemos a la cafetería o no? - pregunte mirandolo a los ojos con una mirada fría.
-Si, si, uhm... Vamos- dijo nervioso
Comencé a caminar hacia la cafetería mirando a la idiota de Rebecca, ¿en serio le gustó ese chico? Se ve que es un jugador.
Llegamos a la cafetería y el niño ese invitó el desayuno, no me quejo por que así no gasto dinero, aun que es poco pero da igual.
-Vamos, yo invito
-D-De acuerdo - dijo Rebecca tartamudeando.
Uy, pobre niña.
Yo preferí no decir nada.
-Y... Uhm... ¿Por qué no nos cuentas más de ti? - dijo Rebecca iniciando la conversación.
Vaya...
-Bueno, linda, como ya sabes, soy Christian, tengo 19 años, me gusta el color negro y el azul rey, me gustan los carros y... Pues ya, supongo que es todo- dijo atragantandose con su comida
-Es... Lindo- sonrio nerviosamente
Dios mio, Rebecca es la mas estúpida, y lo digo siendo su mejor amiga.
-Y bueno, preciosa, cuentame de ti
-Bueno uhm... Me llamo Rebecca, tengo igual 19 años... Me gusta bailar y cantar, y me gusta el color rosa- dijo sonriendo
-¿Y que hay de ti, hermosa?- me dijo
-Samantha, 18 años- dije fríamente
-¿Es todo?- dijo confundido
-L-Lo siento, a veces Samantha puede ser algo... Grosera -Excusó Rebecca
Espera, ¿grosera?
-No estoy siendo grosera, estoy siendo sincera, y compermiso, yo me voy- dije levantándome y yendome de ahí.
Odio que Rebecca haya dicho que soy grosera, ella sabe que yo soy así.
Narra Kristen
-Y así concluimos que los mayas fueron muy importantes en la historia, gracias por su atención- dijo Michelle terminando nuestra exposición sobre los mayas en la clase de Historia
—Muy bien, tomen asiento porfavor— indicó el maestro y nosotros obedecimos.
Fue buena nuestra exposición, espero que saquemos 10 ^.^
Hoy en la tarde habrá una fiesta y pues obviamente iré, soy el alma de esa fiesta jaja.