Capítulo 9: Sin verdades…

• Carlos!, ¿eres tú?, ¿esto es real?, estaba atónita, me temblaban las piernas, como llegaste aquí?, Carlos sonrió, soltó las armas y me abrazo fuertemente
• Estoy aquí Elena, te busqué como loco en Génesis y al no encontrarte vine a parar aquí a un sitio que desconocía, esta es otra dimensión oculta, me dijo….

Rápidamente y como pudo, Mat se puso de pie y grito,

•  No lo escuches Elena, te está mintiendo, ¡aléjate de él!, mírame a los ojos, no hagas esto, pudimos haber muerto allá afuera y ¿dónde estaba el?, yo fui quien estuve a tu lado arriesgando mi propia vida si fuera necesario, yo lo mire fijamente, no podía dejarlo así solté a Carlos, tome con mi otra mano el rostro de Mat y le dije,
• Gracias por ser un amigo incondicional, yo también hubiera dado mi vida por ti allá afuera, necesitas calmarte y descansar, hablaremos de esto más tarde, no es tan fácil como piensas…

Lo lleve acostarse nuevamente mientras me tomaba la mano para que no me separara de él, sabía que me necesitaba y por eso estaba ahí a su lado, sin embargo otra parte de mi corazón estaba arriba en el techo donde se encontraba Carlos, sabía que él me entendería, así que espere a que Mat durmiera, quite mi mano suavemente y subí las escaleras despacio, Juan estaba ahí me acerque y le pregunte como es que conocía a Carlos, me sonrió y dijo;

• Hace una semana caminaba con Ágata y Lourdes, me fui introduciendo al bosque cuando vi a Carlos algo desorientado, recién había llegado me enseño una foto tuya, me pregunto dónde estábamos yo le dije en Génesis y él contestó que este lugar no era Génesis  y que estábamos en otra dimensión
•  yo sabía que él no sabía de esto, le dije y subí las escaleras para hablar con Carlos.

Cuando subí la última grada de la escalera, vi a Lourdes sentada junto a Carlos con la cabeza recostada en su hombro, ¿qué ocurría? ¿Qué se supone que debía hacer? Vi como el brazo de Carlos pasaba por las espalda de Lourdes y la abrazaba, sentí una sensación extraña, quise regresar, retrocedí un paso dispuesta a darme la media vuelta, quizá había cometido un error al subir, pise alguna hojas secas del suelo y Carlos dio media vuelta, Elena! , me dijo algo sorprendido, Lourdes volteo algo incomoda, parecía haber llorado,

• Lo siento no quise molestar – indique, solo quería hablar con Carlos pero no se preocupen puedo hacerlo mañana, Lourdes se levantó
• No te preocupes Elena, de seguro tienen mucho que hablar yo me iré a descansar,  se fue bajando las escaleras.

Carlos se había puesto de pie, de pronto estábamos solos, frente a frente, tenía tantas cosas que preguntarle pero tenía miedo de escuchar lo que podría decirme,

• Carlos dime, la verdad, aun no logro recordar, Mat me contó su versión de la historia, pero necesito escuchar de ti las cosas, le dije ansiosa,
• ¡Calma Elena!, los recuerdos llegaran a ti, no imagino lo que Mat debe haberte dicho, pero si quieres creer déjalo así, prefiero no hablar más y confundirte, solo quiero que sepas , que estoy aquí por ti, no sabía de este lugar, debe ser una versión paralela a Génesis, pero saldremos de aquí, me dijo tomándome de los hombros,

Sentía mucha intriga y ansias por saber de mi pasado, quería saber realmente en quien debía confiar si en Carlos o en Mat, ¿porque Carlos me ocultaría las cosas?, ¿porque no me fue sincero desde el principio?, ¿acaso ocultaría algo realmente malo?, mientras Mat ¿sería la persona realmente correcta?, sentía miedo y no sé si quería seguir preguntando o llegar al fondo de todo esto, Salí de mis pensamientos armándome de valor para decirle;

• Carlos solo una cosa respóndeme con la verdad, la familia que me hiciste ver cuando desperté, ese niño y el hombre, realmente ¿eran algo mío?......sus ojos se entristecieron y me respondió;
• Lo siento Elena, no puedo decirte más, no me hagas más preguntas, solo quiero llevarte a Génesis a que vivas la vida que te prometí, luego recordarás poco a poco y ya no tendrás dudas de nada, por favor ya no insistas, solo no creas por completo lo que dice Mat, es todo lo que puedo decirte, me dijo dándose media vuelta,

Me quede callada mirándolo de espalda, no sabía qué hacer, sabía que ya no me diría nada más, y a la vez me sentía más confundida aún, quizá era mejor dejar de forzar  las cosas y seguir adelante, sentí algo de frustración conmigo misma, pero preferí no quedarme más ahí… baje las escaleras y por alguna  razón tampoco quería estar cerca de Mat, quería estar sola y que amaneciera rápidamente para buscar a Becky.

De pronto, corría en un hospital, a lo lejos veía una camilla y doctores, todo era muy difuso, parecía un niño tendido sobre la camilla, yo solo corría para alcanzarlo, ingresaban a una sala de operaciones y me cerraban la puerta dos personas con batas blancas, uno era Mat y otro Carlos, desperté del sueño asustada, ¿habría sido algún recuerdo?, corrí a buscar a Carlos, subí al techo y no estaba, baje rápidamente a buscarlo, estaba acostado en un mueble, no me importó verlo dormir solo lo sacudí y le pregunte; Sala de operaciones, Mat y tu en un hospital, había un niño en esa camilla, ¿quién era?, ¿Qué paso con él?, Carlos algo desconcertado, me dijo,

• ¿qué ocurre?,
• ¡solo contéstame!  -  grite, se quedó callado mirándome, para solo contestarme,
• No sé de qué hablas, debes descansar un poco,
• ¡mientes!, le dije enfurecida, tú lo sabes y no haces más que ocultarme la verdad, bien, si tu no quieres contármelo entonces iré a preguntárselo a Mat, le replique,
• No hace falta que vayas a buscarme, interrumpió Mat, estoy aquí, pero creo que debo coincidir con Carlos, que no sé de qué hablas Elena, debes estar cansada