Guerra monarca (lgbt)

Capitulo 6: No recibas menos de lo que mereces.

Mateo, luego de cabalgar hacia el reino de Cosmos por unos largos minutos, llego a su destino. No regreso por el mismo camino por el que se había ido porque no confiaba en que Nicolas pudiera pagarle una moneda de oro a algún guardia para que le hiciera mucho daño. Si se trataba de Nicolas Georgiou, todo podía pasar.

Mateo se bajó de la yegua y la llevo hasta la caballeriza, dándole como recompensa más comida de la que le habían puesto los encargados. Le dio un beso en la cabeza y finalmente corrió al castillo entrando por la puerta trasera.

Hoy no era su día, pues lo primero que vio al entrar al gran salón, fue la cara de perdedor de su hermano mayor, quien no tenía una expresión muy agradable que digamos, aunque no era de asombrarse, pues Maximus siempre tenía esas expresiones si algo no salía como quería.

—Hasta que por fin te dignas a llegar a casa —dijo, levantándose del sillón. Camino hasta su hermano, le agarro la mandíbula con su mano de recha derecha, y lo puso de perfil, viendo como en la comisura de su labio había un gran moretón. —Veo que el bosque no te trato tan bien como pensabas.

El rubio tenía una mirada de desprecio ante su hermano. Le fastidiaba escucharlo, y verlo comportarse como el hermano mayor honrado y protector que nunca fue. En un descuido, Mateo le quito la mano y retrocedió.

—Lo siento padre, si me fui, aunque no me diste permiso. —murmuro con un puchero fingido y con todo el sarcasmo del mundo.

—Mateo, sé que me odias por el pasado, pero a lo que te limito hacer es precisamente para protegerte de lo dañino que puede llegar a ser el mundo allá afuera.

—Maximus, no empieces con esto, ya sabes cómo son nuestras peleas cuando intentas hacerte el protector cuando en realidad lo único que quieres es llegar al trono y que sigamos siendo la familia número uno de la monarquía.

Maximus miro a su hermano y puso su mano en uno de los hombros de este. Mateo inclino la cabeza para ver la mano de su hermano en su hombro. Dejo salir un suspiro y la volvió a levantar para apreciar al castaño, quien de inmediato volvió a hablar.

—Pequeño, lo único que quiero es que tú y Greta puedan vivir una vida armoniosa. No quiero que les pase nada malo, y tampoco quiero que hagan algo de lo que se puedan arrepentir más tarde —Maximus mostro una sonrisa leve, mirando los grandes ojos de su hermano que lo observaban con mucha curiosidad.

—He hablado con el rey de Maragos y ha dicho que quiere que hable con papá para dejar esta guerra que llevamos por tantos años —la mirada del mayor se puso curiosa ante lo que su hermano menor decía. Aquello se volvía en algo muy útil para él.

—Estoy seguro de que papá va a acceder a eso, solo tienes que decírselo con calma.

El príncipe asintió a las palabras de su hermano.

—Espero que se lo tome de buena manera cuando le diga.

—Lo hará... ven aquí. —y sin previo aviso, Maximus agarro a su hermano y lo abrazo con fuerza. Sus labios se pusieron en la cabellera del rubio dejando salir un suspiro, a lo que Mateo permanecía con sus ojos cerrados apoyando su cabeza en el pecho de su hermano, siendo capaz de escuchar los latidos de su corazón. —Deberías ir a ver a Greta, ha estado muy preocupada porque no habías vuelto.

Mateo se separó del abrazo y asintió.

—Iré a verla. ¡Buenas noches!

—Buenas noches, Mateo. Que descanses.

El rubio mostro una sonrisa y camino por el lado de su hermano comenzando a subir las escaleras. Cuando los pasos se volvían menos ruidosos, el castaño se giró y miro las escaleras solitarias, ya Mateo había llegado al piso superior. Entonces la sonrisa que antes tenía se le esfumo de inmediato. Sus ojos demostraban la ira que había estado oprimiendo, y rápidamente se aflojó el cuello de la camisa. Sentía que su cuerpo en cualquier momento iba a explotar.

—Tengo que impedir que papá acepte hacer las paces con esa familia de mediocres. Aunque dudo mucho que papá acepte cualquier trato proveniente de los Maragos. Estoy seguro de que Deacon Georgiou está tramando algo. —suspiro acariciando su mentón con su mano derecha. —Sea verdad o mentira que Deacon quiere hacer las paces, lo debo impedir a como dé lugar. También debo de impedir que Mateo vuelva a escapar del castillo aun si eso implica contarle toda la verdad a papá. Al fin de cuentas, eso me ayudaría mucho para agrandar la confianza que tiene hacia mí. —Maximus dejo salír una carcajada no tan alta ya que podía ser escuchado, pero de que tenía que hacer algo para que la familia Roussos y la familia Georgou nunca hicieran las pases, lo tenía que hacer.

...

Mateo llegó en frente de la habitación de su hermana. Toco dos veces y la puerta de inmediato fue abierta por Greta.

Su hermana tenía cara de angustia, pero al ver a su hermano menor se abalanzo hacia este y lo abrazo con fuerza.

—¡Mateo!, ¿estas bien?

El rubio acaricio la espalda de su querida hermana y una sonrisa se formó en su rostro.

—Estoy bien Greta, no te preocupes.

La princesa se separó de aquel abrazo viendo el moretón que tenía su hermano en la comisura de su labio y lo que traía en la cabeza.

—¿Que te paso Mateo?, ¿te lastimaron? —preguntó con nerviosismo de que su hermano la haya pasado muy mal en el bosque.

El rubio negó.

—No, no, solo me caí mientras lograba llegar al reino.

La princesa agarro a su hermano de la mano entrándolo a la habitación, cerrando la puerta tras de sí. Observo a su hermano caminar hacia la cama y sentarse en el borde.

—Lo vi Greta —murmuro el rubio, lleno de felicidad.

—¡Mateo! —la princesa se emocionó aún más que su hermano. —¿Has visto al rey de Maragos en persona?

El príncipe asintió, viendo más de cerca a su hermana ya que esta se sentó a su lado, sujetándole las manos.

—¡Lo he visto!

—¿Y cómo es su personalidad? ¿Es frio como en las fotos?



#3513 en Otros
#398 en Aventura
#218 en No ficción

En el texto hay: lgbt, boyslove, reyesyprincipesgays

Editado: 15.07.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.