Capitulo 8

PUM, PUM

PUM, PUM, PUM, PUM

PUM, PUM…

LOS LATIDOS DE NAILA, ERAN MÁS FUERTES QUE NUNCA.

—¡Increible!, ¡Mamá se veía hermosa, poderosa, invencible! — Brinca por todas partes de la casa —¡Sus alas eran lindísimas!, ¡aayyyy diooosssss!, ¡Que lindas, aun las recuerdo y me estremezco! — Cae en el sillón boca abajo,

—Es la primera vez que veo a mamá así, realmente parecía otra persona…— Hace el intento de recordar su rostro —Sus ojos… eran lindos— Dijo Evans aun sin poder creerlo.

—¡Oh!, que sorpresa, pensé que ya la habían visto antes con la unión— Menciono Irene confundida —Bueno, aunque supongo que es lo normal— Ríe ligeramente.

—¿Eh? — Dijo Evans

—¿Eh? — Dijo Naila

—¿Qué? — Dijo Irene

—¡¡¡¿¿¿¿Eeeeeeehhhhhhh???!!! — Cuestionaron Evans y Naila a la vez.

—¿Comparten la misma neurona acaso?, me están asustando.

Ambos se acercaron rápidamente hacia su hermana mayor y con mucho asombro le cuestionaron lo que para ella era obvio.

—¡¿Cómo?! — Cuestiona Evans

—¡¿Cuándo?! — Cuestiona Naila

—¡¿Donde?! — Cuestiona Evans

—¡¿Por qué no nos lo dijiste?! — Cuestiona Naila

—¡¿Qué necesidad tenías de guardarte el secreto?! — Cuestiona Evans.

Ante tal abrumadora situación, Irene solo pudo retroceder varios pasos hacia atrás para que no la terminen sofocando con tanta presión.

—¡Stop!, ¡Stop! ¡Stoooooopppp! — Dijo colocando ambas manos al frente —¡Dios mío!, cálmense un poco ¿sí?

Naila y Evans se voltean y hablan entre los dos en supuestos susurros.

—Lo sabía, quiere volverse enemiga nuestra, ¿La amarramos y la tiramos al mar? — Dijo Evans con una mirada muerta.

—Nuestra hermana es una impostora, propongo envenenarle la comida con popó— Dijo Naila con una sonrisa macabra.

—Buena idea, brillante de hecho— Alaga sorprendido.

—Lo sé, lo sé— Se cruza de brazos estando orgullosa.

—Los estoy escuchando— Dice Irene mirando con asco —Hacen eso y cuando duerman les hago comer 10 veces más.

—Digna de una villana— Responde Naila poniéndose en guardia —¡Pero, no me vencerás, el mal siempre cae!

En ese momento Irene le da un pequeño golpecito a Naila en la cabeza.

—¡Ay! — Gime de dolor y coloca ambas manos en su cabeza —Me rindo.

—Dios mío— Suspira Irene —¿Recuerdan que yo siempre era la que se despedía de mamá cuando ella iba de compras?

En eso tanto Evans como Naila se regresaron a mirar como quien se decían, “Es verdad”.

—Para ella poder ir a comprar tan lejos tenia que unirse a Lune, solo así puede volar— Observa con una mirada de superioridad —Yo siempre la despedía y la recibía, es normal que no la vieran, siempre andan en sus cosas en lugar de ser un poco mas responsables, además de eso, de pequeña también la observaba hacer varias veces la unión, incluso a Evans lo llevó a dar vueltas por el cielo.

—A la bestia, no lo recuerdo— Responde sorprendido.

—¡Qué pena… además en ese entonces aun eras un bebe cagón!

—¡Hey!

—Jeje… cagón— Dice Naila.

—Y para que les quede claro, la unión de mamá no es la más hermosa…— Observa seria —La más hermosa…

Irene se puso seria de repente, recordando ciertas cosas del pasado.

—La más hermosa…— Sonríe —Aunque me cueste decirlo…— Su corazón se hace pequeño —La unión más hermosa… fue la de papá.

En ese instante Naila quedó helada observando a su hermana, intentando procesar algo que nunca se le había pasado por su mente, algo que en las historias que Melisa le contó no estaba… y es… si Irene estaba ahí presente cuando su padre aun estaba con vida.

—Tu… ¿Conociste a Even? — Se acerca colocando sus manos cerca de su pecho — ¿Conociste a mi padre?

—Oh… es cierto que nunca lo mencioné, pero… conocí a todos…

—……— Naila Observa adolorida.

En eso interrumpe Evans.

—¿A todos?, ¿Quieres decir que también conociste a mi madre y mi padre?

—……— Agacha la mirada un poco —Si…— Levanta la mirada —Even me rescato cuando estuve a punto de morir en ese sitio… me hizo querer vivir, por ello… lo consideré mi padre, me acogió en su corazón como si fuese su propia hija, me amó como si de verdad hubiera sido su hija… al igual que Melisa… la cual considero mi madre— Toma una pausa y un ligero respiro —También conocí a Lyna… en todo el tiempo que vivimos juntos ellos dos simplemente eran buenos amigos, pero tan unidos como ningún otro, también supe la clase de persona que era Celia y Nash… tus padres Evans… es por eso que puedo decir con seguridad que todos… eran personas realmente maravillosas, bondadosas y llenas de determinación…

—……— Naila escucha con la cabeza agachada.

—Papá lo dio todo, luchó hasta el final con la unión mas hermosa de todas… una unión color azul… tan profundo… que me llega al corazón y me congela de alegría— Sonríe.

—Ya veo— Sonríe Evans —Tuviste la suerte de conocerlos a todos, aunque también viviste una guerra ¿no es así?, mamá lo mencionó alguna vez.

—Si… aunque lo que realmente sucedió fue una invasión… donde casi morimos todos… de no ser por papá y los esfuerzos de todos… no estaríamos aquí.

—Con que es así…— Dice Evans aliviado de no haberlo vivido en carne propia.

Por otro lado… Naila… no se sentía de la misma manera.

—¿Ocurre algo Naila? — Cuestiona Irene al notarla rara —……— Se acerca e intenta levantar su barbilla.

En eso, Naila levantó su mirada y apartó a Irene de una ligera cachetada, dejándola en shock al igual que a Evans quien observaba confundido sin saber que hacer.

—Te odio— Dice Naila llorando —¿Dices que papá te amó?... ¿Lo recuerdas como si fuese ayer?, ¿Te da felicidad recordar su rostro y el de mi mamá?

—……— Irene observa sorprendida colocando su mano en su mejilla roja.

—Yo no puedo…— Observa con lágrimas e impotencia —Te conté muchas veces las historias de mamá… de lo mucho que me hubiera gustado saber si mi padre me hubiera amado… de lo mucho que me gustaría saber como era su rostro… y tu… no me contaste ni una sola vez que lo llegaste a conocer… no solo me lo ocultaste si no que dejaste que te contara algo que creo que ya sabias… ¿Era divertido?, ¡¡¿Te divertía mi ilusión?!!