Capítulo 3

Imperio de Hong Ming

- Su Majestad la Emperatriz pide que la visite - informa uno de los sirvientes.

- En cuanto pueda iré - responde; el sirviente haciendo reverencia se marcha.

El Emperador suspira pidiendo que lo dejen a solas. Camina hacia el jardín privado.

Aún lo recuerda hace 15 años. Llego una mujer bellísima para tomar el cargo de Maga Imperial: piel blanca, ojos verdosos profundos y cabello rojizo.

- ¿Dónde estarás? - suspira nostálgico.

Flash Back

El estaba ascendiendo al trono, aún no se había casado.

- Srta. Me permite un momento - había solicitado disfrazado.

- Lo siento tengo asuntos que atender - pasa a un lado.

- Es una lastima - suspira.

Decide marcharse, cuando observa que ella está lidiando con unos guardias.

Ella logra manejar la situación a la perfección pero uno de ellos va a traición. Él interviene.

- ¡Su Alteza! - exclama el traidor asustado, ella lo mira sin interés.

- Serán castigados por ir contra el Emperador - ordena a toda voz - serán ejemplo - asegura.

- Lo sentimos - se arrodillan aterrorizados.

Ella se mantiene alejada. La situación es resuelta en un chasquido.

- Lamento lo ocurrido - se disculpa él.

- Está bien - hace una reverencia marchándose.

- Alteza ha puesto los ojos en algo imposible - asegura su leal amigo.

- No hay victoria sin esfuerzo - sonríe de lado.

Fin flash back

Escucha un carraspeo.

- ¿Nostálgico? - interroga su leal amigo - ¿La extraña? - el Emperador asiente - Todos lo hacemos - suspira - pareciera que siguiera su presencia en cada rincón de este Palacio.

...

Saura se desplaza tranquilamente por el pasadizo, llegando a su guarida.
Limpia la sangre seca. Tendrá una reunión importante en poco tiempo, así que se acicala veloz, estando pulcra. Se marcha a la superficie manteniendo su capa.

- La estábamos esperando - dice un hombre de tez morena y ojos almendrados.

- Los escucho - responde ella.

- Él está asustado... Pide verla ha ocurrido un incidente que casi le cuesta la vida - ella abre los ojos incrédula - de no ser por uno de los espías...

- Comprendo - suspira - llévame a él - es guiada por sus informantes.

En una casa cerca de los límites del territorio, vive un joven de 15 años junto a unos parientes lejanos.

- ¡Xiaomi! - el joven corre a ella - ¿Qué te ocurrió? - se estrechan en un abrazo.

- Fuí a la ciudad en la carreta a vender los productos y sé que ellos se encargan pero quería hacerlo... De regreso aparecieron unos ladrones apuntádome con dagas y flechas - cierra los ojos - creí que moriría - exhala - los caballeros del Emperador me salvaron - la observa a los ojos.

- ¿Entiendes por qué debes prepararte? - habla calmada - no puedes jugar con tu vida, debes protegerte - sujeta sus hombros - aún te falta - busca a alguien con la mirada - a partir de hoy aumentará el entrenamiento hasta que seas capaz de usar una espada, daga o hechizo de ataque y protección Xiaomi - ordena.

- ¿Por qué eres tan insensible? - murmura.

- Atacame - exige - ¡Vamos Xiaomi! - se burla - ¿A caso no puedes?

- Eres mi protectora ¿Por qué hacerlo?

- ¿Incluso sí te lo pide la Emperatriz? - inquiere sacándolo de su zona.

- No lo haría - afirma.

- Así fuera ella tu madre - él traga grueso.

- No, no lo haría - dice serio.

- Con la misma firmeza que respondes, quiero me des tu palabra, de no volver a intentarlo - asegura severa.

- Te doy mi palabra - dice firme - Yo Xiaomi Jiangsu Lu, no volveré a intentarlo.

- Tu palabra tiene valor - le recuerda - es necesario que estés listo para enfrentar tu destino pronto tendré que contarte algo importante - sin pensar le da un abrazo y mimos - sé fuerte y sigue brillando, no dejes que nada perturbe tu corazón - besa su frente.

- Gracias Saura - susurra.

- Quiero que seas capaz de proteger aquello que amas - suspira - nos veremos muy pronto y llámame Dong - ambos ríen alejándose.

- Saura - murmura uno de sus espías - la Emperatriz pronto entrara en la etapa en que la serpiente saldrá de su cuerpo para devorarla - explica.

- ¿Cuanto? - interroga.

- Menos de 6 meses ha estado dormida pero algo la despertó y su sed devoradora es imparable a los medicamentos que nos entrego.

- Tranquilo has hecho lo que pudiste - suspira - ¿Algo más que informar? - mira a lo lejos.

- Como predijo todos aquellos que apoyan a la Emperatriz se están moviendo. - explica - Aún no hemos encontrado pistas del incidente, lo lamento - dice sincero.

- Descuida Lucas, has hecho más de lo que podrías - sonríe - encárgate de las cosas mientras estoy en aislamiento.

- ¿Será por mucho tiempo? - indaga cauteloso.

- Sí, más que la última vez - puntualiza. - Debo terminar de expulsar el veneno de mi cuerpo.