Hasta que mi corazón deje de latir.

CAP. 2 ¿Que pasó?

Despierto dispuesta a comenzar un nuevo día, abro mis ojos percatandome de un pequeño detalle no sé ¿Dónde estoy? Bueno tratemos de adivinar aqui todo es blanco, estoy en una pequeña cama individual, hay una ventana en frente, en la mesa veo unas hermosas flores recién cortada y huele a desinfectante como en los hospitales.. Un momento reversa hospital ¿Que demonios ago en un hospital?  

Ay dios quiero a mami ya siento mis ojos aguarse ¿Que ise ayer? O ¿En que pelea me metí? ¿Que pasó?

Diosito yo sé que soy media loca pero yo espero no haber sido secuestrada por vampiros para robarme sangre o no se secuestrada por aliens para usarme de encubadora ¡Ay ya no sé en que estoy pensando!

 ¡Santa María madre de Dios ruega por esta pecadora...

La puerta interrumpió mi reso entrando por ella una señorita pequeña vestida de enfermera con piel bronceada bueno no párese ni vampiro, ni mucho menos aliens pero según los libros los aliens pueden parecer huma..

  - Señorita disculpe me está escuchando 

La miro un poco asustada mientras ella agita su mano derecha frente a mi cara.

  - Ah, oh sí ¿Que decía?

Ella me mira con cansancio mientras levanta la libreta que lleva en su mano izquierda, si la miro con detalle es pequeña de estatura, su pelo es rojo bajo ese sombrero blanco de enfermera, ojos café, cuerpo promedio..

  - Podría por favor decirme ¿Cuál es su nombre?

   - Mi nombre es Madelin Cyber.

La enfermera hace unas anotaciones mientras chequea el suero que ya casi está vacío 

  - Muy bien señorita Cyber ¿Recuerda que le pasó?

  - No, no recuerdo como llegue aqui, ni por qué.

  - Está bien, el doctor pasará a verla para saber si se puede ir. Fuera del cuarto está un señor esperando verla, él dice que la encontró desmayada en el estacionamiento de su trabajo.

Ella salió dejándome con un recuerdo borroso que se fue aclarando al ver al pequeño niño entrar por la puerta que hace poco se cerró pero lo extraño fue el caballero que le seguía con una mirada tímida y avergonzado con su pelo negro como la noche más oscura, ojos verdes que me dejaron hipnotizada sin poder apartar la vista de él. Bueno si es un vampiro con mucho gusto dejaría de beba de mi.

  - Disculpe nuestra impertinencia señorita solo quería saber si ya está bien.

Extrañada por no saber quién es pero esperando que sea el padre o hermano de Sebastián pues tiene una apariencia menor de 27 años.

  -  No hay problema yo estoy mejor pero perdone podría decirme ¿Quién es?

  - Oh cierto que grosero mi nombre en Max Payne. - me ofrece su lado derecha la cual toma con gusto sintiendo una suavidad y calidad increíble. - Soy el padre de Ian, señorita Cyber. Ah no es vampiro qué decepción quería mi propio Edward.

   - ¿Ian? - ignorando que sabe mi nombre.

Párese un modelo de revista que bello es.

   - Oh... Este me refiero a Sebastián es que es un diminutivo de su nombre.

Me comenta mientras acarisia la cabeza del pequeño que se molesta por despeinarlo. ¡Que tierno!

  - Papá mi pelo.

Nos reímos por lo delicado que es y le ofrezco que tomen haciento mientras me explica todo lo que pasó y como salve a su hijo de ser secuestrado por unos enemigos del trabajo, entra el doctor dándome de alta, a lo que me llega un recuerdo muy extraño pero que no les mencione pues tarves solo alucine.

  - Todo esta bien, solo debe  tomar estos medicamentos por dos días y estará como nueva señorita Cyber, ya puede irse.

  - Gracias doctor.

  - Con su permiso yo me retiro.

El doctor sale del cuarto, cerrando tras de él. Trato de levantarme para poder ir al baño pero me mareo, casi me caigo a no ser por Max que me sostuvo justo a tiempo haciéndome sentir una pequeña eléctricas por todo mi cuerpo.

  - WoW, gracias, ¿Sentiste eso?

Estoy emocionada pues nunca antes sentí eso con otra persona fue como un choque de energías. El me  mira asombrada pero luego la cambia por confucion. 

  - ¿Que cosa?

Su cara es tan perfecta... Uff concéntrate Lincy.

  - Ay, no me digas que solo yo sentí ese choque eléctrico.

Haciendo un puchero de perrito abandonado logró que sonría mirándome con dulsura. No sé de dónde viene está confianza y tranquilidad con él pero se siente como si nos conociéramos hace mucho tiempo.

  - Si yo también lo sentí 

Eso me alegra mucho pues no estoy loca. Oh qué ilusa soy.

Me sienta en la cama, lo miro agradeciendole, trato de buscar mi celular al encontrarlo en la mesa descargado me desánimo, él lo nota de inmediato.

  - ¿Que sucede?

  - No tengo baterías podrías prestarme el tuyo para llamar a un taxi que me lleve a casa.

  - Claro pero nosotros podríamos llevarte, ¿verdad campeón?

  - Si papá.

  - No le gusta hablar mucho ¿Verdad?

No sé por qué lo pregunto si ya me di cuenta en el colegio es peor ni siquiera tiene amigos.

  - No es que...

  - Oh no, no tienes que decirme y acectare que me lleven, gracias.

De ahora en adelante tratere de ayudar a ese niño.

La enfermera de antes viene a retirarme el suero y los cabellores me ayudan a llegar al auto.

  - Entonces señor Payne por qué nunca lo vi en reunión de padres o recogiendo a su hijo, no es que le este reprochando, es que no lo había visto antes.

El me mira extrañado y eso me pone un poco nerviosa.

  - Es que ayer él estaba solo cuando trataron de llevárselo y ya era muy tarde. Bueno eso sí es un reproche.

  - La entiendo es que el trabajo no me deja tiempo, se que no es escusa pero soy padre soltero, soy nuevo en esto.

Oh soltero, por que me alegra eso. 



#17913 en Fantasía

En el texto hay: aventura, amor, mistero

Editado: 08.08.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.