¿Es una despedida o un adiós?

Mili
Ya habían pasado dos días de la cena en casa de Aron y aún no hablábamos. Aron no tuvo otra opción que entrar por mi ventana, ya que no le había de volver las llamadas ni los mensajes.

Yo me encontraba, serrando mi última maleta, me sorprendí al verlo.

-¿Que ases aquí?-No lo mire a los ojos.

-Tenemos que hablar

-Lo sé

-Perdón yo no sabía que él- se disculpó.

-No tienes por qué disculparte por los actos de las personas la que se tendría que disculpar soy yo Contigo y tu mamá, que se han preocupado por mí, y no tenía que hacer eso, pero.. No dejo que terminara y me dio un beso.

-No tenías por qué pasar por esto sola, ¿por qué no me dijiste antes?- tomo un mechón de mi cabello.

-No era fácil, no es fácil hablar de eso

-Ahora que lo se te apoyaré, te amo.-beso mucho frente para reconfortarme.

-¿Y tu mamá, cómo está?- traté de cambiar el tema.

-Está mejor, sé que lo superará porque es muy fuerte, después de que te fuiste le pidió el divorcio.

Me sorprendí al escuchar eso, - yo no, perdón.

-Ya  no hablemos de eso- pidió.-¿Por qué tantas maletas?- señaló las maletas- ¿Saldrás de viaje?-

-No estoy tratando de donar ropa que no uso es solo eso- mentí.

-Bueno, sabes te amo- volvió a repetir.

-Tienes hambre- su cara fue de completa confusión.

-Por qué siempre que te demuestro mis sentimientos cambias el tema.- se apartó un poco.

-Se qué hay un sentimiento de mí hacia ti, que no logro identificar y me pone tan maltraté de explicar.

-Eso es amor- frotó su brazo

-Y si no lo es, ¿y si no es amor lo que siento?, quiero identificar cada emoción cuando estoy a tu lado, sentir lo que tú ocasionas en mí-sollozo.

Trato de acercarme a él, pero se aparta. Duele su indiferencia verlo con los ojos llorosos.

-Aron- le hablé.

-Déjalo  Mili- camino ala ventana y salió.

Me quede llorando en mi habitación.

Más tarde llegó Camila, tenía que hablar con ella antes de irme.

-Me aras mucha falta ogro- lloraba

-solo será  un tiempo-

-Lo que más me duele es que no pasaremos juntas nuestro último año.

-Pero vendré para la graduación- la consolé.

-No es lo mismo - lloró más.- Me aras falta, ¿Quien me despertara cuando la clase termine?

-Por Dios Camila!!- la regañé en broma - yo también te extrañaré, eres como mi hermana una de las personas que siempre ha estado conmigo, Te quiero-le confesé.

Nos abrazamos y lloramos juntas.

-¿Has hablado con Aron?-

-Aún no, si te soy sincera no quiero, no me gustan las despedidas esperaba que tú.

-No Mili ni loca va tienes tú que hablar con él.

-No soportaría verlo llorar una vez más por mí, me duele y mucho verlo así.

-Mili- por mar que le suplique al final aceptó.

Toda la noche la pase rondando en la cama, no podía dormir  aparte que Camila dormía superfeo; hoy era el día iría a un lugar donde  por fin recibiría ayuda, para poder dejar todo atrás, "poder volar después de la tormenta".

Me levanté y entre a la ducha, el agua corría por todo mi cuerpo lo que causó que mi cuerpo se relajara, cuando salí de la ducha tome una sudadera y unos vaqueros.

Mi vuelo saldría a medio día así que aún tenía tiempo, salí dela casa sí que nadie se diera cuenta. Por suerte el panteón se encontraba vacío, llegue a la rumba de Alondra, no me podía ir sin despedirme.

Tome asiento.-Han pasado muchas cosas "A" tenía tiempo sin llamarla si, solo quiero que sepas al final voy a cumplir la promesa de ser feliz, iré a un lugar donde me ayudaran a superar todo, y así lograr ser feliz.

Quiero que sepas que te quiero y nunca lo dejaré de hacer y cuando regrese te vendré a dejar un hermoso ramo de flores.

Me quede un momento en silencio y márgenes de ella llegaron a mí-Eras una pequeña niña llorona- sonreí- sabías que cuando llegaste me enoje con papá, pero después te vi y le pedí que no te llevaran.-limpie mis lágrimas.- Bueno me tengo que ir, Te quiero y gracias por ser mi hermana-

Camine de regreso a casa, Camila apenas despertaba-Buenos días- la salude.

-¿Que hora es?-se quitó las lagañas de los ojos.

-11:00 has dormido mucho, párate rápido si quieres ir al Aeropuerto, conmigo.

Se levantó rápido y entró   a la  ducha, nunca había visto a alguien ducharse y cambiarse tan rápido.

-Todo listo vámonos- hablo papá subiendo la última maleta.

-¿No olvidas nada?-me pregunta nana.

-No, respondí-cuando subí al auto recodé que algo se me olvidó- Espera si- baje del auto y corrí a mi habitación por el oso que Aron me regaló.-Listo vámonos.

Camila no me quería soltar seguía llorando mientras me abrazaba,-Cami se me ara tarde- la separé un poco.

-Ya te extraño y aún no te vas- limpio con su manga sus lágrimas.

-No exageres, regresaré no es como si me fuera para siempre.

-Parece que si- sollozo y la volví a abrazar.

Saqué de mi mochila de mano, un sobre y se lo entregué a Camila.- Entrégaselo por favor -

-Lo aré, tenlo por segura-

Me acerqué a papá para despedirme  y también lo abrace- cuídate por favor- le susurre- Pronto volveremos a estar juntos.

-Te  quiero hija, y perdón -me dio un beso en mi mejilla.

-Y yo a ti papá-

-Te marco cuando lleguemos allá-le aviso  nana a papá

Camine con Nana ala sala de abordar.-No lo dejes solo por favor- le pedí a nana.