Hermandad: Ciudad Oscura (vol.4)

Por ser a quien debo proteger.

La primera que vez que hablaron fue en un parque cercano, entre donde Esmeralda vivía con sus padres y donde los hermanos e Iris vivían.

Ahí, Iris elogio su forma de hacer figuras de cristal y cuando le dijo que no podría volverse artista por sus propias razones y por orden de su madre, ella le sugirió su siguiente pasó.

— ¡Entonces seamos heroínas!— La pequeña Iris de doce años ese día llevaba un vestido azul y sus largos cabellos castaños sueltos volando por el aire­. Le regalo una gran sonrisa— Con un poder como el tuyo podrías enfrentar al mal ¿No? Yo solo puedo hacer de foco pero imagínate un dinosaurio de cristal que se mueva y que derrote a los malos.

— ¡Sería genial! Pero mis cristales no se mueven…— La pequeña Esmeralda llevaba un pantalón de tipo pescador y una blusa de color azul con flores amarillas grabadas en los bordillos.

—Podrías asustarlos de todas formas— Iris se cruzó de brazos, pensativa.

Era una idea un poco loca y que seguro que a su madre no le gustaría pero no pudo evitar imaginarse la imagen de los criminales huyendo de un dinosaurio de cristal rosa y se le hizo bastante divertido.

— ¡Piénsalo, podemos hacer gran equipo! ¡Aunque solo puedo hacer de foco!— Le dijo Iris mientras se despedía con la mano— Por cierto me llamo Iris ¡Vendré a jugar otro día! ¡Juguemos!

—Espera— Esmeralda no entendió porque en ese momento corrió tras ellos pero sin pensarlo le dio el caballo a Johan a quien le gusto cuando lo vio— Si vendrás después, puedo hacer un dinosaurio… Yo… Soy Esmeralda.

— ¡Sería genial! ¡Me gustan los tiranosaurios!—Le dijo Iris, emocionada.

— ¡Muchas gracias!— Johan, de tan solo diez años, estaba que no cabía de la emoción de tener el caballo.

—Gracias— Le agradeció también Santiago, su hermano mayor con una leve sonrisa. Era quien los acompañaba en esa ocasión.

—Oh, cierto— Iris saco un par de chocolates y se los dio a las chica que se quedó algo sorprendida— Los hace mi hermano mayor pero son muy ricos ¡Puedes tenerlos! ¡Nos vemos!

Al final, Esmeralda recuerda que tuvo que esperar a volverla a verla y que después de todo nunca le dio el tiranosaurio que quería, sino una especie de Apatosaurio que ella acepto al final con una gran sonrisa.

Supuso que fue el brillo de Iris lo que la impulso a alcanzarlos aquel día para darles el caballo o quizá fue el hecho de que pensó que podría ser divertido tener a Iris cerca. O quizá ambas cosas.

Pero desde entonces, ambas se volvieron inseparables.

Iris se movió a gran velocidad hacia ella, lista para patearla desde arriba pero Esmeralda lo esperaba, la conocía y se movió justo antes de que la patada cayera sobre ella, por lo que decidió contraatacar y trato de golpearla, teniéndola ahí cerca a lo que su rival lo esquivo por poco, provocando que le sujetara el brazo para que no se aparte,y acto seguid lanzo un golpe hacia su rostro desde la barbilla.

Esmeralda la desvió con su otra mano, a lo que Iris inclinándose un poco, hizo girar sus piernas entre las de ella para tirar a Esmeralda, y en el suelo trato de dejar caer su pie en su cuerpo para inutilizarla pero su rival giro en el último momento y se apartó por poco.

— ¿Para qué serán los lentes?— Preguntó Aylin con curiosidad— ¿Son especiales para verla? ¿Estarán permitidos?

—Las armas y aditamentos tecnológicos no están prohibidos mientras no sean armas de fuego o algo que no esté registrado previamente por los organizadores— Le explico Santiago a los tres chicos acompañantes se giraron a verlo— Seguro debieron preguntarles por armas al iniciar y si se usan aditamentos, también, sobre todo venenos y gases.

— ¿Se puede usar veneno?

—Sí, cualquier cosa pero en ese caso necesitan los organizadores una muestra del veneno y del antídoto— Santiago recordaba haber visto a uno que otro que utilizaba veneno durante uno de los combates— Pero si usas veneno y no lo registraste, entonces podrías meterte en problemas y lo mismo ocurre con armas ocultas. Solo los organizadores las deben conocer todas, incluso esas. Por eso también hay tanta seguridad y no dejan salir a los concursantes de su área hasta que todo termine.

—Vaya, no sabía eso…

—Solo que aquellos sin poderes que logran participar lo saben— Santiago se encogió de hombros— Te lo digo porque yo llegue a participar y lo hice con un cuchillo nada más.

Aylin recordó que Santiago antes estudiaba para ser héroe así que le pareció lógico que participara, tomando en cuenta que su poder era increíble aunque este no fuera tan llamativo.

—Pero la verdad es que no creo que este usando lentes especiales— Johan miraba el combate con atención. Esmeralda había recibido un golpe directo de Iris otra vez pero esta también le llegó un golpe en el costado con sus cristales— Aunque pudiera verla, no podría alcanzarla con su velocidad así que sospecho que los está usando solo para cubrirse los ojos y evitar que brille mucho.

—Iris es muy rápida— Santiago asintió.

Iris de nuevo se sujetó el costado con fuerza, tratando de no doblarse mientras que Esmeralda escupió sangre en el cuadrilátero para justo después, limpiarse los labios con su antebrazo.




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