Hielo y Sombra - La guerra del norte

Capítulo 12

Déctor - Barena

 

 

—¡Dreysha!—Gritaba desesperado con la niña llorando en sus brazos.—Dreysha… no te mueras, perdóname, hermana mía.

 

Un fuerte golpe de las armas de asedio los hizo volver al momento presente.

 

—Ella te ha pedido que te lleves a su hija. Si el alfa ha caído, eres su única familia—dijo la dragón con la que momentos antes había luchado.

 

—¿Es verdad lo que dijo? ¿Ella no fue secuestrada?

 

—Es verdad. La princesa vino por voluntad propia para ser la compañera de Praxius. Ella dejó una nota la cual vuestro padre ocultó matando a su nana.

 

Déctor afirmó con la cabeza y se puso de pie, tomando su espada.

 

—Detendré el ataque.

 

Caminó por el pasillo con la niña en brazos y bajó las escaleras, al cruzar por el gran comedor completamente destruido, solo pudo ver cadáveres, y cosas horrendas: soldados violando mujeres, vampiros bebiendo de moribundos, incluso lobos comiendo la carne de los muertos...

 

La desazón embargaba su alma. Ahora entendía todo. Esta guerra había sido una decisión terrible tomada por un hombre terrible.

 

Atravesó los muros destruidos en forma de sombra hasta llegar al campamento que se encontraba asentado al pie de la montaña y entró en la carpa en la que su padre y Dinaro se encontraban.

 

—¡Déctor!—Exclamó el regente con una fingida alegría, seguramente también esperaba que él muriera.—¿Qué traes ahí?

 

Pero Déctor sumido en su dolor, no respondió, simplemente levantó la espada y seccionó de un solo golpe la cabeza de su padre, la cual tocó el piso antes que su cuerpo inerte.

 

Dinaro quedó paralizado al contemplar la escena.

 

—Déctor—murmuró, completamente pálido.—¿Qué has hecho?

 

—Lo correcto.

 

—Pero…—su voz apenas se escuchaba.

 

—Y tú seguirás si intentas detenerme—amenazó extendiendo su espada hacia el heredero al trono y sin dejar de atesorar a la pequeña que ahora se había dormido.

 

—No, por favor hermano. No sé que es lo que pasa…—balbuceaba.

 

—¡Él nos mintió! ¡Nos mintió todo el tiempo!—Gritó desquiciado.—Nuestra hermana no fue secuestrada. Ella huyó para casarse con ese dragón.

 

—No es posible, Nani estaba muerta...

 

—¿Eres tonto Dinaro?—Exclamó.—Padre la mató, él también escondió la nota que había dejado Dreysha, lo hizo porque quería las tierras de los dragones... La usó como excusa, ¡nos usó a nosotros! Hemos masacrado miles de personas inocentes… ¡Nuestra hermana está muerta!… Por la ambición de este… monstruo.

 

—No lo sabía—su rostro demudado por el horror mostraba su sinceridad.

 

—Me iré con mi ejército a Itzoz. Haré de la isla mi lugar y criaré a la hija de Dreysha como mía—declaró.—Y no quiero volver a saber de ti—sus palabras quedaron flotando en el aire mientras se retiraba en forma de sombra.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.