ENCUENTROS

¡Claro que era la misma fotografía! Solo que estaba incompleta. Uno de los padres de Omar era el hijo de Alexis, había encontrado sin buscar tanto a su hijo. Faltaba ver como reaccionaria él, pero de algo estaba segura, no me iría de esta casa hasta saber los verdaderos motivos del distanciamiento.

                Iván regreso y detrás de él venían sus padres, sonreí fascina. En primer lugar por el descubrimiento, en segundo porque había ante mí tres hombres lo suficientemente atractivos como para cumplir una fantasía.

-¡¿Quién es el hijo de Sofía?! –dije sin saludar, Omar tenia cara de asombro y sus padres se miraron de manera extraña

-¿Qué dices? Por Dios Nurit estás loca ¿Cómo sabes el nombre de mi abuela?

-Sencillo, esa fotografía me dio la verdad, Alexis menciono que tenían dos fotografías una enmarcada y la otra suelta, y yo tengo en mi poder la del marco.

-Sí te das cuenta en esa fotografía sólo está mi abuela y mi padre, no lo es ¿o sí Iván?

¡Listo! Tenía la respuesta, Iván era el hijo de Alexis y Sofía, ambos hombres se miraron estupefactos hasta que por fin uno hablo.

-¿Fuiste tú quien publico la convocatoria?

-Sí, soy yo –dije segura, comencé a detallar las facciones de los 3 hombres, Omar sin duda se parecía más  al otro, a quien no había hablado, barba de candado, ojos color  miel, tez blanca, definitivamente él era Iván –Y fue usted quien escribió en la mañana y no volvía a contestar ¿por qué lo hizo?

-¿Quién te crees tú? ¿Acaso crees que puedes venir a quitarle la tranquilidad a una familia? –dijo el otro hombre

-¡Papá!

-Por Dios hijo, date cuenta, estábamos muy tranquilos sin que nadie nos mencionara a la familia de ese hombre. No sé quién es usted señorita, hija, nieta, amante de Alexis; lo que sea tampoco me importa, pero te voy a pedir que no vuelvas a esta casa buscando ayuda para él. Ese hombre no es bienvenido en nuestras vidas.

Sólo, por favor dígame las razones

Los padres de Omar se miraron inquisitivamente, quien había mandado el mensaje a la convocatoria movió un poco la cabeza y sonrío.

-Seguramente es tu abuelo, eres insistente como él. Hablaré hoy contigo y no volveré a hacerlo, así que te recomiendo que pongas atención.

Me hizo un ademan para que me sentara, estaba tan ansiosa, y aunque yo sabía perfectamente que no era familiar directo de Alexis no diría nada hasta finalizado el relato.

-Su abuelo y yo nos llevábamos bien, cuando mi madre murió  dejo un testamento en el cual hacía responsable de mi educación a Alexis, aunado a ello dejo también un fideicomiso para el pago de mi escolaridad. No voy a negar que Alexis se portó conmigo como un padre, pero cuando cumplí 18 y comencé a preguntar por mi dinero él simplemente me ignoro. Nuestra relación se terminó el día que decidí salirme de casa, busque un cuarto en donde vivir. Yo sabía que él podía dosificarme el dinero del fideicomiso para mi estudio, se lo pedí y me lo negó, dijo que si quería vivir solo aprendería a rascarme con mis propias uñas. Y fue en ese momento cuando me jure que nunca más volvería  buscarlo. Me pregunte un millón de veces que había hecho con mi dinero, pero nunca tuve una respuesta. Cuando estudie la universidad su emporio publicitario comenzó a ser el más  importante del país, así que decidí que competiría con él.

-Por eso publicidad Blanca 100% verdad –durante el relato de Iván había caído en la cuenta que estaba en la casa de los directores de la agencia de publicidad que siempre nos pisaba los talones; de quien generaba la mayor competencia para Sofie’s Publicidad.

-Sí, por eso, y aunque Alexis me debe muchas explicaciones no voy  buscarlo de nuevo, él me enseño que en esta vida nadie es indispensable, lamento mucho la situación en la que se encuentra pero… eso no es de mi incumbencia.

-Sé que no lo haré cambiar de opinión, pero por favor, en dado caso de que desee visitarlo. Se encuentra en el Hospital de Especialidades de México en el área de Geriatría, es de los internos que ocupan un lugar en  la casa de descanso del hospital; está en  la habitación 203 y lo atiende la Dra. Altamirano, si dice que es su hijo lo dejaran pasar de inmediato. Tiene Alzheimer avanzado, la mayor parte del tiempo no reconoce a las personas pero tiene ciertos momentos de lucidez, estoy segura que su vivita le hará muy bien, y respondiendo a las preguntas anteriores, no soy su nieta, ni su hija, ni su amante; Alexis no tiene más familia que usted.

Suspire y me use de pie, miré a Omar y su cara de decepción me hizo sentir un poco mal, pero mi fascinación era más grande que nada.

-Es hora de que me vaya, Omar discúlpame pero mi trabajo es mi trabajo, recuerda que después de la tormenta viene la calma